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11 de Noviembre de 1994, Tw: Gore y menciones de sangre.
Tu cabeza daba vueltas, comenzaste a relajarte.
Ya estoy drogada, ya. Luego le reclamaré a Malfoy
Y a tus músculos, poco a poco, se les fue yendo la tensión acumulada. Cerraste con calma tus ojos, y te recostaste en la manta negra del picnic, tus lágrimas secándose en tus pestañas.
Draco, en cambio, observó cada uno de tus movimientos como una clase de psicópata, algo, que en un futuro se convertirá. Abriendo sus ojos de par en par, dando una imagen escalofriante, maquiavélica y enferma dando al Draco Malfoy, egocéntrico y coqueto conocido, una imagen completamente distinta. Una amplia sonrisa, tan grande y maniática.
Sus ganas de en ese mismo instante correr hacia ti y tocar cada parte de tu cuerpo, las partes que ni siquiera se muestran a simple vista, incluso, explorarlas con sus dedos, su lengua, escanearlas, de manera de que nunca jamás se le olvidaría la persona más perfecta del mundo.
Pero se contuvo.
Apretó sus manos en unos puños, casi sacando sangre de ellos, manteniéndose al supuesto margen.
Soltó una pequeña risa, de esas que lanzan los malos en las películas cuando saben que su plan, ya está hecho.
Se agachó y pasó sus nudillos por tu mejilla con finura, mirándote con tal afabilidad. Se acercó a tu cara, y depositó un suave beso en tus labios.
Se volvió a su altura normal, y suspiró fuertemente, sonriendo tan maniático que daba escalofríos.
- Mi querida •••, es hora de que tú y yo le demos un espléndido show a mi linda T/N.- dijo mirando un punto fijo del bosque.
Y con eso, su plan, dió la tercera llamada.
Que inicie el show.
- ¡AHHHHHHH!- un fuerte grito sonó por tus oídos.
Abriste tus ojos, y todo estaba borroso, apenas y veías, gracias a tus lágrimas y el efecto de la droga.
- ¡Oh por Merlín, aléjate de nosotros!
- ¡Malfoy, tú aléjate de ella!
Escuchabas voces indistintas, pero escuchabas fuerte y claro la de Draco.
- ¡T/N, nos quiere matar! ¡Tiene un cuchillo y nos quito las varitas!- Draco gritaba con frenesí, casi enloquecido.
- ¿Qué? No... ¡No! ¡No! ¡Para! ¡Me quiero ir!- T/N balbuceó con desespero y terror, sintiendo sus lágrimas florecer de nuevo.
