Cap. 2:
Me tumbo en la cama. Agh estoy exhausta. Siete horas de compras por los grandes almacenes de Florida, con tan solo una pausa para comer. Todo esto nos lo pagan obviamente, al igual que el pequeño pisito en el centro de la ciudad, a dos manzanas del instituto. Llaman a la puerta de mi habitación y, empujando la puerta con la cadera entra Josh, cargado de arriba a abajo de bolsas llenas de vestidos, zapatos, bolsos y maquillaje. Dios, tenia que darme prisa por terminar esta mision, esto seria mi peor pesadilla, aunque ver a Josh asi, cargado de bolsas lujosas tenia su gracia. De hecho, tenia muchisima gracia. Cuando termino de reirme, ayudo a Josh a subir el resto de las bolsas, y solo una vez estan dentro de mi habitacion, me doy cuenta de que tendre que colocar todo esto en el armario. Desesperada ahogo mi cara en la almohada. Odio colocar, odio ordenar,en serio, no va nada conmigo. Ahora es Josh el que se rie de mi
-vamos doña dramática, no es para tanto. Venga, te ayudaré. Y comienza a colocar cosas en el armario, mientras tararea 'all about that base' de meghan trainor, a la vez que se menea como si fuera una chica
-¿podrias dejar de hacer eso? Pareces una tia Josh- me rio de el, aunque en reslidad estoy aliviada, no tendre que ordenar sola.
- venga gruñona, ayudame. Mientras vamos a repasar los datos del caso. ¿Que es lo que sabemos?
Suspiro, hemos echo esto miles de veces ya, que me se todo de memoria. Y eso que mi memoria es muy mala.
-estamos en Florida, vamos al colegio saint michael donde se sospecha que el equipo de fútbol tiene mercado de droga. Somos dos hermanos de Nueva York que nos hemos mudado aqui por culpa del trabajo de nuestros padres multimillonarios, que dirigen una de las empresas mas importantes del estado, cuyo nombre nunca somos capaces de recordar. Nuestra relacion con nuestros padres es mala y por eso vivimos solos. Yo soy una rubia estupida que tratara de ligarse al capitán del equipo, y tu entraras y te harás amigo de ellos. Tal vez te ligues a alguna ex novia del capitán para averiguar lo máximo posible en poco tiempo.
-perfecto Nad, lo lograremos. ven aquí- Josh abre los brazos y nos fundimos en un largo abrazo. Como un abrazo de hermanos. No es difícil que nos confundan con hermanos, nos parecemos muchísimo. Yo soy un poco más baja, mido uno sesenta y cinco, soy delgadita y fuerte. Llevo una melena negra hasta la parte baja de la espalda, con un flequillo hasta poco mas arriba de mis ojos, azules oscuro, aunque no tanto como los de Josh.

ESTÁS LEYENDO
No confíes en mi
RomanceNadia es una chica de 16 años de apariencia normal. Y ahí se acaba todo lo normal que hay en su vida, y es que Nadia y Josh, su mejor amigo, trabajan para una agencia un tanto... especial. Ambos son espías, especializados la detención de mercados d...