El Mejor Error. ♡ YiZhan ¹

•25•

La campana de alerta sonó por todo el límite de la casa grande, un grupo de rebeldes se infiltraron y planeaban atentar contra el líder de Beijing…

Esa fue la noticia que llegó a Chongqing, lo cual era una total mentira, Yibo sabía bien que los rebeldes no atentarían contra uno de los líderes con los que cuenta la alianza en caso de que la guerra estalle.

La noticia había sido alterada solo para dejar mal a los rebeldes, y ello se lo explicaba él mismo Yizhou quien envió una carta inmediata a Yibo donde le pedía cuidar de Zanjin puesto que Beijing no era seguro, el omega había tenido que ser sedado porque quería volver a Beijing para asegurarse de que su hermano mayor estaba bien, ni siquiera se calmó cuando Yibo mostró la carta escrita y firmada con puño y letra de Huang Yizhou, Zanjin conoce bien a Yizhou, el alfa es fuerte y viril, pero orgulloso, si estaba herido no lo diría ni a su madre.

—Puedes quedarte si quieres —ofreció Yibo a Zhuocheng quien se había mantenido junto al omega, el corazón de Zanjin es más fuerte ahora, pero el rechazo de Haikuan todavía lo mantiene en el peligro de una recaída, el alfa menor temía lo peor y odia que Haikuan sea tan necio y duro de entender, el destino los había unido a ambos a un hermoso omega que amaestraba a sus alfas, porque Zhuocheng también había sentido eso que confundía tanto a Haikuan.

Su lobo bajaba las orejas y se sentaba a admirar al omega cuando mostraba la esencia de su personalidad, su sonrisa hacía vibrar su pecho en latidos rápidos que solo se calmaban con una caricia, así sea un sencillo roce de manos, Zanjin tenía todo ese poder sobre ambos alfas, solo que Zhuocheng lo entendía y lo aceptaba con gusto, Haikuan se negaba y rechazaba el sentimiento.

Zhuocheng miró a Yibo con la mirada más tierna y triste que el alfa vio alguna vez, Zhuocheng dijo —¿Estará bien? Ahora que estoy con él, ¿Estará bien?

Yibo respiró profundo —¿Qué pasa con Huan? No ha estado aquí como tú —esquivó la pregunta.

Zhuocheng cerró los ojos negando con la cabeza —está… enamorado de otro omega, desde hace mucho, no quiere aceptar que nuestro destino es velar por él —dijo mirando a Zanjin.

Yibo comprendió porque tanta tensión entre ellos, era evidente que este tipo de problemas podrían pasar, si Yibo no se hubiera interesado tanto en salvar a Zanjin, este moriría sin saber el porqué de su enfermedad.

—Zanjin estará bien, no pienses mal, ahora solo está preocupado por su hermano, la situación en Beijing es algo peligrosa —trató de calmar al menor.

—¿Por qué los rebeldes atentarían contra un líder que los apoya? —preguntó más para sí mismo, Zanjin le había contado sobre su familia, su padre pertenece a la alianza y Yizhou no se ha unido porque es un líder igual que Yibo.

—No fueron los rebeldes, pequeño —Yibo se acercó a Zanjin y se sentó junto a la cama —fueron los aliados del ministro Feng, ese hombre quiere acabar con el norte, la dinastía Li siempre le dio más libertad al norte porque somos muy unidos entre todos, no sería fácil vencernos si quisiéramos derrocar al rey, por ello el ministro nos quiere fuera antes de que los rebeldes avancen y podamos unirnos a ellos.

Zhuocheng pareció entender rápido y se apresuró a asentir, Yibo le sonrió y se despidió, Zanjin fue movido a una habitación en la planta baja de la casa, para evitar cualquier problema por una posible recaída, apenas Yibo salió de la habitación, Zhuocheng se acostó junto a Zanjin y se abrazó a él buscando la calidez del omega, el aroma de Zanjin es ligero, bastante embriagador, Zhuocheng adora ese olor a hogar, el suyo nunca fue un hogar, su madre era “Dama de compañía” de cualquiera que quisiera solicitar sus servicios, cuando Zhuocheng nació lo dejó con su abuela quien tuvo que enviarlo a la escuela militar apenas cumplió los catorce dado que ella no podía mantenerlo, de su padre no sabe nada.