"𝙄𝙨𝙝𝙪𝙖𝙮𝙤𝙝𝙪𝙞" ᵏᵐʰ [PAUSADA]

Capítulo 53

«¿Te acuerdas del Min Hee que conociste al rededor de 10 años?» se hablaba el mencionado mientras se arreglaba frente al espejo como si estuviera manteniendo una conversación con la chica «¿Quieres que volvamos a eso? ¿Debo ser frío de nuevo?» ya tenía todo fríamente calculado para cuando se encontrara con ella en los AAA.

Iba repasando todo aún estando dentro de la camioneta; primero debía hacer una parada en la peluquería para eleborar su peinado y maquillaje, sin hablar de adueñarse del traje de gala.

No debía ni siquiera decirlo, pero hacerse escenarios imaginarios en ese momento lo hacía feliz, las comisuras de sus labios estaban ligeramente curveadas y sus ojos achinados con un leve sonrojo en sus mejillas.

Que Ji Woo lo estuviera evitando como si estuviera huyendo, le era gracioso y le subía el estado de ánimo. Ya que como se sabía, ella era todo un personaje a la hora de hacer algo y esto no lo dejaba atrás ya que chocar con cosas y terminar siendo descubierta por él se estaba convirtiendo en hábito. Y eso quería decir que estaba apenada a lo que posiblemente estuviera correspondiendo a él.

-¿Ya nos vamos? -le preguntó desesperado Se Rim junto a Seongmin.

El otro asintió y salió del baño con su celular en mano. 

Hicieron su requerida  parada por la peluquería que duró al rededor de tres horas y se pusieron en marcha para ir al evento y desfilar por la alfombra roja.

Los nueve caminaron consecutivamente uno tras de otro todo el recorrido hasta la pequeña tarima y de igual forma cuando desendieron de ésta para adentrarse al recinto. Lo mismo hizo Ji Woo pero a diferencia ella era acompañada por Ahn Hyo Seop con quien compartiría el cargo de presentadora. 

- Y el ganador a mejor actor es.. - hizo un emocionante espacio antes de anunciar el nombre ganador.- Cha Eun Woo.

Al instante de escucharse el nombre el lugar se inundó de aplausos, mientras que el ganador se abrazaba con el cast del drama que protagonizaba antes de subir al escenario, hizo una reverencia de noventa grados para agradecer las felicitaciones con una centellante sonrisa y el brillo característico que desprendían sus ojos.

Ya estando arriba, Ji Woo y Hyo Seop le entregaron el trofeo y el modesto ramo de flores blancas.

-Gracias. -pronunció el chico a ambos.

Y justo antes de que se retiraran en un movimiento inesperado los envolvió en un cariñoso abrazo. Los otros dos se miraron sorprendidos pero terminaron sonriéndose mutuamente con una risa que lograron capturar las cámaras de la televisora.

Y así se fueron los premios, un artista exitoso detrás de otro hasta darle cierre.

No mucho después, todos los artistas, staff, managers y actores ya estaban en el estacionamiento en listando todo para marcharse. Ji Woo y otra actriz se hallaban muy felices platicando delante de la camioneta de la misma.

-¿Quieres ir a tomar un trago? -le preguntó Min Hee haciéndose paso en la conversación.

La otra lo miró y luego miró a la mujer con quien estaba compartiendo palabras, no podía negar estar nerviosa, sus ojos pasaban de él a ella y viceversa; no quería contestar a esa pregunta.

-Me voy, te llamó dentro de unos días. -le dio una palmadita en el hombro antes de introducirse a la camioneta de enfrente.

La rapera se dio un golpe a ella misma mentalmente y cerró los ojos haciendo una mueca al no tener salida. Y antes de contestar se dio un regaño por ceder sin más opción.

-Va, sube. -se giró a la camioneta y deslizó la puerta.

Así ambos entraron a un terreno que nunca habían pisado antes, ya sea porque Ji Woo no quería caminar más o porque Min Hee no tenía el coraje para preguntar.

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Ambos ya estaban hasta el borde de soju, pero todo estaba bajo control pues habían rentado una habitación del karaoke para no estar expuestos al público.

-Aigoo, sonríe. -le dijo Min Hee sentado al final del sillón.

Se encontraba demasiado risueño, efecto del alcohol que había ingerido. Ji Woo se le notaba demasiado calmada, pues había bebido lo mismo que Min Hee pero su resistencia era mayor.

-Andale, sonríe una vez más. -frotó sus manos en frente de si en forma de súplica apretando sus ojos para transmitir una mayor necesidad.

La chica se rió al ver tal acto y el mayor sonrió al verla posando el peso de su rostro en las palmas de sus manos.

-Quiero pasar todos los días así, apreciandote de esta manera.

La chica se voteó intentando ignorar el comentario. Pero sus mejillas le jugaron en contra ruborizandose en extremo.

El otro se regresó al asiento y aplaudió para si, había logrado que ella mostrará algún sentimiento al fin.

Y entre varias copas que se sirvieron de más, ambos se sentaron en medio de la sala y cantaron a unísono las pistas más famosas que conocían.

El manager sabía de ello, de hecho por eso estaban tan calmados, él pasaría a recoger a Ji Woo al terminar la velada y como nadie conocía la cara de su manager al ser nuevo no existía un problema en que se llevara a la chica ya que después podrían dar un comunicado dando alguna excusa que pasaría por creíble.

Pronto entró el chico que había estado llevándoles las bebidas y les dejó otro par de botellas de suju además de unas cuantas latas de cerveza.

-¿Te gusta ella verdad? -le pregunto Min Hee con un tono amigable provocado por el alcohol.- ¿Te gusta mi Ji Woo-sshi cierto?

Tomo de la manga al chico y espero a que sus ojos hicieran contacto visual con él. El de tez bronceada volteo al instante de sentir el contacto pero por precaución evadió la mirada acosadora del idol.

-Claro, ¿a quién no podría gustarle? Yo he estado detrás de ella por más de 7 años y aún me abruma su belleza. -contó con una sonora risa soltando la tela que cubría el brazo del trabajador.

Ji Woo parecía reírse pero en cambio cuando levantó la mirada para ver la pantalla del pequeño cuarto de karaoke bufó.

-No es algo que debas decir con tanto orgullo. -le dio un trago directo al envase de vidrio.- Ser rechazado por 7 años no es un logró del cual jactarse.

Mientras tanto que ellos arrastraban las palabras el acomodó la mesa de nuevo para hacerse el desentendido. Durante todas las veces que fue no llevó snacks ni una vez más, el calamar seco y las frituras de pulpo seguían intactas cada que se asomaba. Sinceramente, él estaba inquieto porque sufrieran un coma etílico después de tanta ingesta de este sin haber dado ningún bocado. Y sin más, pero aún con su mirada de preocupación se retiro educadamente de ahí sin hacer ningún comentario.

Y así siguió la noche, entre sonrisas y carcajadas, pues la rapera ya le podía seguir el juego al mayor al tener ya el mismo grado de ebriedad.

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