Barbie Prófuga ✔️

Capitulo Extra + sorpresa

HOLA GENTE!!! Hace mucho que no toco esta novela *llora*
Primero que nada, ¡feliz navidad a todxs! espero que lo pasen hermoso, si es que lo festejan, con sus familias o con sus amigxs.
En este mes se cumplen dos años de que soy escritora, o sea dos años de que publique mi primer novela "Narco Barbie". Y estoy tan orgullosa de mí por lo que logré con ese libro...
Entonces para celebrar estas dos cosas, les traigo un extra para poder volver a leer a Mia y a Adrik, y obvio a los demás personajes.
Mi inspiración para este capitulo fue BriannaVilc18 , quien me dio la idea básicamente, graciass❤️
Los dejo leer así llegan al final y de paso descubren la sorpresa☺️

MIA O'CONNER
—Muñeca, ¿estás bien?—me pregunta Adrik poniendo su mano en la parte baja de mi espalda.

Hundida en mis pensamientos, asiento. Miro con atención el numero de la puerta blanca.

—Podemos regresar otro día.

Niego con la cabeza. No quiero atrasarlo más.

—¿Y mi hermano?—pregunto, esta vez desviando la mirada de la puerta y posándola en sus ojos.

—Viajaron más tarde que nosotros porque él y Maia tuvieron que ir al hospital.

Lo miro preocupada.

—¿Ella está bien?

—Sí, solamente tenían una ecografía programada y no querían cambiarla. Está todo perfecto, no hace mucho hable con ellos.

Asiento con una sonrisa.

Maia está embarazada de unos siete meses. Ni ella ni Liam quieren saber el sexo del bebe ya que quieren que sea sorpresa. Aunque les insistí de poder acercarme a su medico para que me diga solo a mí porque no doy más de la curiosidad, pero ellos se niegan profundamente.

Tengo el deseo de que sea un mini Liam.

Adrik me abraza desde atrás y yo apoyo mis manos en las suyas sobre mi estomago. Besa mi cabeza.

—¿Quieres que entre con vos?

Suelto el aire de mis pulmones y niego.

—Entonces, estaré acá afuera, ¿sí?

Me giro sobre mi lugar, sin salir de su agarre, y lo beso con dulzura.

—Te amo, teñido.

—Y yo a vos, muñeca.

Le doy otro beso antes de tomar una bocanada de aire llenando mis pulmones. Reuno fuerzas y abro la puerta lentamente para después cerrarla apenas entro a la habitación.

La miro en la camilla. De alguna forma es como un desconocida. No me acuerdo de ella porqué la ultima vez que la vi apenas era una bebe. Y no se parece a las fotos que tengo de ella.

Su pelo rubio claro, ahora se encuentra totalmente blanco por las canas. Se la nota mucho más flaca y las arrugas en su rostro la hacen aparentar más años.

Ella deja de mirar la televisión en una esquina y lentamente gira la cabeza en mi dirección.

Su rostro esta inexpresivo unos minutos, solo me mira y me entran ganas de irme, creyendo que fue un error venir, pero luego su cara se ilumina y sus ojos brillan con lagrimas contenidas.

—¿Mia?—siento perder el aliento, sí me reconoce— ¿Hija, sos vos?

Llevo una mano a mi boca para ahogar un sollozo y asiento. Llevándome por un puro impulso, voy y la abrazo. Pero ella parece también deseosa de rodearme con sus brazos porque lo hace con fuerza.