Una segunda toma(Traducción)

Capitulo 9

Uchiha Sasuke, Sasaukage de Konoha, se despertó con una extraña sensación de su descanso vespertino. No había sido su elección dormir en ese momento, pero había resultado herido en un enfrentamiento inesperado hace dos días y todavía se estaba recuperando. Sin embargo, tan pronto como se enteró del Sharingan de Sarada, respondió apresuradamente que volvería a la aldea en un par de días para ayudarla a entrenar. De ninguna manera en el infierno Itachi iba a enseñarle algo tan importante como esto. Ya había perdido tantos momentos importantes con su hija que era realmente, lamentablemente triste.

Pero tenía que hacerlo. No tuvo elección. Nadie más sería bueno para esta misión. Nadie sería lo suficientemente bueno para ejecutarlo sin un solo error. Tenía que ser él. Sasuke se negó a dejar que nadie más lo hiciera. Tenía que ser Sasuke. Tenía que ser Sasuke quien protegería a su dobe de todo daño. Así es. La razón por la que Uchiha Sasuke nunca estuvo presente para su hija fue porque siempre estaba fuera de Namikaze Uzumaki Naruto. Por todo lo que amaba a su hija, todavía tenía ese instinto arraigado en él de mover su cuerpo sin pensar cuando se trataba de proteger a Naruto. Era algo que Sasuke dudaba que alguna vez cambiara... y no quería que cambiara... Nunca. Porque ese rubio era su persona más importante, a pesar de que Sasuke lo negó durante años. Lo había admitido solo una vez, y había estado tratando de matar a Naruto para obtener el Mangekyo Sharingan en ese momento.

No es que tuviera que decirlo, no. No; Rara vez se necesitaban palabras entre ellos. Una mirada puede ser toda una conversación cuando se trata de ellos, sin importar cuántos años hayan pasado entre ellos. Tenían un vínculo especial, una conexión, algo que no se puede romper con el tiempo o la distancia. Eran rivales, mejores amigos, enemigos y ahora... Naruto dijo que lo considera un hermano, mientras que Sasuke ve a Naruto solo como Naruto. Su persona más importante.

Pero no era de Naruto. La persona más importante, eso es. No, Naruto obviamente había dejado atrás la ausencia del joven de cabello azabache, encontró a una chica que amaba lo suficiente como para tener no una sino dos niños con ella... o encontró a dos mujeres... Sasuke no lo sabía. Todo lo que sabe es que justo antes de dejar Konoha por segunda vez, Kakashi, el nuevo Rokudaime, le había permitido dormir en su antigua casa en el complejo por última vez antes de emprender su viaje de reconciliación. Naruto se había acercado con los ojos angustiados y Sasuke lo había dejado entrar, a pesar de que se acercaba la medianoche. Habían hablado con amor cálido para endurecer sus nervios para la conversación, tanto la hablada como la silenciosa, hasta que Naruto, un poco borracho, comenzó a llorar, aferrándose desesperadamente al sorprendido Sasuke mientras le rogaba al hombre un poco más alto que se quedara. Y, oh, cómo había querido, pero no tenía otra opción y ambos lo sabían. Este era el castigo más leve que Sasuke podía recibir por los crímenes que había cometido a lo largo de los años.

Después de eso, rompieron más sake y vino e incluso un poco de vodka que Sasuke no sabía que uno de sus primos había escondido en la cocina de la casa principal para ocultárselo a su propio padre. Bebieron, mezclaron las bebidas y se emborracharon por completo. Ahora, por lo general, Naruto no se habría visto afectado ya que Kurama, a quien Sasuke se había reunido de nuevo para aclarar el aire entre ellos desde su primer encuentro, se habría ocupado de ello incluso antes de que llegara al torrente sanguíneo de Naruto, pero el zorro demonio también lo estaba. Agotado por la pelea. Había gastado mucho chakra en las peleas que tenían y luego tuvo que pasar días después de la pelea curando las muchas heridas de Naruto, por lo que estaba agotado y había estado dormido durante dos días. Entonces, sin la ayuda habitual del Kyuubi, Naruto se emborrachó por primera vez en su vida. Y usó su nueva valentía para besar a Sasuke, aunque descuidadamente,

Eso, aparentemente, había despertado a Kurama. Y para gran sorpresa de todos, días después, cuando Jinchuriki y bijuu hablaron, el alcohol que Naruto había consumido le había dado al zorro en la cabeza y él había comenzado a reír. Siguió riendo durante todo el juego previo, cuando se le ocurrió una idea repentina, malvada y divertida de un borracho. Kurama no recordaría haber actuado en esta ... idea hasta que descubrieran por qué Naruto seguía vomitando en la mañana unas tres o cuatro semanas después, pero aparentemente le había parecido gracioso en el momento de cambiar parte de la anatomía interna de Naruto. Cuando le dijo esto a su Jinchuriki y a los tres médicos que habían estado examinando a Naruto, Naruto, Tsunade, Samura y Shizune casi lo mataron en el acto. Lo habrían hecho, si pudieran sin arrastrar a Naruto junto con él a la muerte.