"Harry Potter Boys / Girls One Shot"

Regulus Black.

Para la personita que pidió OS de Reg<3   (gracias por comentar, me hiciste muy feliz) 

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La familia Black, ¿Quién no los conocía? ¿Quién no quisiera ser digno de tan pura sangre? 

Podrías considerarte una afortunada, te criaste entre ellos, al ser parte de los sagrados 28 y ser de la misma edad que el joven Sirius, tuviste la oportunidad de forzar lazos con el. Jamás te llamo la atención, era tu mejor amigo. Jamás nadie llamo tu atención, excepto Regulus.

Regulus Black, altanero y divertido, responsable y amable. Su cabello corto tras sus orejas y sus ojos de un negro intenso. Su mandíbula filosa, su mirada desafiante, su risa, todo el era atractivo, por supuesto que caerías por el Black. 

En este momento te encontrabas en la mansión de la familia Black, pasando las vacaciones de verano ayudando a Sirius a sobrevivir con sus parientes. 

-Por Merlín, Sirius, no es tan complicado, apunta hacia la cerradura y di "Alohomora", inténtalo- dijiste por enésima vez a tu pelinegro amigo. Sirius rodo los ojos- 

-¡Alohomora!- apunto hacia la puerta, haciendo que esta se abra, revelando a su hermano detrás de ella. De pronto olvidaste como respirar.- Oh, parece que utilice el hechizo incorrecto, hice aparecer un ogro- dijo en tono de burla, provocándote una risa- 

-Ja ja- pronuncio en tono serio- ustedes dos, abajo, tengo que presentarles a alguien, de prisa- dijo para irse a paso rápido, sentiste un nudo en la garganta, el momento que mas temías había llegado. Y no podías hacer nada para evitarlo. Con pasos resignados, ambos bajaron hacia el primer piso, encontrándose con la señora Black, Regulus, una señora de edad similar a la madre de Sirius y a una joven morena, todos con expresiones para nada felices en sus rostros.

-Sirius, t/n- dijo Walburga- estas son la Señora Laurent y su hija, Florence Laurent- señalo respectivamente a cada una. La mujer era casi de la misma estatura de la señora Black, su cabello rubio sobre sus hombros, la joven era la copia de su madre. Alta, rubia y con aspecto aburrido.- la prometida de Regulus.

Tu corazón se termino de romper. El chico que amaste desde siempre, se casaba. Ibas a perderlo para siempre. Sirius paso lentamente su mano por tu espalda para consolarte indirectamente. 

-Tendremos la cena de celebración el viernes- siguió la señora Black- quiero que estén aquí, formales como siempre y ni un segundo tarde, pueden retirarse- dijo con muy poca educación, conduciendo a la señora y a la chica junto a Regulus hacia la sala de estar. Dejándote a solas con tu mejor amigo. Sollozaste lo mas bajito que pudiste, bajando tu cabeza.

Sirius y tu estaban en silencio. Horas habían pasado desde que subieron a su cuarto. 

-Mira el lado bueno, el no parece feliz con la idea, ni con ella- dijo el chico-

-¿Lado bueno? Voy a perder al único chico que ame y no puedo hacer nada por detenerlo, no puedo cambiar nada porque fui cobarde al guardarme mis sentimientos, al no decirle lo mucho que me gusta. Y ahora ya no queda nada por hacer, y además, ellos serán felices, ¿la viste? es tan preciosa y rubia y sus ojos son casi del mismo color del cielo, ¿Quién no seria feliz así?- Sirius frunció el ceño-

-No tenes nada que envidiarle, eres igual de preciosa que ella. Faltan dos días para el viernes, quizás cambia de opinión- intento alegrarte a lo que respondiste levantando los hombros-.

-Ya es tarde.

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Regulus escuchaba toda la conversación detrás de la puerta. Lagrimas caían por su definido rostro, mientras una sonrisa se asomaba. 

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A la mañana siguiente, tus ojos amanecieron rojos, cristalizados e hinchados, al igual que tus labios. Ni siquiera hiciste el intento de parecer que estabas bien, ¿A quien le importaba de todas maneras?. Al bajar al desayuno distinguiste las voces de los hermanos Black. 

-¿Estas loco? Mama va a matarte y de paso a mi también. Mira, quiero que seas feliz pero esto es demasiado. 

-Sirius, ¿no lo entiendes?, es mi única oportunidad de no ser un infeliz sin vida como todos en esta familia, ¿no estas cansado de que todos planeen tu futuro sin siquiera consultarlo? Estoy cansado, no lo voy a seguir permitiendo.- oíste como pasos se acercaban así que decidiste pasar a la cocina donde ambos chicos discutían. Al entrar dos pares de ojos se fijaron en ti, la mirada de ambos suavizándose. 

-Debo ordenar el cuarto, bajo en unos minutos.-dijo Sirius para dejarte a solas con su hermano.-

Sentías como tu corazón latía cada vez mas rápido y maldecías no haberte arreglado un mínimo. Tus ojos sin querer posándose en la figura de Regulus, quien te daba la espalda.

-Buenos días.- dijo en su tono usual.

-Buen día- respondiste sin saber que mas decir- subiré a ayudar a tu hermano, ese desorden no se arreglara solo.- mencionaste para darte la vuelta hacia la salida. 

-Escuche lo que dijiste anoche- lo enfrentaste con un ceño fruncido, pudiste jurar haber visto una mini sonrisa en sus labios-.

-¿De que estas hablando?- Regulus se acerco lentamente, posando su mano en tu mejilla, para luego correr un mechón de tu cabello detrás de tu oreja causando que tu respiración se alentara.

-Oh, ya sabes, acerca de que me amas y que no puedes hacer nada para que yo lo sepa, pero adivina que- se acerco mas hacia ti- ya lo se, y si hay algo que podemos hacer. 

-Ok, si buena broma, Sirius sal de donde quiera que estés- dijiste sin poder creer nada de esto.-

-T/n, por Dios, te amo ¿esta bien? te amo desde el día en que cruzaste esa puerta y me preguntaste que hechizo era mi favorito. Te amo desde el día en que descubriste nuestras bromas y nunca nos delataste, te amo desde el primer día. No quiero casarme- sostenía tu rostro con ambas manos, acercando tu frente a la suya- por favor, no quiero separarme de ti, prefiero morir a vivir de esta manera. 

-¿Que se supone que hagamos? Tu madre nos mataría y colgaría nuestras cabezas junto a las de la familia de Kreacher. Reg.- tomaste su rostro- te amo y te sigo a donde sea.

Regulus beso tus nudillos y tomo tu mano para luego realizar un hechizo de aparición.

Cuando la sensación de mareo desapareció, abriste los ojos. Se encontraban en una pequeña casa a metros de la playa, solos. Respiraste aire puro, libertad y amor. Regulus te abrazo por detrás. 

-Por fin podremos ser nosotros, no importa nadie mas. Ni mi madre, ni mi estatus de sangre o mi estúpido matrimonio- beso tu mejilla- solo nosotros. Siempre.

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Realmente espero que les haya gustado, personalmente creo que es muy lindo <3 (QUIZAS haga alguna continuación o algún capitulo de reg. x t/n porque realmente lo disfrute) 

Si tienen alguna recuesta pueden hacerla en los comentarios, no se olviden de votar, me ayudarían mucho si lo hacen! Muchas gracias por leerme. 

Nos vemos. G<3