Capitulo 6

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El ascensor se detuvo y ella lo miró molesta a Christian cuando apoyó la mano en el panel de control para retrasar la apertura de las puertas y asi poder continuar con esa desagradable charla.
----Fleet no sólo es un donjuán, sino que no tiene ningún respeto por la intimidad de las mujeres con las que sale. Es un bocazas en lo que se refiere a sus conquistas. Incluso se sabe que ha hecho apuestas en ese sentido. Lo único que le interesa es pasárselo bien y espera que la chica con la que sale tenga su mismo punto de vista.
---¡ Muy bien!--exclamó ella aprovechando el elemento sorpresa para agarrarlo por la muñeca y apartarle la mano del  panel para que se abrieran las puertas.
----¿ Bien? ¿ Qué quiere decir  con eso?--le preguntó Christian sin moverse de donde estaba.
  Anastasia se volvió y lo miró.
---Quiero decir que bien, parece una verdadera cita caliente.
----¿ Una cita caliente?--repitió él lentamente, como si fueran unas palabras extranjeras.
----Si, ya sabe...una con mucha acción.
----¿ Acción?
Las puertas empezaron a cerrarse, pero él las evitó con una agilidad sorprendente para un hombre tan grande.
---Diversión.
---¿ Va a salir con Paul Fleet por diversión?
---Bueno, ciertamente no voy a salir con él para pasármelo horriblemente.
---- Señorita Steele, me pregunto si se ha dado cuenta de la importancia de lo que le he dicho.
---Claro que si--dijo ella, exasperada---. Me está advirtiendo de que mañana no seré nada más que otra marca en la cama de Paul.
----¡ Señorita Steele!
----! Señor Grey!
Christian murmuró algo. Olvidó su comportamiento de caballero y entró el primero en su despacho. Se detuvo un momento delante de su  secretaria, una mujer de mediana edad que estaba escribiendo algo en el ordenador.
---- Señorita olivia, no quiero interrumpciones. La señorita Steele y yo tenemos cosas que tratar.
---Si, señor Grey.
Anastasia sonrió a la secretaria cuando ésta, como todos esa mañana la miro boquiabierta,  y luego entró en la oficina de Christian Grey . Pero cuando lo hizo le pareció ver un destello de diversión en la mirada de la mujer .
   Lo único de raro que tenía ese despacho con respecto a los demás de los ejecutivos era el poderoso telescopio que había junto al ventanal. Lo recordaba vagamente dw la última vez que habia estado allí, hacia un par de meses. Pero entonces habia estado más preocupada por lo que habia sucedido en la tradicional fiesta de fin de Año de la empresa. Seguramente él habia hablado en privado con cada uno de los empleados que habia asistido.
   El ponche de frutas junto con el vino y la cerveza que se habia ofrecido durante la fiesta habian sido servidos con derroche por un empleado que ya habia llegado borracho a la fiesta. Como resultado, se habian producido algunos altercados menores y sorprendentes comportamientos ofensivos. Asi que Anastasia agradeció que su poco acostumbrada ingestión de alcohol sólo hubiera tenido el resultado de haberse puesto muy mal.
   Christian habia despedido al hombre que habia hecho el ponche, pero Anastasia considero tipico de un código de conducta haber aceptado toda la responsabilidad del asunto.
   En ese momento, Anastasia le habia asegurado que estaba suficientemente alterada como para haberse dado cuenta de lo que pasaba a su alrededor, y que no se habia sentido ofendida por lo que habia sucedido. A Christian le habia molestado tanto su reacción calmada ante lo que  para él era una ofensa, que ella agradeció poder escaparse al despacho de Elliot, que se lo habia tomado todo a broma.
   Para romper el silencio que se habia producido entre ellos en esos momentos, Anastasia le preguntó:---¿ Es la astronomia una de sus aficiones?
----No.
----Para qué es entonces el telescopio? ¿ O es que lo usa para mirar a las chicas?
   Nada más decir eso , no se pudo creer que realmente , esas palabras le hubieran salido de la boca y él pareció Igualmente sorprendido . La miró fijamente y  con los párpados entornados . Esta vez la inspección que le dedicó fue lenta y la puso de lo más nerviosa.
---- Sientese, señorita Steele.
Era una orden, no una invitación, asi que Anastasia se acerco al sillón que habia  delante  de su mesa, muy consciente de que el temblor de sus rodillas la hacia mover las caderas más que nunca.
   Se sentó, aliviada, pero entonces se dio cuenta de que la corta y estrecha falda se le subia alarmantemente por los muslos. Puso las manos en el regazo y trató de recordar todo   lo que habia leido sobre la forma de comportarse cuando  se lleva minifalda. ¿ Tenia que cruzar las piernas o debia limitarse a echarlas a un lado? Decidió cruzar las piernas, pero entonces la falda reveló más centimetros de pierna.
----Señorita Steele, estoy a punto de romper una de mis reglas principales sobre permitir que mis problemas personales interfieran en mis negocios.
   Anastasia apretó las mandibulas. Si ahora él le hacia el menor comentario acerca de su apariencia, se  lo arrojaria a la cara.
----Señorita Steele, yo tengo una hija...
Anastasia lo miró completamente sorprendida.
----¿ Una hija?
----Si . Se llama Mia. Acaba de cumplir quince años. Quince años muy maduros, tengo que decir.
¿ Qué tenia que ver su hija con ella?
----No sabia que tuviera hijos.
Christian era conocido por defender su intimidad a ultranza. A pesar de su posición social y su dinero, vivia muy discretamente. Anastasia sólo conocia los grandes rasgos de su vida, como todos los demás, que tenia una casa en el campo, un apartamento en algún lugar de la ciudad, que se habia casado con Leila Jerome cuando ambos eran  muy jóvenes y que su esposa habia muerto en un accidente de carretera en que también habia muerto su suegro. Él todavia llevaba la alianza en su mano izquierda, lo que sugeria que estaba perfectamente a gusto con su posición de viudo.
----Y ya no los tengo--dijo él con un brillo de diversión en los ojos---. MIA me ha dicho que ya no es una niña dependiente de mi, sino una adulta joven e independiente.
    Anastasia permaneció en silencio cuando él hizo una pausa. ¿ Qué queria él que dijera? ¿ Por qué no empezaba con lo que fueran hacer? Se moria de ganas por saber cuál era ese proyecto tan urgente del que le habia hablado.
----MIA  está en casa de vacaciones en estos momentos y , al parecer, como nueva aduĺta, ha decidido comprobar los limites de su libertad.
---Bien por ella.
Christian frunció el ceño.
----Como le he dicho, sólo tiene quince años. Muy joven  para hacer  las cosas que dice que quiere hacer.
----¿ Qué clase de cosas?--le preguntó Anastasia interesandose a su pesar.
   En esos dias, le interesaba cuaquier cosa que oliera levemente a rebelión.
----Dejar el colegio. Buscarse un trabajo. Salir con chicos...
   Anastasia parpadeó. Con quince años, esa chica no tendria todavia ni los estudios minimos exigibles, ni podia dejar el colegio legalmente. Christian Grey, pilar de rectitud, ¿ padre de una adolescente que abandona los estudios? No. ¡ Impensable! Sin  duda, él tenia ideas muy claras de lo que queria que fuera su  hija y ella estaba tratando de luchar contra él. << Adelante, MIA>>,pensó en silencio y sonriendo.
   Él se apoyó entonces en la mesa y la miró fijamente.
---¿ Encuentra divertido algo de esto?
---No, señor--respondió ella, dejando  de sonreir inmediatamente.
----Entonces, ¿ por qué estaba sonriendo?
----No estaba sonriendo , señor.
----¿ No? Entonces, ¿ qué estaba haciendo?
----Estaba pensando , señor.
----¿ En qué? ¡ Y deje de llamarme de esa manera!
----¿ Cómo, <<señor>>?
----¡Asi !
----Pero yo siempre lo he llamado << señor>>.
----También fue siempre morena antes, ¡ pero evidentemente, no ha tenido ningún problema en cambiar eso!
   Entonces,  Anastasia se dio cuenta de que, inmediatamente, él se habia  arrepentido de esa referencia a su cambio de aspecto.
----Realmente, me costó mucho trabajo. ¿ No le gusta mi nuevo aspecto?
----No lo he pensado.
----Entonces, mi información no es real.
----¿ Qué información?
Ahora no podia retroceder, asi que se llevó la mano al pelo con un gesto claramente femenino que ella siempre habia despreciado anteriormente.
----Que es alergico a las rubias.
Lo que le dijo él a continuación si que fue completamente sorprendente.
----Sólo en la cama.
A Anastasia se le cayó la mano en el regazo y se puso completamente colorada.
   De repente, la tensión se evaporó del cuerpo de Christian, se acomodó bien en su sillón y se rió.
   Anastasia se quedó desconcertada.
----¿ Qué le parece tan divertido?
Christian dejo de reirse.
----Nada, señorita Steele. Sólo estaba pensando, señorita Steele...

Continuara:

Una Rubia muy especialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora