Capítulo 39.
{Ross}
Después de jugar un rato al famoso juego de ____, volvimos al Hotel. Habíamos quedado en que hoy le enseñaría a ____ a bailar & ella “trataría” de enseñarme a tocar la guitarra con la mano derecha. Ya veremos qué ocurre.
(..)
Ya era de día, y tenía pensado llamar a la sexy de mí madre para saludarla y conversar algo con ella, la extraño mucho y a los chicos también.
—¿Cariño?
—Soy yo mamá. —Susurré caminando al balcón.
—Mí pequeño, ¿cómo va todo por allá? —Hablaba ella con su tono maternal.
—No soy pequeño, y muy bien. ¿Te conté que ya somos novios? —Respondí entablando una conversación.
—Oh, muy bien. Me alegro por ustedes, tratala con cariño, eh. ____ es una buena chica.
—Claro qué sí, sexy. —Asentí y solté una risa.
—No me gusta qué me digas sexy, o quizá sí. Pero ya, volviendo al tema..ehm, ¿qué hablábamos?
—Ya se te olvida todo. —Susurré y reí.
—¿Me estás diciendo vieja, Shor?
—No, ni se te ocurra. Mejor cambiemos el tema, ¿cómo están todos por allá? —Pregunté revolviendo un poco mí cabello.
—Tus amigos, bien. Tú padre y los pequeños revoltosos bien, también. En fin, todos estamos bien.
—Me alegro. —Dije soltando un respiro.
—Ya me tengo qué ir pequeño, llámame más a seguido. Te amo y adiós.
—Adiós, ma. —Me despedí y corté.
Me dirigí hacia el baño para bañarme, me saqué mí ropa y encendí la llave para meterme dentro del agua cómo siempre. Cuándo ya estaba listo, cerré la llave y cogí una toalla para enrollarla de mí cadera para abajo. Me sequé un poco el pelo, y vi sí ____ seguía durmiendo, y sí, allí estaba esa dormilona angelical. Me lavé los dientes y ahora sí, me sentía limpio.
Me vestí con mí típica ropa {sudadera larga, pantalones de cuero caídos que eran más cómodos, mis supras rojas y mí gorro negro, coloqué una cadena de oro, qué me la regaló mi padre y estaba listo con un poco de perfume.
____ ya había despertado -supongo- ya que no estaba en la cama. Y el baño estaba ocupado. Iríamos a almorzar abajo, mientras arreglaban la suite. Luego de unos minutos, ____ salió del baño aún con cara de dormilona y me dedico una sonrisa a la cual se la devolví.
Estaba vestida algo así, normal {http://www.polyvore.com/thumb_up/set?id=81543430} con lo cual se veía muy hermosa.
Bajamos al “mini-restaurante” y entramos.
—¿Mesa reservada?
—Ross Lynch. —Respondí inmediatamente.
—Claro, por aquí.
El joven nos guió hasta una mesa para dos personas donde la orden ya estaba servida. El le acomodó la silla a ____ para que ella pudiera sentarse, coquetamente. «Idiota, eso deberías hacerlo tú» Ya lo sé, me siento enojado conmigo mismo. Y con ___ por aceptar. «Ella no tiene la culpa Lynch, tú la tienes por no ser tan precavido» Ya, ya, cállate..
La vista era muy bonita, de acá se veía la Torre Eiffel, qué era totalmente hermosa. La luz pegaba en la cara de ____, lo qué hacía que se notaran más sus facciones, y se viera más delgada. Me fijé en sus muñecas, ella ya no se cortaba; me sentí aliviado por eso, algunas cicatrices se estaban yendo/desapareciendo y ella se notaba como toda una luchadora que es.
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"Me fijé en sus muñecas, ella ya no se cortaba; me sentí aliviado por eso, algunas cicatrices se estaban yendo/desapareciendo y ella se notaba como toda una luchadora que es." Asdfghjklñ <3
