《 10 》

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Otra semana en la U

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Otra semana en la U.A estaba a punto de terminar.

Los pájaros cantaban, la brisa soplaba delicadamente y el sol resplandecía lleno de vida en el espacioso cielo azul. El mundo era mucho más colorido ese día, fresco, alegre. Hasta las flores abrían sus capullos cuando Eijirou pasaba cerca de ellas, quien creía sin dudar en que aquél sería un fantástico viernes previo a su viaje.

Una melodía resonaba en su cabeza que interpretaba con un simpático silbido, mientras su alrededor parecía colmarse de diversión, positividad y...

Y otra vez estaba idealizando su vida.

Comencemos de nuevo, por favor.

Ejem, ejem.

Otra semana en la U.A estaba a punto de terminar.

No quedaba casi ningún ave en la ciudad debido a las migraciones de estas, el viento poseía una fuerza verdaderamente fastidiosa, y el sol estaba cubierto por nubes grises, deprimentes. De hecho, todo el cielo estaba decorado con ellas. El mundo era aburrido, y las flores que observaba el pelirrojo al caminar estaban muertas, decaídas, como si no tuvieran ganas de madrugar. Se veían tan desganadas como él, agotadas, física y mentalmente.

Espera, las flores no tienen mente.

Qué idiota.

Suspiró. Ahora que estamos en la historia real, les diré que Kirishima creía que sin duda sería un horrendo viernes previo a su viaje. Uno apestoso, penoso, y todas las palabras que tuvieran un significado similar.

Finalmente ingresó al edificio, cabizbajo, sumido en sus propios pensamientos; en cómo la quincena había pasado tan rápido, en el por qué Endeavor justo quiso llevarse a Midoriya, a Todoroki, y a su mejor amigo(¿podía seguir llamándole así?) para pasar unos días en su agencia como pequeña pasantía, y en el cómo no volvió a saber de él durante ella.

No escribió a los varios grupos de chat que tenían con el bakusquad, tampoco al privado. Ningún miembro del trío subió fotos a Instagram, Todoroki no twitteó absolutamente nada(quien de hecho era bastante reconocido en esa aplicación), y ni siquiera Midoriya hizo las encuestas diarias en sus historias sobre qué héroe sería más útil en equis situación. No hallaba la posibilidad de comunicarse con Katsuki pero, si era totalmente sincero, tampoco quería hacerlo. Tenía mucho, mucho miedo de lo que podía llegar a pasar una vez tuviera al rubio en frente. Sin embargo, debía arriesgarse o no ganaría nada; ¡peor aún! Perdería todo lo que alguna vez aprecio a tal punto de caer enamorado.

Sacudió la cabeza rápidamente, de izquierda a derecha, negándose a más malos pensamientos. Necesitaba despabilar su mente de todas aquellas ideas cuanto antes para no cancelar su viaje a último momento inventando alguna excusa, por lo que decidió observar y detallar en voz baja los detalles de las baldosas hasta llegar a su destino.

Cuadrados, grandes, lisos, de color marfil. Líneas de iluminación. Cero relieve. Aproximadamente veinte centímetros de largo por otros veinte de ancho. Todas y cada una eran iguales, unidas por lineas rectas y grisáceas de pasta especial para pegar materiales de construcción.

Egoistic Lovers || KiriBakuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora