La obsesión de un demonio

Interrogatorio

— Yo estoy perdidamente enamorado de ti Sunny.

Siempre desee que alguien me dijera eso de manera sincera, desde lo más profundo de su corazón, incluso el escenario es de lo más hermoso, toda la situación sería un sueño hecho realidad para mí, sin embargo las circunstancias son otras y yo también. Ya me han dicho esto muchas veces como parte de una apuesta para probar el valor de la masculinidad tóxica de varios que me han hecho daño por mi ingenuidad, pero incluso si mi pecho palpita impaciente y emocionado no volveré a caer inocentemente. Si Jin quiere jugar conmigo no lo permitiré, no cometeré el mismo error otra vez.

Solté mi mano de la suya y la tape incómoda con los dedos de mi zurda. Voltee mi rostro,concentrando mi mirada en mi regazo. Suspiré frustrada lo cual Jin hizo que crispara su gesto. Lo siento pero no te creo.

— Jin, puedo tolerar si no deseas responder con la verdad, pero no bromees conmigo por favor.

— Sunny, no estoy bromeando. — Sentí su pesado mirar en mí. Lo vi de reojo, su semblante era serio y no había ninguna pista de que estuviera jugando. — Incluso si no me crees puedo decirte con toda sinceridad que el simple hecho de tenerte frente a mí parece un sueño hecho realidad, me hace muy feliz. —

— Me amas tanto que me trajiste a este lugar en contra de mi voluntad. Si, claro. — Mis frías palabras lo dejaron sin habla. De un momento a otro todo el enojo que tenía dentro de mí no aguanto más y decidió salirse de mi control.

— Jin, tú no me amas, suponiendo que lo que dices es verdad puedo confirmar con total certeza que tu no me amas realmente. Si en serio lo hicieras, te asegurarías de que yo también fuera feliz pero creo que no entiendes la situación. Te lo voy a dejar simple para que lo entiendas, en una relación ambos deben ser felices y en esta ocasión adivina qué, tú estás feliz de que yo esté aquí pero yo no. Lo que tú sientes es una, una, una...

— Obsesión.

Me robó las palabras de la boca. Estoy ardiendo en rabia, siento como mi cuerpo está caliente, mi cabeza palpita y mis puños están blancos por la presión que ejercí sobre ellos. Tengo que calmarme, no soy una persona que se enoje con facilidad, siempre guardo el enojo, pero cuando se acumula termino por explotar como una bomba de tiempo. Y este es mi tiempo récord en la categoría "lo más rápido que Woo Sun se ha enojado con alguien". Vamos, si no te calmas no podrás obtener ni una migaja de información. Nos habíamos quedado callados por unos minutos lo cual bastó para poder controlarme a mí misma. Jin abrió la boca como si tuviera algo que decir pero no estaba seguro de hacerlo.

Después de desahogar mi enojo me encontraba más tranquila, además siento que mi mente está más despejada. Nada de lo que me diga va a hacer que me exalte, de eso estoy segura.

— Yo ya me desahogue, ahora te toca a ti. — Bufé divertida. — Si vas a decir algo dilo, quiero escucharte. —

— Yo... tengo conciencia de que una parte de lo que siento por ti es obsesión, pero estoy totalmente seguro de que me encuentro genuinamente enamorado de ti, es amor puro y sincero. Yo jamás te haría daño porque... 

Infló su pecho con fuerza y se giró hacia mí decidido, acercó con cuidado sus manos hacia las mías. Su mirada era una mezcla de amor, dolor y deseo. Realmente solo era una suposición mía, ya que nadie jamás se había enamorado de mí, así que no tengo ni idea de cómo es cuando alguien te mira con amor. Lo que sí puedo asegurar es que lo que Jin fuera a decirme era cien por ciento verdad. Cedí ante su agarre por lo mismo, una de mis manos la depositó en su mejilla y la otra la sostuvo con fuerza sobre su pierna.

— Te amo tanto que mi pecho duele cuando evitas mi mirada, tanto que tenerte así de cerca me pone sumamente nervioso y provoca que la velocidad de mis latidos aumente cada vez que rozo tu vestido. El simple hecho de respirar tu aroma me hipnotiza, me hace sentir que en cualquier momento puedo perder control de mi raciocinio y besarte con intensidad. Pero ante todo te amo tanto que no quiero cometer un error que pueda lastimarte.