✰✞︎ 𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 𝘜𝘯𝘰 ✰✞︎

463 43 26
                                    

✞︎ Mᴏʀᴏᴄʜᴀ : Dᴜᴄᴋᴏ ✞︎

.


Paz y tranquilidad era lo que se podía sentir dentro de un colegio ubicado en la capital del país. En dicho lugar, todos se encontraban desarrollando sus propias actividades cotidianas, varios charlaban y boludeaban con su típico grupo de amigos.

Otros preferían pasar un tiempo en pareja y darse algo de cariño, algunos optaban por repasar ciertos temas que habían visto el día de hoy y que no le quedaron del todo claro.

Pero siempre existía algo que desgarraba dicha armonía, siendo el caso de un pie de estatura media, cabello morocho y de hermosa piel canela, quien perseguía a un peliblanco de hermosos ojos verdes, el cual corría despavorido de aquel.

Porque sabía que, si el contrario lo atrapaba, no iba a quedar ningún rastro de él.

.

¡MONZÓN, HIJO DE PUTA! ¡VENÍ QUE NO TE HAGO NADA! ¡PELOTUDO DE MIERDA! el morocho exclama, yendo a gran velocidad detrás del antes mencionado, quien busca desesperadamente a su pareja, para que este le fuera de defensa contra la bestia en la que su buen amigo se había convertido.

¡Ya te pedí perdón, Matías! ¡Así que cálmate un toque! Mauro responde casi de la misma manera, encontrando por fin a quien estaba buscando con tanta desesperación. ¡Pauloooooo, amooooor! ¡Matías me quiere pegaaaaaar! ¡Así que ayudaaaaa! grita, dando su último esfuerzo para llegar con aquel rubio que solo es capaz de ver confundido a su pareja y al mejor amigo de este.

¿Y hoy que les pinto? es lo primero que Londra, el novio de Mauro, es capaz de decir mientras era utilizado como un escudo humano.

Paulo, esto no te concierne, así que deja que ese pedazo de animal y yo hablemos. Spallatti responde con la respiración agitada, señalando a Monzón, quien sigue detrás de su novio.

No Pau, si te vas Matías me va a pegar. el ojiverde solloza, ya sintiéndose bastante nervioso con lo que pasaba, porque jamás había visto así de molestó a Matías.

Que te quiera pegar es poco, solo te voy a acariciar el cuello con un cuchillito, nada de otro mundo. Matias dice rápidamente, sorprendiendo enormemente a Londra, quien no tarda en defender a su chico.

Eu, vos no le vas a poner un dedo a Mauro. el Cordobés contraataca sin pensar, haciendo que Monzón se sienta por fin algo seguro. No sin antes decirme que hizo ahora. confiesa, teniendo presente que su novio no era ningún santo y que de vez en cuando se mandaba más de alguna cagada, que lo ponía en situaciones como estas.

Aunque esta era mucho más grave que las otras.

Solo para aclarar, vos también tenés la culpa de lo que pasa. Porque no debiste enseñarme a editar fotos, ni mucho menos como utilizar Photoshop. el peliblanco le aclara a su novio, quien desde ya puede imaginarse la gran estupidez que su novio había hecho con sus conocimientos. — Y Matías por tener un extraño fetiche de ponerse polleritas y ropa de mujer. suelta en voz baja para que nadie más que los contrarios lo escucharán, haciendo que el rubio se sorprenda demasiado y que Spallatti tenga más ganas de matarlo.

Cagaste. Matias dice a la misma vez que se lanzaba encima de Paulo, quien terminó recibiendo todo el peso del contrario, empezando así una extraña pelea enfrente de los demás, quienes no tenían ni la más mínima idea de lo que pasaba.

|| Mᴏʀᴏᴄʜᴀ : Dᴜᴄᴋᴏ  ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora