Capítulo 15: Pero me importa una mierda

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Narra Mary

No había podido conciliar el sueño como tanto quería. Pero es que tan solo el reloj marco las 7:30 AM alguien toco mi puerta para que bajara a desayunar. Con desdén me levante y fui directo al baño. Me mire en el espejo y no pude evitar sonreír. La noche anterior había sido una completa locura, no esperaba que terminara de esa manera.

No sabía muy bien como continuaría todo después de eso. Michele se había comportando como si lo que paso entre nosotros era un gran alivio para él, no había remordimiento alguno en su mente y según él, todo estaba bien.

Mientras me duchaba pensaba una y otra vez en todo, mientras que él decía que no sentía remordimiento yo por otra parte si lo sentía. ¿Qué pasaría si alguien se dio cuenta? ¿Y si nos escucharon? Leonardo definitivamente perdería la cabeza. Y yo no podría ni mirarlo a los ojos si él lo supiera.

Al terminar de ducharme me vestí con ropa casual, unos jens claros altos, una blusa de mangas cortas de rayas negras y unas botas negras sin tacón. Al llegar al comedor me encontré con Jaqueline, Luca y su novia, Elio y Dalia y un Michele con cara de cansancio, de hecho estaba usando unas gafas oscuras mientras sobaba su sien con molestia. Justo cuando iba a tomar asiento junto a Jaqueline Matty apareció adelantándose y me arrebato el puesto. Observe los dos puestos restantes y un gemido de molestia se me escapo.

Jacqueline: Siéntate querida, ¿Qué esperas? – me dice al notar mi presencia –

Observe el puesto con la silla más grande y supe que ese era el asiento favorito de Leonardo, nadie más se sentaba allí más que él. Pero luego estaba otro disponible, este estaba situado junto a Michele. No vi otra opción y tome asiento. Todos seguían concentrados en sus teléfonos o en leer el periódico pero pude notar como el moreno giro su cabeza hacia mí y sabía bien que a través de esas gafas me estaba viendo.

Decidí ignorarlo y no verlo pero aun así me sentía incómodo. Por un momento lo vi sonreír con burla y observo su plato. ¿Por qué sonríe?

Momento después Leonardo termino por entrar a la sala del comedor y tomo asiento.

Leonardo: Buenos días familia ¿Falta alguien? –

Jaqueline: Buenos días cariño. No, estamos todos-

Leonardo: Entonces a comer-

Y así todos comenzamos a servirnos de comer en nuestros platos y comenzamos a desayunar. Intentaba por todos los medios solo concentrarme en mi comida pero estaba algo incomoda porque Michele no paraba de mirarme mientras comía.

Por un momento golpe su pierna por debajo de la mesa con mi pie pero el solo sonrio y sin esperarlo tomándome desprevenida poso su mano sobre mi muslo casi tocando mi zona íntima. Me quede quieta y trague en seco, de repente sentí mucho calor y quise salir corriendo pensando que los demás se darían cuenta pero todos estaban muy concentrados en comer y hablar entre ellos.

Michele movió sus dedos lentamente cerca de mi vagina y entonces lo mire mal. Con cuidado sin que nadie se diera cuenta tome su mano y la aparte enseguida. El solo sonrio y yo tuve que tomar agua para pasar ese tarugo por los nervios que se me hizo en la garganta.

Al terminar mi tazón de frutas pedí permiso y me retire del comedor. Estaba algo temblorosa pero es que estar tan cerca de Michele mientras teníamos a nuestro padre en frente me ponía en un estado de pánico como si Leonardo fuera capaz de leer nuestras mentes y saberlo todo. Llegue al segundo piso de la casa y camine por el pasillo hacia mi habitación. Estaba por entrar a mi habitación cuando un mensaje de texto me distrae y saco mi teléfono del bolsillo. Era un simple mensaje de mi madre avisándome que estaría en la playa. Le respondí enseguida y justo cuando termino de enviar el mensaje soy atacada por alguien quien me empuja hacia la habitación.

Tu Eres Mí Pecado -🔥 Michele Morrone 💘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora