Capitulo 3

2.6K 222 27
                                    

Sysyfo se sentía culpable, la imagen de Aome llorando y gritando desesperadamente que ella no tenía la culpa de que no encontrarán a Sasha, no podía salir de su mente.

La misma Sasha había preguntado porque parecía que Aome había llorado, pero no le respondieron, al contrario, cuando la pequeña Athena se retiró junto a la azabache, Asmita y el patriarca Sage le dieron un buen regaño y sermón a Sysyfo.

Sysyfo: Yo no hice nada.
Sage: Te conozco y sé cómo es tu convivencia con ella.
Asmita: Ella guarda muchas cosas, pero ha demostrado que podemos confiar en ella.
Sysyfo: Me voy, hoy tengo guardia junto a Shion y Dokho.

.....

Había ido a dar su reporte de la guardia, sin embargo la pequeña Athena salió a su encuentro, diciéndole que Aome no estaba, todas su ropa estaba en su habitación, menos su arco y flechas y una capucha.

Sage: Sysyfo, creo que no es necesario decirte que vayas a buscarla.
Sysyfo: La traeré de vuelta.

.....

La busco por todo el santuario, después fue ese pozo en el que la había visto saltar la última vez, sin embargo no la encontró.
Se aventuró a entrar en el bosque, Aome parecía ser fuerte, pero no conocia ese bosque y algo podía pasarle.

Llegó hasta una parte bastante alejada, en dónde la encontró, lanzando flechas, claramente practicando su puntería.
Se veía en su rostro que había estado llorando.

Sysyfo: Aome. - llamando su atención - Sasha...
Aome: Me iré Sysyfo. - sorprendiendolo - si se lo decía iba a llorar y no me dejaría ir.
Sysyfo: ¿Irte? - pregunto con notable sorpresa - ¿Por qué te vas?
Aome: Porque ya estoy harta de tu maldita desconfianza, estoy harta de que me hagas sentir que soy una carga para todos en el santuario. - grito mientras lloraba y apretaba sus puños - yo no pedí venir a este lugar, lo que yo quería era volver con mis amigos, con Inuyasha, hasta con Sesshomaru. Pero el pozo me trajo a este lugar.
Sysyfo: ¿De qué estas hablando?
Aome: Te diré todo, únicamente porque necesito buscar a Sesshomaru y tal vez él me pueda ayudar.

Aome le contó todo, lo que había pasado con la perla, con sus amigos, con Inuyasha y Sesshomaru, y como fue que terminó en el santuario, incluso que ella podía ser la reencarnación de Kykyo.

Aome: Me voy. - dijo una vez termino de contar todo - es mejor así.
Sysyfo: Espera. - sujetando su brazo - Yo... Lo siento, no debí tratarte así desde un principio.
Aome: Ya no importa.
Sysyfo: Quédate. No lo hagas por mi, hazlo por Sasha, te ha tomado demaciado cariño en poco tiempo y también el patriarca Sage, y... Si así lo quieres, te ayudaré a encontrar una forma de que puedas volver a tu hogar.

Lo miro con confusión, no esperaba que le dijera algo así, pero se veía sinceridad en su mirada, y termino aceptando.
Regreso con él al santuario y dijo que sólo había salido a practicar su puntería.

Meses después

Aome: Aparte de insoportable, chismoso. (Molesta)
Sysyfo: Yo no te dije que siguieras a ese tipo.
Aome: En primer lugar. ¿Por qué me estabas siguiendo?
Sysyfo: No te estaba siguiendo. - argumento para defenderse - fui al pueblo por algo de víveres y te te ví, como corriste hacia ese sujeto y le gritaste "Inu" (riéndo).

Las discusiones entre Aome y Sysyfo seguían, a veces por cosas sin importancia y a veces por cosas un tanto serías.
Pero su relación era amistad-odio.

.....

Aome: Muy bien Sasha, si algo aprendí de mi amigo Miroku, es que para  poder concentrar tu poder y fortalecerlo, debes meditar.
Sasha: Así como Asmita. ¿Verdad?
Aome: Justo así.

Si, no se llevaban del todo bien, pero Sysyfo debía admitir que Aome se había convertido en una parte fundamental para Sasha.

Sysyfo: Aome. - llamando su atención - tengo que hablar contigo.
Aome: Dime.
Sysyfo: Leí algunos documentos en la biblioteca del patriarca, y... Se habla de ese hombre, de Sesshomaru.
Aome: ¿Que decía?
Sysyfo: Se encuentra en Oriente, al parecer lo relatan cómo una antigua leyenda, pero... Tú lo conociste.
Aome: ¿Cómo llego a Japón?
Sysyfo: Hay una embarcación que sale hoy por la noche.

.....

No sé despidió de Sasha y el patriarca, Sysyfo tendría que darles una buena explicación del porque había sido él la última persona con quién vieron a Aome.

Todo había salido mal, unos espectros atacaron a Aome, quien tuvo que defenderse sóla, hasta que Sysyfo llegó y se encargó de ellos.

Sysyfo: ¿Estás bien? ¿Te hicieron daño?

Aome no respondió, al contrario, le dió un fuerte golpe, Sysyfo reconoció ese estilo de golpe, Aspros golpeaba así, por lo que intuyo que ellos dos pasaban tiempo juntos.

Sysyfo: ¿Estás loca? - pregunto con natable enojo - ¿Por qué me golpeas?
Aome: Ese bosque es seguro Aome. - imitando el tono de voz -  y me enviaste directamente a esos tipos.
Sysyfo: Yo no sabía que...
Aome: ¿Querías hacerte el héroe? - pregunto con enojo - Maldita sea, si aún no confiabas en mi no tenías que enviarme directo al matadero, y menos con esos sujetos a los que si mataba despertaban casi a los cinco minutos.
Sysyfo: Escucha yo no....
Aome: Ni siquiera Sesshomaru, siendo un asesino a sangre fría era tan ruin como para hacer algo así.

Volvió a abofetearlo una vez más y después volvió al santuario, siendo seguida por Sysyfo, quien seguía insistiendo en hablar con ella y seguía recibiendo golpes.

.....

Sage: Quiero, pero no voy a preguntar qué pasó. - dijo mirando a Aome molesta y Sysyfo golpeado - Sysyfo, que las doncellas curen tus heridas.
Sysyfo: Con su permiso.
Sage: ¿Estás bien Aome? - preguntó una vez que el arquero se fue - necesitás...
Aome: Maestro Sage. - corrió a abrazarlo mientras lloraba - creí que Sysyfo ya no pondría en duda todo lo que hacía pero...
Sage: Hablaré con él. - abrazandola - Se que algo pasó entre ustedes.

.....

Los días habían pasado, el poco progreso que Aome y Sysyfo habían tenido, desapareció gracias a ese incidente, y no sólo eso, si las miradas matarán, Sysyfo ya estaría tres metros bajo tierra gracias a Aome.

Sysyfo: Escúchame bien Aome. - dijo acorralandola - yo no tuve nada que ver en lo que pasó ese día.
Aome: No te creó.
Sysyfo: No me creas si no quieres, pero te lo juro por Athena, yo no tuve nada que ver en eso.
Degel: Si van a hacer sus cosas... Por favor que sea en un lugar en el que no los vean.

Sysyfo y Aome se dieron cuenta de que estaban justo en la entrada del coliseo, y todos los estaban viendo.

El color de los dos se podía comparar con los tomates, y sin pensarlo dos veces, Aome lo golpeó y salió corriendo.

Dokho: Pega duro.
Sysyfo: Reconozco que Aspros la está entrenando bien. (Quejándose)
Aspros: No se de qué hablas. (Indiferente)

Desconfianza que lleva al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora