Capítulo 9

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Antes de empezar a leer, recomiendo que escuchen "Un bacio a mezzanotte" mientras leen este capítulo :D

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Luca estaba algo extrañado, la propuesta de Alberto había sido muy repentina y ni tiempo le dió de contestar ya que justo ahora se encontraba siendo jalado del brazo por Scorfano

Paguro se limitó a solo sonreír con intriga siguiendo los apresurados pasos de su amigo, realmente había extrañado esa actitud infantil del mayor

– ¿Qué quieres mostrarme, Alberto?

– Es una sorpresa

Luca rodó los ojos divertido, sintió un par de miradas posarse sobre él, la mayoría de estas eran de niños de su edad que no sabían de su ahora estancia en Portoroso

Unos segundos más tarde ambos pararon cerca de un precipicio que daba al mar, el de ojos marrones giró su vista hacia enfrente y sonrió mirando la torre donde él y Alberto construyeron su primer vespa, sintió una enorme alegría y miró emocionado al ojiverde

–¡Llévame gravedad!

Alberto gritó tirándose al agua, Luca se sintió como en el verano pasado, dónde él había podido experimentar lo maravillosa que es la superficie, miró como ahora Alberto lo miraba desde abajo

– ¡Ya ven Luca!

El mencionado no esperó más y se lanzó, cerró los ojos sintiendo como la gravedad lo atraía hacia el mar cayendo a unos pocos metros de su amigo, los dos se miraron y nadaron juntos hacia la pequeña isla

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– Extrañaba este lugar

Dijo Luca saliendo del agua, hacia mucho tiempo que quería volver a aquella pequeña torre, tenía la intriga de ver los nuevos objetos humanos que Alberto había encontrado

– Ven sube

Alberto no podía contener su emoción, había esperado este día por varias semanas, subió por la escalera rápidamente esperando a que Luca lo hiciera también, una vez su amigo logró subir, Scorfano le extendió su mano para ayudarlo

– Bienvenido de vuelta, Luca

Paguro sonrió mirando el interior de la torre, se veía casi igual a como lo recordaba, con la pequeña diferencia de que había más cosas humanas, también podía apreciar ciertos papeles colgados en las paredes con dibujos que a simple vista no podía ver detalladamente

– Como verás ahora tengo más cosas humanas, pregunta lo que quieras

Alberto caminó hasta la pequeña hamaca y se sentó mirando a Luca, el de cabello castaño dió un largo vistazo a las cosas que se encontraban a su alrededor, aunque la mayoría ya era familiares para el aún habían un par de cosas que desconocía

– ¿Qué es eso?

Luca señaló una especie de cilindro colorido con un vidrio extraño en la parte de arriba, era parecido a un telescopio

– Oh eso! Massimo me habló de él cuando lo encontré

Alberto tomó el objeto y lo acercó a Luca

– Se llama caleidoscopio, miras a través de él y ves muchas figuras de colores

Curioso, Luca decidió probar por si mismo aquel artefacto, lo colocó sobre su ojo y, con una mueca de asombro, comprobó lo que su amigo le había dicho

Amor marino |Luca|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora