Capítulo 13: (Limerencia)

98 105 148
                                    

☁️

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑫𝒂𝒏

Depender de alguien parece terrible, pero como seres humanos lo hacemos a cada instante, abandonar no está permitido, dar espacio es alejarte y herir, exagerar es perder, Laura sabía eso, ¿De qué se trata este estado de conciencia? De potenciar el alto sobre todo aquello que no para de seguirte, de aceptar que todos necesitamos un respiro, yo lo necesité cuando estaba cubierto de ira. La limerencia invade la mente con sentimientos de pérdida, necesidad y sofocación, cubriendo hasta lo imposible y cuando es muy tarde, te das cuenta de que sacrificaste tu dignidad para al final terminar peor.

Sentir que estás haciendo algo incorrecto o malo y seguir haciéndolo sintiendo esa culpa entre tu ética, es algo que nadie puede olvidar. Laura lo sabía, yo lo sabía, Noah lo sabía.

Ella era una chica muy especial, el día que la conocí me perdí en sus pensamientos y ella en los míos, los dos no dejábamos de mirarnos, pronto nos hicimos cercanos, luego novios, solo para darme cuenta de que no era amor si no afecto sincero, la persona que verdaderamente se robó cada parte mía, fue un chico, tanto tiempo, que perdí solo contemplando y analizando, la valentía en ese entonces no me caracterizaba, aunque Laura me apoyó al final.

Envuelto en esa discordia, es que Laura sigue detenida en la puerta, su rostro está fijo en mi, como aquel día en que nos conocimos.

¡L! Ay, no puedo creerlo— Grito conmocionado y le doy un inmenso abrazo, siento la frialdad de su espalda y me contengo.

Aquí estoy, wow, que bella cabaña... ¡Noah!— Agrega y acto seguido él corre y se nos une al abrazo.

Los tres estamos en esta realidad, compartiendo un momento de afecto, mi mano se desliza rozando la de Noah y siento como un montón de mariposas me vuelan en el estómago.

¡Oigan! ¿Ya puedo pasar?— Interrumpe un poco desorientada, ambos la soltamos y ella entra un poco apurada.

Vamos...— Dedico a Noah y ambos cruzamos la entrada de la cabaña, antes de cerrar la puerta yo me giro y contemplo las matices púrpuras del cielo y las plantas brillantes del suelo.

L, ¿Cómo es que... pudiste llegar hasta aquí?— Pregunto con mil cuestionamientos en mi mente.

Dan, no tenemos mucho tiempo, necesitaba decirles algo...— Empieza a charlar, apenas noto que tiene otra ropa diferente a la de aquella noche de fiesta.

¿Qué ocurre?— Pregunto, Noah se acerca fijando sus ojos y arqueando sus cejas.

Hay algo aquí, me estuvo asechando, yo... tengo miedo de que vuelva— Dice y sus manos tiemblan un poco

¿Te siguió? ¡No puede ser! No estamos seguros, otra vez...— Dice Noah con mucha ira

Noah tranquilo, ella corrió hasta lo más seguro, gracias a Dios está con nosotros— Menciono dando un suspiro leve.

Hmm...— Piensa Noah un poco inseguro

Chicos, ¿tienen agua? Tengo mucha sed— Doblega Laura incómoda, yo pienso en sus palabras.

¿Tienes sed?— Ella se gira hacia mi con confusión

No hemos sentido eso desde que llegamos aquí— Dice en el fondo Noah, parece algo irritado

Pues yo si, ammm, ¿Me pueden traer algo de agua? Por favor— Pregunta nuevamente y yo no sé bien que responderle

Creo que hay otro problema, el agua es oscura aquí, no tengo idea de su origen— Insisto y ella se resiste

Gravity (4)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora