Capítulo 25.
{Ross}
Iba a abrazarla pero sentí un dolor tan grande en mí cadera que no me pude mover. Esto era muy raro, hice una mueca.
-¿Pasa algo?
-No, nada.–Mentí.
-Vamos, dímelo.
-No puedo moverme, me duele mucho la cadera.–Confesé.
-El doctor ya me había advertido sobre esto.
-¿Qué?–Pregunté extrañado.
____ Agarró su celular y llamó a Grace.
-Ya viene en camino, iremos al hospital.
-No es para tanto ____.–Susurré.
-Sí Ross.
Esperamos unos minutos y Grace llegó. Como no podía casi moverme, me ayudaron hasta llegar abajo. Aunque sufriera de claustrofobia, tuve que bajar por el ascensor. Me sentía pésimo...Nos subimos al auto de Grace y partimos al hospital. Apenas llegué me pasaron a una silla de ruedas y me llevaron con el mismo doctor que me atendió cuando me atropellaron. Haberme salvado de eso, era un milagro. Y repito, yo no creo en los milagros.
El dolor me consumía, quería una maldita anestesia rápido.
-Hola Ross.
-Hola doctor.
-Bueno, te explicaré lo que pasa.
-Es...está bien.–Asentí haciendo una mueca.
-Después de tu accidente, nos dimos cuenta que gracias a Dios no te ocurrió nada. Pero, en conclusión puedes tener estos fuertes dolores porque tú cadera no aguantará tanto. Llegará el momento, en que ''colapsará'' y..-Hizo una pausa, poniendo cara de tristeza.-..podrías dejar de caminar.
-¿Es una broma?–Pregunté con gracia.
-No, el sistema de tú cuerpo perdería la conexión con tus piernas. Y simplemente, no las sentirías.–Explicó triste.–Lo siento, Ross.
{___}
El nervio me dejaba casi sin uñas, en una semana había estado perfectamente bien. ¿Por qué hoy? Aparte, ¿qué me quería decir? todo lo que había preparado. Quizá me pediría ser su novia, ¿no? «Sueña ____.» Maldita conciencia, siempre arruinando todo. «Digo la verdad. Hay tantas chicas bonitas, ¿y el se fijaría en ti?« Tienes razón. «Siempre la tengo» Ya, lero lero, no te escucho.
-Tranquila ___.
-No puedo estar tranquila, pobre Ross.–Susurré caminando sin parar en el mismo lugar.
Ella se quedó en silencio y luego de unos minutos el doctor salió. Me acerqué hacia el inmediatamente.
-Ya pueden pasar señoritas.
-Muchas gracias.–Agradecí y pase.
El estaba ahí, con sus dos manos en su cara. Sentí tanta lastima por el, quería abrazarlo y besarlo por siempre. Pero me aguanté las ganas y me senté a su lado, acariciándole el cabello.
-Lo siento ___.
-¿Por qué?–Preguntó.
-Quería que todo saliera bien.
-Oh, no importa. Sabes que estaré aquí por siempre.–Dije.
-Quiero despertar de esta pesadilla.
-No es..-No sabía que decir.-Bueno, cambiemos de tema.
-¿Mmmh?
-¿Por qué hiciste todo eso?–Pregunté.
{Ross}
Cuando ella preguntó eso, no sabía que decirle. Así que tuve que mentirle, en este estado no podía decirle. Intentaría hacer algo más bonito.
-Para darte las felicitaciones.–Susurré.
-¿Por qué?
-Porque...me llegó una carta que decía que quedaste en la universidad.–Mentí.
-No seas mentiroso, esa carta me llegó hace
mucho tiempo.
-Oh, entonces...–
____ me cayó dándome un maravilloso beso. Me seguía acariciando el cabello, muy delicadamente. La apegué hacia mí y nos separamos por falta de aire. Le sonreí y ella me devolvió la sonrisa.
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*Muero murisidamente* <3
