Capítulo 30 -El problema de Liam-

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(Eva)

Después del maravilloso beso y la gran emoción por la declaración de Liam, ambos nos sentamos bajo el árbol junto a nosotros, Liam pasa su brazo por mis hombros y apoyo la cabeza en su pecho.

-Oye y... ahora que ya tienes lo que necesitabas... ¿me contarás tu problema? -le pregunto

-No sé... tengo miedo -me dice él

-¿De qué?

-Ya te lo dije, tengo miedo de que te vayas si te lo cuento - me confiesa

-Y yo ya te he dicho que no me iré -le digo agarrando su rostro.

Aún me resulta raro hacer esto con Liam... parecía tan distante cuando le conocí. Liam suspira, aparta su hombro de mí y comienza a juguetear con sus manos. Coge fuerza para contármelo y comienza.

-Verás... todos los que estamo en la sesión de grupo tenemos algún problema, algunos lo cuentan y... otro como yo preferimos no hacerlo. Yo estoy en la sesión porque...-cierra los ojos

-¿Por qué? -insisto

-Porque maté a un chico... -mis ojos se abren de par en par y me alejo un poco -Pero no fue a posta, no quería matarlo, simplemente quería darle lo que se merecía. -Mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas

-Pero lo hiciste, le mataste... -digo asustada

-Por favor Eva, escúchame. -dice intentando colocar una mano encima de mí pero se lo niego - Por esto no quería contártelo... ahora te irás y no querrás saber nada más de mí porque soy un puto asesino

Tiene razón, le prometí que no me iría, pero si una persona te dice una cosa así lo primero que piensas es que, si lo ha hecho una vez, puede volver a hacerlo.

-Lo siento... no me esperaba... eso... ¿Por qué lo hiciste? -le pregunto

-Es igual, estoy seguro de que ahora no quieres saber nada más de mi. Por esto es por lo que oculto mis sentimientos, porque nadie estaría conmigo si me comportase como soy. Todos quieren ver al chico chulo, macarra y que se tira a todas las tías del instituto, nadie quiere a un pobre gilipollas. -dice pégandole una patada al árbol

-No Liam, a mí sí que me interesa ese pobre gilipollas como tñu dices. ¿Por qué lo hiciste? -Liam vuelve a suspirar

-Porque él intentó hacer lo mismo conmigo -confiesa entre lágrimas. Jamás pensé que le vería llorar

-¿Intentó matarte?

-No sé si matarme, pero desde luego sí hacerme daño. De pequeño sufrí bullying y tuve que aprender a defenderme de sus amenazas. Nadie era mi amigo, nadie quería estar conmigo, las chicas ni se me acercaban y si lo hacían, era para reírse de mí. Incluso le pedí salir a una 22 veces y me dijo que no las 22. En una de esas veces que me amenazaba, me mandó al hospital.... No fue nada grave, pero digamos que he pasado demasiado tiempo en un hospital como para querer volver. Comencé a practicar boxeo, me convertí en lo que los demás querían que fuese, empecé a dejar de estudiar y por eso repetí y este chico jamás volvió a meterse conmigo, pero yo quería devolverle todo el daño que me hizo y lo conseguí...

-¿Qué hiciste? -pregunto intrigada y asustada por la respuesta

-Fui a su casa, sabía que esa noche sus padres no estarían en casa. Al principio me comporté como si fuésemos amigos de toda la vida para engañarle, pero al final acabé pegándole una paliza que lo dejó inmobilizado en el suelo. -Se le empiezan a llenar de lágrimas los ojos - Sus padres llegaron antes de lo que yo pensaba... me vieron... su padre se acercó a él para ayudarle... pero ya estaba muerto... ¡yo no quería matarlo! Pero todo se me fue de las manos. Intenté salir corriendo pero no podía, la policía llegó y me arrestaron.

-¿Fuiste a la cárcel? No creo porque eras menor de edad

-No, no fui a la cárcel. Me intentaron meter en un correcional, pero mis padres pagaron una fianza que les dejó sin una sola libra... -dice secándose las lágrimas - Tras eso, mis padres se cambiaron de ciudad y se vinieron a Londres, me metieron en este instituto y me apuntaron al psicólogo.

-No pensé que tu problema fuese tan grave... - le digo más cerca de él

-Por eso no te lo quería contar, sabía que te asustarías.

-No estoy asustada

-¿No? Sabes que jamás volvería a hacer algo así, he cambiado...

-No, no has cambiado. Sigues siendo el chico que los demás quieren que seas, no quien tú de verdad eres. Si tratases a todo el mundo igual que me tratas a mí, todo sería diferente.

-No lo creo... - dice apenado

-Liam.. -comienzo pero me interrumpe

-Eva no quiero hablar más del tema, por favor. Vámonos -me dice tomando mi mano y sacándome del hermoso prado

-Pero

-Pero nada, no quiero hablar más - dice serio y nos montamos en el coche

Estoy completamente impresionada por la forma en la que Liam se ha abierto a mí sin apenas conocernos. Ahora entiendo muchas cosas, ahora entiendo porqué aquel día no se fue de la sesión y entiendo porqué se oculta bajo esa cazadora negra de chico malo. Sé que se arrepiente y que llevaba mucho tiempo ocultando esto, sin contarlo por miedo a que nadie le comprendiera pero ahora le entiendo mejor que nunca, ahora las cosas serán diferentes.

IncomprendidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora