Capítulo 27: Temas por aclarar

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Hasta aquí llega la maratón. Espero les haya gustado la lectura.

Narrador Omnisciente:

Las voces en el primer piso aviso al resto de la familia que ya habían llegado los que faltaban.

La mirada de Mary quedo clavada en Michele quien bajo las escaleras de inmediato. Ambos se mantuvieron a una distancia prudente pero se saludaron con cordialidad.

Michele abrazo a su hermano menor y luego a Samantha. La mirada del moreno se clavó en la del rubio, y ambos solo estrecharon manos como si ambos supieran que con tan solo eso, se decían que todo estaba bien entre ellos. Michele estaba muy agradecido por la protección que le habia dado a Mary durante todo ese tiempo.

Pero de repente apareció un hombre alto y fornido quien, cansado, muy cansado. Salió de su oficina para poder ver a las personas que esperaba.

Leonardo habia llegado la noche anterior junto con sus hijos y nueras. Ambas mujeres aún seguían descansado mientras que Elio y Luca estaban por alguna zona de la propiedad hablando con los guardias de seguridad.

Mary observo a su padre, por un instante se mantuvieron distantes hasta que ella corrió a sus brazos. Leonardo suspiro aliviado de que ella lo abrazara. No esperaba esa reacción de su parte, de hecho se habia preparado para alguna otra cosa.

Leonardo: me alegra que estés bien mi vida- le susurra mientras acariciaba su cabello rojo-

Mary: a mí me alegra que tu estés bien y sano- le sonrie con algunas lágrimas saliendo de sus lagrimales.-

Leonardo: lamento mucho todo lo que han vivido. Todo es mi culpa. Pero te prometo que aquí estaremos a salvo. – La abraza nuevamente- aquí estaremos bien- susurra.-

Jaqueline observo la escena enternecida. Pero supo que ellos necesitaban estar un momento a solas para hablar.

Jaqueline: Ven cariño, te mostrare tu habitación – le dice a Matteo tomándolo de la mano. El castaño se dejó llevar por su madre –

Mientras que Anabela se llevó a Samantha hacia la cocina. Carlo quien habia estado observando la escena con calma espero que padre e hija terminaran su encuentro.

Michele por su parte se fue hacia el jardín trasero. Que abundaba en naturaleza y tenía un gran tamaño. Tenían una gran piscina y una casita al fondo, de un solo piso, preparada para que viviera la servidumbre.

En la sala de estar mientras padre e hija charlaban la mirada de Leonardo dio con la de Carlo. El rubio camino hacia ellos y entonces supo que era momento de despedirse. Ya habia terminado su trabajo.

Leonardo: Carlo, hijo mio – dijo con orgullo y emoción al verlo nuevamente. Lo abrazo y beso su mejilla sintiendo un profundo aprecio por aquel muchacho-

Carlo: Es bueno verte de pie- le sonrie –

Leonardo: tuve que hacerlo. No podía quedarme acostado mientras mi familia estaba en riesgo- dice mirando a su hija- gracias por traerlos a salvo, te debo mucho, demasiado –

Carlo: no es nada, sabes que tu familia es como mía, protegerlos no era un favor para ti. Lo sentí como un deber propio- aclara y entonces el moreno de ojos verdes se sintió muy orgullo de el-

Leonardo: quédate este día, descansa, come y luego podrás volver a tu vida- le invita para que pase unas horas en aquella casa y logre descansar despues de tantos días bajo presión-

Carlo acepto sintiéndose muy agotado. Sabía que si no dormía al menos unas horas terminaría desmayándose en algún lugar. Subió las escaleras en busca de Jaqueline para que le dijera que habitación podía usar.

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⏰ Última actualización: Oct 05, 2023 ⏰

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