El secreto de Haruka [Reescribiendo]

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*mientras tanto*

-No mientas te encanta- reí al ver las muecas que hacía.

-Claro que no! Además ni siquiera se porque me dejó hacer esto.- suspiró frustrado viendo si reflejo. Se ve tan tierno, con su cabello amarrado en pequeñas colitas.

-Listo!- tomé mí teléfono y saque una foto- te ves tan increíblemente tierno! De verdad mis cualidades como estilista están sobre la humanidad.- acomode mí cabello.

-Si si, ahora quitalo, ya te divertiste.- tomo mí mano y tiró de ella, logrando que quedará sentada en su regazo- ahora puedo divertirme yo.

Alce mis cejas impresionada- WOW WOW, quien eres y que has hecho con mí dulce Haruka? ....

Sonríe de lado, se está burlado de mí y lo sé- después de tantas veces, aún piensas eso de mí? Me halagas .

-Si Makoto te escuchará- puse mis brazos alrededor de su cuello y con mis manos comencé de desarmar sus colitas dejando su cabello azabache, suelto. - esas cosas no las conoce verdad?

- a qué te refieres?- sentí como su mano acariciaba levemente mí espalda baja y mientras que con la otra acomodo un mechón de cabello rebelde

-este Haruka - lo señale- wow vaquero la mano más arriba- coloque su mano nuevamente en mí cintura, riendo al ver su expresión de disconformidad- por ahora..

-no, no lo hace. Porque debería? No es una chica. -alce una ceja, completamente intrigada. Una chica?

-una chica? Osea que con otras chicas si?

-no, no. Me refiero a que no es una chica, no eres tu. Porque intentaría tocar a Makoto de la manera que lo hago contigo? Es mí mejor amigo. Fin de la historia.

-pero hay hombres que..

-si lo sé, pero no es mí caso..- asentí comprendiendo su situación.

-Algún día se enterará? Digo ya han pasado casi 3 años.- y me estoy cansando de que viva en las sombras.

-Lo harán, solo dame tiempo si?- tiempo. Otra vez esa maldita palabra, cuánto tiempo más? 3 años más? Cómo podré ir a alentarlo a los juegos si sus amigos no saben de mí existencia y él quiere que se mantenga así? No puedo interferir, son sus amigos, no los míos. Lo peor de todo es que a pesar de mis constantes quejas internas, siempre termino cediendo cada vez que veo sus ojos azules. Son mí debilidad y el lo sabe. Así que cada vez que pide más tiempo, me mira fijamente, cómo ahora y yo claramente, cedo.

-De acuerdo, pero date prisa si?
asintió- puedo bajar mí mano ya?- reí levemente y asenti, mientras me dejaba caer nuevamente en aquella adictiva red azul que era el.

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Lo siento! No he estado ocupado con la universidad, pero ahora estoy de vacaciones así que actualizaré más seguido.
Gracias por apoyar la historia.
Si quieren que algo en específico pase en la historia, dejen sus ideas en los comentarios y las voy a agregar.
Cuídense!!