Querido diario:
No sé cómo hablar con mi hermana.
Es un tema muy delicado y no puedo simplemente ir y preguntarle por qué se metió en esas cosas, no sabe que yo lo sé.
Emma y Joshua me dieron una idea, no le di importancia cuando me lo dijeron porque me pareció estúpido... pero puede que ahora lo esté considerando.
Me dijeron que tal vez podía hacerle algún tipo de trampa, como pedirle de esas sustancias y luego cuando viera que se trataba de mí, podía sacar el tema y hablar sobre aquello en ese momento. Suena muy tonto, lo sé.
Pero también sé que no sé que hacer.
Me cuestioné muchas veces si ocultarle a mi madre lo que sé está mal, pero tampoco puedo ir decírselo así sin más.
Demonios, todo es tan complicado. O tal vez simplemente soy yo el que se complica más de lo que debería.
Lo que sé hasta ahora es que no puedo decírselo a mi madre, que debo hablar con mi hermana sobre eso de una vez por todas y lo peor, que gracias a eso mi padre estaba teniendo dinero para sus vicios.
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Diario de un chico solitario
Ficção AdolescenteDaniel Jefferson siempre había sido muy solitario, no le gustaba la compañía de nadie. Y aunque había cierto chico que decía ser su amigo, no lo era. Él no quería ni necesitaba amigos. Su madre y su hermana no entendían porqué había adoptado esa fo...