Incomprendidos

Capítulo 22 -¡Nos vamos de fiesta!

(Eva)

Cuando llegamos a casa mi madre no se sorprende en absoluto de ver a Harry aquí tan pronto. Al parecer yo era la única que desconocía su llegada tan temprana. Tras comer y pasar un rato hablando los tres como en los viejos tiempos, vamos a mi habitación para deshacer la maleta de Harry. Como solo viene para un fin de semana, trae una maleta relativamente pequeña. Aunque en realidad mi hermano es casi como una chica, llena las maletas de cosas que luego no va a necesitar. En ese momento, recibo un mensaje de Niall

¿Al final vienes a la fiesta?

La verdad es que me había olvidado de la fiesta por completo, llevo todo el día pensndo en Harry y apenas me he dado cuenta de que esta noche era la fiesta.

No he conseguido convencer a mi madre

Jo, ¿y no puedes escaparte? Tráete a tu hermano

No sé Nial... -Escribo con un suspiro y mi hermano lo nota

-¿Qué pasa? -Me pregunta Harry

-Nada, es Niall preguntándome si voy a ir a la fiesta

-Es verdad, ¿al final no vamos?

-Estoy castigada, ¿lo recuerdas?

-Bah, eso lo arreglamos pronto - dice y sale de la habitación. ¿Qué va a hacer?

Me levanto de la cama y lo sigo hasta el salón donde mi madre está leyendo un libro sentada en el sofá.

-Mamá, ¿podemos ir a la fiesta de los amigos de Eva? -pregunta así como si nada

-Eva está castigada, así que a no ser que vayas tú solo, no

-¿Ves? -le digo a mi hermano

-Venga mamá, ¿en serio vas a dejar que el fin de semana que vengo a Londres nos quedemos los dos en casa aburridos? -mi hermano tiene una capacidad para convencer a mi madre asombrosa, pero no creo que esta vez funcione

-Está bien... pero no volvais tarde -accede finalmente mi madre

-¿¡De verdad?! -pregunto sorprendida de que la táctica de Harry haya funcionado

-Pero no preguntes que ya ha dicho que sí. Ay... cuánto te queda por aprender - me dice mi madre arratrándome fuera del salón

En cuanto llego a la habitación le mando un mensaje a Niall diciéndole que nos pase a buscar para ir los tres a la fiesta.

-Eres el mejor, Hazza - le digo agradeciéndole que mamá me haya levantado el castigo

-Lo sé... -contesta con aire de superioridad y le lanzo uno de los cojines de la cama.

A dos horas de que Niall venga a recogernos a Harry y a mí, comienzo a buscar algo decente que ponerme. No tengo mucha ropa de fiesta porque no soy una persona que le gusten... las fiestas. En Holmes Chapel nunca me han hecho falta los vestidos de lentejuelas o las minifaldas, no tenía a nadie a quien sorprender o ninguna fiesta propiamente dicho a la que acudir. Mi hermano tampoco tiene nada que ponerse, la verdad es que fue un detalle por mi parte no decirle que le iba a llevar a una fiesta. Es cierto que mi hermano trae de todo en la maleta, pero hay cosas que si no tenía planeadas y si Harry no lo tiene todo planeado...bueno, digamos que se estresa.

-¡Dios! ¡Me podías haber dicho que íbamos a ir a una fiesta para traerme algo decente que ponerme! -me dice mientras rebuscar sin parar en su maleta

-Lo sé, lo siento. Es que quería darte una sonrisa y como luego me castigaron pues... -intento excusarme

-Bueno, ¿tú crees que con esto voy bien? -me dice mostrándome una camisa blanca y unos vaqueros negros medianamente arreglados.

-Por supuesto, lo que no sé es cómo dices que no tienes nada decente... -Le digo volviéndome hacia mi armario para buscar algo para mí

-Tengo mejores cosas en mi armario en Holmes Chapel

-Ahora tengo que decidir yo qué ponerme...

-Con cualquier cosa que te pongas estarás preciosa - me dice besando mi sien y sale de la habitación

Continúo con mi aventura de buscar un vestido y finalmente encuentro uno del que desconocía su existencia. Lo saqué del armario y vi que era un vestido negro, corto, con unas finas tirantas. Decido que, ante la falta de otras opciones, este es el vestido perfecto. Me lo pongo y le cojo a mi madre unos zapatos negros a juego.

-Estás extremadamente preciosa - me dice mi hermano apareciendo en mi habitación.

-Gracias, tú tampoco estás nada mal - Ahora que se ha colocado el conjunto está casi mejor. Las mangas de la camisa ahora están arremangadas y llegan tan solo hasta los hombros.

Me pongo frente al espejo y me dibujo una fina línea en mis ojos, les doy rímel a mis pestañas, algo de color a mis párpados y finalmente corrijo mis imperfecciones con una base. Todo esto bajo la atenta mirada de Harry.

-¿Se puede saber qué miras tanto? -le pregunto

-Es que nunca te he visto maquillarte, es cierto que has cambiado

-Bah, no creas -le respondo divertida

Justo en ese momento llaman al timbre de la puerta y mi madre nos llama a Harry y a mí desde la entrada anunciándonos la llegada de Niall. Nos despedimos de mi madre y nos vamos a la fiesta.