Gravity (4)

Capítulo 20: (Superación)

☄️

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑵𝒐𝒂𝒉

Comenzó con una píldora, cobró 3 vidas, algo que no parece significativo se convirtió en todo nuestro mundo casi al mismo tiempo que él, era innegable lo que siempre sentí por Dan, pensar en todo lo que hicimos, huir una y otra vez, confiando y desconfiando, divirtiéndonos, llorando, peleando, amando. Todo iba de la mano, esta era nuestra vida, esto era lo que a ambos nos tocó enfrentar y sin importar la adversidad, aquí seguimos, superando cada jodido obstáculo que lucha por aparecer en medio del camino. No me importa si mi mundo me niega lo que vi, mientras me encuentre sosteniendo su mano todo estará perfecto en mi conciencia.

Este era por fin el momento, estamos cerca de lograr escapar, lo presiento, Dan lo presiente, nada me hacía más ilusión que partir y descubrir la salida a este extraño sitio, la superación me aguardaba con firme esperanza, los segundos se podían contar con los dedos.

La pesadilla llegaba a su fin, después de vencer al ente, Dan y yo nos observábamos realmente inspirados, confiados, sonrientes y dispuestos a seguir hasta morir con tal de salir, él entrelazó sus dedos con los míos y revolcó los sentimientos más vívidos de mi ser con solo mirarme.

—¿Estás listo?— Pregunta observando con firmeza mi pálido rostro, reposo sus otra mano en mi hombro y sonrío.

—Mientras esté contigo— Afirmé siguiendo su mirada y me atreví a plantarle un beso directo en sus suaves labios.

El tiempo se detuvo, más bien él lo hizo con su poder, una magistral melodía de piano nos envolvió de forma imperturbable y mi estómago se revolvió, mis manos se entrelazaron a sus caderas y cada movimiento que mi rostro ejercía, se sincronizaba con los suyos con delicadeza.

—Todo estará bien...— Se alejó un poco para decirme, con todo el tiempo detenido, por primera vez mis ojos despiden lágrimas de felicidad.

—Dan... por favor prométeme algo— Insisto con mucha firmeza y cientos de lágrimas deslizándose por mis mejillas.

—Lo que sea...— Responde con una sonrisa, la sonrisa que me incita a demostrarle todo mi afecto.

—Pase lo que pase, uno de los dos seguirá sin piedad hasta salir de aquí— Juré y negó rotundamente casi al instante.

—No, dejarte jamás fue una opción, saldremos de esta como siempre lo hemos hecho, juntos— Reafirma con sus mejillas rojas.

—Dan, te amo...— Contesto y lo abrazo desahogando mis lágrimas, él ha hecho que me hierva el cuerpo.

—Yo también, te amo...— Nuestras narices se pegan mientras cerramos los ojos y sentimos esa conexión, esa sensación tan especial que emana de nuestros corazones.

El tiempo perdura congelado, estar así es como quedarte para siempre en una foto, con la plenitud y confianza de que no pasará nada, quizás y solo quizás, esto es como Dan describe el cielo.

Dan experimenta un ligero dolor en su frente, puedo presentirlo porque se sujeta un poco el cráneo, su poder falla drásticamente y el tiempo regresa trayendo consigo el temblor del suelo que se hacía presente hace minutos.

—¡Mierda!— Gritamos coordinados y los dos nos separamos.

—Es tiempo... Salgamos de aquí— Dan rebusca entre el sitio la puerta de antes y yo lo sigo confundido.

—No entiendo, ¿Quieres que regresemos?— Pregunto sintiendo la vibración en el piso y mirando los objetos levitar.

—No, es inútil bajar, ya no queda nada afuera, el búho nos trajo aquí por una razón. Y sé que se oculta en lo más alto de este edificio— Responde y yo asiento, el movimiento del suelo bota algunas cosas hacia los lados.