Cumplido su destino como el último Sangre de Dragón, el primer Sangre de Dragón ha estado recuperando su poder para volver y ejercer su dominio. ¿Quién saldrá victorioso cuando estos dos se enfrenten?
Era pasado el mediodía, Corin se encontraba caminando hacia el centro de la isla de Solstheim. Hubiera querido ya haber llegado ahí en la mañana pero terminó pasando algo ni bien salió de Roca del Cuervo.
Encontró al capitán de la guardia Redoran, Modyn Veleth, siendo atacado por unas criaturas extrañas llamadas Engendros de Ceniza.
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Estas criaturas al parecer se volvieron habituales en la isla desde los tiempos en que la Montaña Roja erupcionó. Emergen de los suelos y atacan a cualquiera.
Roca del Cuervo estaba siendo últimamente atacada por estas criaturas cada vez más seguido, el capitán Veleth intentó averiguar si había algo o alguien mandándolos y resultó que así era justamente.
El General Imperial Falx Cario del fuerte Polilla Helada estaba enviando a los engendros para destruir Roca del Cuervo, pero había algo que no cuadraba. Dicho general había muerto hace 200 años durante la erupción del volcán, pero resultó ahora que no estaba muerto.
Sin embargo, si estaba muerto, lo que sucede es que lo revivieron o reanimaron. Alguien llamado Ildari estuvo llevando a cabo experimentos para concretar una venganza y trató de usar al General revivido para sus propósitos.
Cosa que al final no le terminó resultando.
-A no ser que la persona de la que quería vengarse sea alguien de Roca del Cuervo.
Pero cuando Corin descubrió y se lo dijo al capitán, este no parecía conocer a nadie con ese nombre, siendo que el mencionó que ya vivía en Roca del Cuervo desde hace bastante tiempo.
Por ahora, el problema había sido arreglado, puede que más adelante vuelvan a suceder ataques de los engendros, pero ahora la guardia Redoran ya podrá hacerse cargo.
Corin siguió caminando guiándose por el mapa de la isla que consiguió del tabernero. Después de salir del Baluarte y llegar a la granja donde encontró al capitán siendo atacado, Corin trazó la ruta con su dedo y se dirigió hacia el norte.
-¿Hmm? Hay alguien ahí.
Después de haber caminado por medio kilómetro, Corin pudo divisar una figura humanoide. Para asegurarse de que podría ser lanzó el grito Susurro del Aura, por el efecto de detección descubrió que se trataba de una persona.
Sin embargo, eso solo lo hacía más curioso. ¿Qué hace una persona sola por aquí? ¿Podría ser un bandido?
Aprovechándose de la magia con la que estaba encantada su cota de ébano, Corin pudo acercarse sigilosamente para ver lo que estaba haciendo esa persona.
Al llegar ahí, encontró a un elfo oscuro tratando de excavar, los pocos rastros de edificación que se podían ver le recordó a Corin los túmulos nórdicos por los que se aventuró en Skyrim.
