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— Lixie... ¿Estás llorando?

— N-No— mintió, mientras se secaba las lágrimas de sus ojos.

— Ow, el gatito llorón volvió— Changbin fue hacia él y lo abrazó.

— ¡No me digas así! — se quejó, mientras escondía el rostro en su pecho y más lágrimas surgían.

— Está bien, Lixie— dijo el castaño—. Ven, vamos a la cama.

Felix rodeó su cuello con sus brazos y su cintura con sus piernas, dejándose cargar hasta el dormitorio y una vez en la cama se mantuvo pegado a él.

— ¿Qué pasa, gatito? — preguntó Changbin.

— Tu eres mío, mío— lo abrazó un poco más fuerte y Changbin rió con ternura.

— Lo soy, Lix.

— Y no me gusta que ese idiota moleste...

— A mí no me molesta que venga a hablar, no le guardo rencores...

— Yo sí.

— Pero hoy se pasó en serio, Felix, dime ¿Te lastimó mucho?

— Eso no importa— el híbrido negó.

— Sí que importa, me importas.

— No sería la primera vez que me golpeo, Changbin— Felix se encogió de hombros—. Estoy bien.

— ¿Por qué lloras entonces?

— Porque sigo enojado...

Changbin rió un poco.

— Estoy contigo, Lix, todo está bien, no voy a dejar que te moleste y tampoco que te vuelva a lastimar...— Felix permaneció en silencio, escondiendo el rostro en el cuello de Changbin—. ¿Te han lastimado antes?

Felix tardó unos segundos en asentir.

— ¿Quieres contarme?

Felix se separó un poco de él, pero no alzó el rostro.

— C-Cuando era más pequeño... Me llevaban con el veterinario todos los días por vacunas, eran muy fuertes y me dejaban enfermo, y empecé a pelear para no ir, pero ellos eran más fuertes... Una vez me golpearon tanto que me dormir, cuando desperté ya me habían dado esa vacuna.

— Eso no va a pasarte de nuevo, Felix, te lo prometo— Changbin acarició sus orejas con cariño—. LixLix, no me digas nada si no quieres... ¿Puedes contarme de tu pasado?

Felix dudó si decirle todo lo que no le gustaba recordar, pero por Changbin, sufriría con esos recuerdos miles de veces.

Se apartó un poco del abrazo, mirando a sus ojos, mirándolo directamente a él para no ser consumido por las memorias, tenía el su mejor presente frente a él, podía recordar que el feo pasado era sólo eso.

— Nací allí, en eso, no sé qué era, no sé dónde... Tenía un hermano menor y una hermana mayor.

>> Las personas de allí estaban muy contentos por mí hermana, y la cuidaban mucho mejor que a mí o a mí hermano, pero un día se fue y no regreso nunca más... Fue cuando empezaron a darme vacunas.

>> Mí hermano era pequeño, y débil, fue el último en nacer y yo lo cuidaba porque los alejaron de mamá en cuando abrimos los ojos... Le daba mí comida porque ellos no le traían la suya— Se encogió de hombros—. Quizás se dieron cuenta que no quería estar sólo y comenzaron a traer comida para ambos al cabo de unas semanas.

— Tu hermano... ¿Me dijiste que habían muerto, Lixie?

Felix negó.

— La última vez que lo vi seguía vivo.

Changbin borró sus lágrimas, dejó besos en sus mejillas, mientras daba caricias en su cabello y su espalda, Felix empezó a él ronronear y no supo si era para sentirse un poco mejor.

— ¿Qué pasó entonces, Lixie?

— Ellos... Vinieron a nuestro cuarto, empezaron a gritar que yo tenía que ir con ellos y cargaban una de esas cosas pequeñas que lanzan cosas, las que lastiman.

— ¿Pistolas?

— Creo que sí... Me quisieron separar de Byul, pero no quise irme, fue cuando le apuntaron con esa cosita y sonó muy fuerte y cerré los ojos, cuando los volví a abrir él... e-estaba en el suelo y h-había san-sangre...

Sus ojos miraban a la nada y Changbin quiso salvarlo de esos recuerdos, pero el pelinegro estaba perdido en el pasado y sollozo a punto de romperse.

— M-Me escapé de ellos y f-fui con él... Mis manos estaban cubiertas de rojo, Byul ronroneaba .... Uno de ellos me golpeó de nuevo y no recuerdo qué más pasó. Cuando desperté estaba en otro lado, era una casa... No había nadie, me asusté y vi una ventana abierta y salí por allí, pero no encontré a nadie familiar...me encontraron varias personas y me rendí de escapar, pensé en buscar una casa, pero cuando se enteraban que era un híbrido me echaban... Eso pasó unas cuatro veces, hasta que una familia, la última, me puso en una caja y me dejó bajo la lluvia lejos de la casa, para que yo no volviera... Les había rogado mucho para que no me dejaran y se cansaron de mí...

—Luego conocí a Hyunjin y a ti, Changbinie, y lo demás lo sabes— sonrió levemente, las lágrimas brillaron en sus mejillas y Changbin las limpió de nuevo con la manga de su remera.

— ¿Hace... Cuánto fue lo de tu hermano?

— Yo... Tenía creo que once años.... No recuerdo bien.

— ¿Sabes tu cumpleaños?

— Una vez al año uno de ellos venía a la puerta de la habitación y cambiaban el número debajo de mí nombre... Una vez pregunté la fecha y me dijeron que era el quince de septiembre.

— Pensaba que no la sabías, Lixie, ya iba a festejar tu cumpleaños en el aniversario desde que te adopté— Changbin sonrió un poco.

— Puedes, es la fecha más feliz que recuerdo— dijo el gatito, sonriendo un poco más.

— ¿Y cuándo te pedí que seas mí novio?

— Esa también es una fecha feliz.... Todos los días contigo es una fecha feliz.

— Te amo muchísimo, Lixie— dijo el castaño, acariciando su mejilla—. Haré todos tus días una fecha feliz, bebé, conmigo estás a salvo, LixLix.

Felix asintió.

— Lo sé, lo sabes.

— Gracias por contarme, Lixie, ahora puedes olvidar todo eso, no importa ahora.

El híbrido sonrió mostrando sus encías, fue hacia sus labios y lo besó con gratitud.

El híbrido sonrió mostrando sus encías, fue hacia sus labios y lo besó con gratitud

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bueno uno más y terminamos 

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Bad Luck ›› changlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora