Tu Eres Mí Pecado -🔥 Michele Morrone 💘

Capítulo 24: Máxima Seguridad 2/2

Narra Michele:

Mi madre quien estaba muy nerviosa constantemente, sobre todo por la seguridad de su esposo, estaba bebiendo Té mientras leía alguna novela romántica o de misterio, de esas que ella amaba. Me acerco a ella y al notar mi presencia deja de lado el libro para regalarme una suave sonrisa sincera y llena de cariño.

Jaqueline: Hola querido-

Michele: hola, estás leyendo – murmuro mientras me siento con ella-

Jaqueline: necesito distraerme y no pensar en tu padre-

Michele: estoy seguro que está muy bien, tiene todo un ejército cuidándolo- refunfuño mientras que la mirada de mi madre se torna más seria-

Jaqueline: sabes hijo. Tu personalidad cada día se torna más parecida a la de tu padre- me dice con una voz firme. Evidentemente eso creía ella pero no nos parecíamos en nada-

Michele: No lo creo madre. – Ruedo los ojos – no quiero hablar de Leonardo –

Jaqueline: ¿Y a que viniste entonces? –

Michele: Francesco se fue a proteger a Leonardo, me pidió que me quedara con ustedes. Y obviamente ya deben saber que no pueden salir de la propiedad- le digo y ella asiente-

Jaqueline: entiendo. No saldré de aquí. –

Ambos nos quedamos en silencio por un momento hasta que parece recordar algo y me mira.

Jaqueline: ¿Sabes si María está bien? para ella todo esto debe ser tan frustrante –

Michele: está bien, logre hablar con Carlo y con ella. La hice entender que es mejor que salga del país.- le explico y ella asiente pero su mirada me decía que aún estaba preocupada- estará bien-

Jaqueline: Sé que esto es muy difícil para los dos- murmura tocando el tema que no queria hablar con ella- tu padre me lo conto todo.-

Michele: pues que chismoso- murmuro y me encamino hacia la mesa donde estaban los licores –

Jaqueline: Michele. ¿Por qué no me lo dijiste antes? Estas cosas no se ocultan, yo soy tu madre sabes que puedes confiar en mi –

Michele: No es un tema fácil de tratar y María y yo quedamos en que sería un secreto. –

Jaqueline: Pero la amas – susurra mientras observa sus manos ¿Triste?-

Michele: La amo mucho, pero es algo que estamos intentando superar.- ella asiente y entonces puedo notar una lagrima silenciosa que rueda por su mejilla- Madre – me arrodillo frente a ella y la miro fijamente – no te sientas triste, lo vamos a superar-

Jaqueline: no se trata de sus sentimientos. Ustedes no tienen la culpa, ni quiera sabían que eran hermanos. –

Michele: ¿Qué ocurre entonces?-

Jaqueline: son los secretos que carcomen el alma hijo, eso pasa- su voz se quebró y me abrazo como si dependiera de ese abrazo. –

No comprendía a que se refería, el secreto habia salido a la luz y no tenía por qué avergonzarme. Como ya lo habíamos explicado muchas veces, no sabíamos quién era el otro, pero mi madre era una mujer sensible y sabía bien que ella era una caja de pandora, guardaba muchos secretos, sobre todo de mi padre.

Le acaricio su cabello, su espalada hasta que logro calmarla. Su mirada se volvió rojiza por el llanto intenso y su rostro blanquecino reflejaba ojeras debajo de sus ojos, ella no estaba descansando bien y eso me preocupaba mucho.

Michele: No quiero que pienses en cosas negativas. No solucionaremos nada mientras nos quejemos y lloremos desgastándonos. – Acaricio su mejilla mientras limpio sus lágrimas- Todo va estar bien-