El chico de la batería (Ethan Torchio)

Capítulo Cuatro

Estoy cansada. Fatigada de correr. No puedo hacerlo más deprisa y estoy muerta. Pero aún así no me puedo detener o si no la cagaría. Tanto que perdería una de las mejores oportunidades que me ha dado la vida.
Cojo todas las fuerzas que puedo y aumento la velocidad. La gente me mira extrañada, como si estuviera loca (aunque en verdad los entiendo porque aquella situación no era normal) pero la verdad me da exactamente igual.
Tan solo quedan cincuenta metros.
"Venga Hannah, tú puedes"
Y por fin llego. Entro rápidamente por las puertas del avión. Solamente quince segundos más y me hubiera quedado fuera.
Mi asiento está bastante cerca de la puerta por lo que puedo sentarme rápido. Resoplo aliviada y me aparto el pelo de la cara. Apoyo la cabeza en aquel sillón que huele muchísimo a sudor y cierro los ojos. Ya estaba allí. Libre de todo. De mi madre, de la panadería, de las charlas sin sentido de mis hermanas por un "futuro para mí* que lo único que hacían era echármelo todo en cara.

" Ethan, ya voy para allá"

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Vale, seguro que estarás pensando, ¿Pero qué me estás contando, tía?  Pues volvamos donde me quedé... Sí, en el momento en el que apagaba la lámpara e intentaba dormir.

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Pues no, no he podido dormir. Son las cuatro de la mañana y sigo con los ojos muy abiertos. Sufro de insomnio y dormirme es un infierno. Aunque ese día haya hecho miles de cosas, me es imposible quedarme dormida. Giro la cabeza y me pongo a mirar el techo.
De repente, una notificación resuena a todo volumen. Tanto que creo que incluso mis padres han notado que ha sonado algo... Escondo el teléfono bajo las sábanas rápidamente. Resoplo ya que he dado un salto del susto.
"¿Quién será a estas horas? Seguro que es un mensaje de Pinterest. Me mandan muchos mensajes de recomendaciones todo el rato"
Pienso.
Pero no, justamente no era de Pinterest, si no una notificación de Instagram.

{ethaneskin te ha empezado a seguir}
Me levanto de la almohada nerviosa, con el corazón en un puño.
Ethan me acababa de empezar a seguir en Instagram. Desbloqueo mi teléfono y voy a las notificaciones.
De repente salta un mensaje del dm. Es él, Ethan. Me había escrito. A mí.

Entro en el chat y leo aquel mensaje.

"Hola, Hannah, verás, ya sé que son las cuatro de la mañana pero te escribo porque no puedo dormir, ya que sufro de..."

"Insomnio"

Susurro yo antes de leerlo, sabiendo a la perfección aquella palabra que seguía después.

"Insomnio, y para decirte que me gustaría hablar contigo, conocerte más, me has caído bastante bien. Ya sabes, podríamos charlar de... ¡La batería sí, la batería! Desde cual es tu canción favorita para tocar hasta la que más odies. O incluso cuando ya nos conozcamos más hacer una videollamada mientras vemos un película y comemos palomitas. Si no te apetece, no te preocupes, es que me has llamado la atención. Pareces maja, Hannah Weed, pareces... misteriosa
-Ethan/Edgar"

Tras terminar de leer aquel texto se me dibuja una gran sonrisa en la cara. Me había dicho que si quería podíamos ver una película en videollamada comiendo palomitas.
Ethan Torchio me había dicho que si quería podíamos ver una película en videollamada comiendo palomitas. 

Decido escribirle. Yo tampoco puedo dormir y no vendría mal conocerle un poco más.

Narra Ethan:

Acabo de mandarlo.
Acabo de enviar ese mensaje en el que tanto había estado pensando aquella mañana en el estudio.
Lo releeo varias veces. Estoy  nervioso. Quizá me había precipitado demasiado. ¿Y si ella no pensaba lo mismo de mí que yo de ella? Y si... ¿Simplemente no quería hablar conmigo? ¿O si no quería palomitas? (Si fuera por eso, realmente no la entiendo. Las palomitas son lo mejor. Además podría compartirlas... O simplemente hacer muchas, que comamos tantas hasta que no podamos más)
No, creo que no. Hannah parece buena tía, al menos me leería.

No espero respuesta ya que son las cuatro de la mañana y creo que soy el único despierto.

Como siempre, me cuesta dormirme. No es que tenga 100% diagnosticado esto como Thomas, que él sí sufre de insomnio pero creo que si que lo tengo. Nunca me puedo dormir. Aunque me levante a las tres de la mañana. No está bien autodiagnosticarse algo pero cada día le doy más vueltas al tema.
Nada más pasados tres minutos me arrepiento de habérselo enviado. Quizá la había molestado...
Pero no.
Como si de un milagro se tratase veo como mi teléfono vibra de repente. Lo cojo y lo desbloqueo. Lo primero que hago es meterme en Instagram.
Y ahí está, el mensaje de Hannah. Con algo de miedo, entro en mensajes directos.

"Eyy, Ethan/Edgar como te haces llamar. La verdad es que tu también me pareces súper majo. De hecho, fuiste el que más me llamó la atención la primera vez que os vi actuar ya que como toco la batería y tal, me interesaste aún más. Y ey, no te preocupes, yo también sufro de insomnio. Aunque esté muy cansada no consigo dormirme. Mi canción favorita es la de Zitti e buoni y la que más odio... Pues ninguna la verdad. Me interesa todo tipo de música hehehe. Y lo de la película y las palomitas y la cuando quieras. (pd: mis favoritas son las de mantequilla)
Tú también me pareces majo, Ethan Torchio, me pareces... Misterioso.."

Mi corazón late a mil por hora. En realidad no la había molestado, si no todo lo contrario. Ella también sufria de insomnio y aunque estuviese muy cansada no se podía dormir. Pero lo mejor de todo es que sus palomitas favoritas eran las de mantequilla como las mías. Quizá teníamos más cosas en común de lo que yo pensaba por lo que decido contestarla.

"Hola Hannah, al habla Ethan/Edgar. Que sepas que mis favoritas también son las de mantequilla. Cuando quieras podemos hablarlo.

Por lo demás no hay nada más ni nada de misterio, a no ser que quieras verlo o encontrarlo..."

Narra Hannah:

Aquellos puntos suspensivos me han hecho arquea las cejas y sonreír.

"AHH, o sea que ¿esas tenemos, no...? Al final del todo si que vas a ser misterioso, vaya..."

Apago el teléfono y me toco la cabeza con las dos manos. El buenorro del batería de Måneskin me ponía puntos suspensivos...

Sin yo quererlo entrecierro los ojos y me quedo dormida.