HIPÓLITA @wattys2015

CAPÍTULO XVII

Eros había acompañado a esa expedición al Mar Negro, solo para conocer a aquellas temidas guerreras, corría la historia de mujeres atrevidas, que luchaban a la par de los hombres, montaban sus corceles blandiendo arco y flecha.
Se contaba también, que uno de sus senos, era cortado para darles mejor presición en la puntería.
No podía perderselo por nada del mundo.
Pero al llegar fue màs de lo que esperaba, todas mujeres musculadas, algunas dedicadas a la tarea de la cría de los caballos, otras educando a las niñas en el arte de la lucha, pero todo organizado de manera matriarcal y ordenada.
Teseo se mostró inmediatamente interesado en su reina. Cuando esta apareció en el puente de Diana cazadora, fue como si un hechizo lo segara.
La naturaleza del viaje era conseguir una alianza con las amazonas, y seguir con las demás tribus pequeñas, hasta lograr hegemonía.
Pero esto no pasó y se transformó en una estadía prolongada.
Eros también quedo prendado de la belleza de Hipólita, pero solo quería meterse en su lecho, y quizás, vivir cómodamente un tiempo, y tal vez los dioses, lo premiaran con un hijo.
Pero la morena dejó en claro que solo quería un príncipe que le sirviera de semental para su progenie.
Lo rechazó categóricamente, lo  humilló, y logró que terminara su amistad con Teseo.
Maldita ramera lanza-flechas... así que fue perdonada su vida, pero  desterrado con un poco de agua, comida para dos días y un caballo.
Ese fue el principio del fin. Eros vagaba errante por el agreste paisaje, pensando solo en la manera de vengarse de esos dos.
Obvio, que este general poseía una visión muy particular de la situación, codicioso, con el alma mesquina, solo podía pensar en vengar esa afronta.
Así vagó por unos días, que se hizo semana, sobrevivió como pudo, pero la falta de agua lo estaba llevando a la muerte poco a poco.
Solo había rocas y arena, y no conocía la región, una noche, mientras se resguardaba para dormir, una jauría de coyotes, apareció de la nada y lo atacó.
Su caballo,  espantado, huyó despavorido, y como pudo,  luchó por su vida.
Lo logró, pero esto lo dejó mal herido y muy debilitado.
Así fue que lo encontró Fedra, casi muerto lo hizo llevar por sus esclavos a su morada.
Ella era perfecta...y malvada.
Eros fue curado gracias al poder mágico de la bruja, quien no tardó en averiguar quién era.
Lo invitó a quedarse, a disfrutar como su huésped, podía tener una esclava diferente cada noche, pero no la podía tocar.
Esto fue específicamente aclarado, ya que al parecer ,tenía otros planes.
Vivir allí, hizo que Eros, conociera otro aspecto de la vida, que nunca había imaginado.
Fedra le pidió lealtad a cambio de beneficios, èl aceptó de buena gana, casi muere en ese territorio abandonado por los dioses.
Un dìa, Fedra lo condujo hacia un curso de agua subterránea, desde allí se podría viajar a cualquier tiempo y lugar, le explicó, tenía un trato con el dios del inframundo, y consiguió el favor del hechizo.
Pero esto tenía su lado malo, o debías ser muy poderoso o inmortal, y Fedra no era aún, ni lo uno, ni lo otro.
Pero le había explicado a Eros, de como Hipólita la había desterrado hacía un tiempo atrás, y ella solo quería su muerte, pero la amazona tenía la protección de Marte y sus hechizos no podían funcionar.
Investigando la manera de cambiar esto, llegó la gracia de Ades, y con esto un secreto.
Hipólita tenía una profecía que pesaba sobre ella. También, que volvería y sería salvada de sus propios actos, y el detalle màs importante, sería inmortal.
Si Fedra lograra atrapar la inmortalidad de Hipólita, ella sería la bruja màs poderosa de todos los tiempos.
Pero debía conseguir el hechizo adecuado.
Eros, unió cabos y desidió ayudarla a cambio de un poco de inmortalidad, eso lo haría casi un dios, esta idea era codiciada por el general y se relamía como un felino, al pensar en ello.
Primero, pondría de rodillas a Teseo, luego se casaría con aquella altiva amazona, y si quedara tiempo, tendría un hijo con ella.
Sería la venganza perfecta, y no dudaría en refregárselo a Teseo por la cara, y cuando aquella que lo despreció, supiese quién era èl ...cielos! , sería increíble.
Luego viviría una eternidad disfrutando de juventud y riquezas, era glorioso! Por fin la diosa fortuna le sonreía a èl, Talos.
Pero las cosas empeoraron y mucho, Hipólita muere y antes de que Fedra pudiera tener un hechizo.
Esto cambió la jugada, y hubo que pensar un nuevo plan. Debían viajar en el tiempo y encontrar a Hipólita, Fedra logró que las arpías trabajaran para ella y robaron un hechizo de Circe, la gran bruja que ayudó a Ulises. Luego ella tendría que arreglar cuentas con Circe ...
Pero lo tenía, viajó a una realidad alterna de Hipólita, y allí, algo sucedió, Fedra no pudo llevar a cabo el plan.  Algo que Eros nunca supo, algo que cambió a la calculadora y fría Fedra.
Al principio, èl creyó que el viaje la había agotado, que eso la afectó màs de la cuenta. Fedra no habló una palabra, por un mes se encerró entre papiros viejos y escritos que solo ella podría entender.
Eros llegó a pensar que algo terrible vió, como para que afectara tanto a una hechicera que podría cortar el cuello de un hombre sin pestañear.
Pero luego de ese tiempo, Fedra recobró la compostura, y màs desidida, como obstinada en viajar al futuro a como dé lugar. Tenía un plan, mandaría a Eros a encontrarla, pero ella solo viajaría en el tiempo cuando esto sucediera. No antes, desde esta era ella manejaba mejor las cosas y podría prepararse para conocer mejor el futuro.
Así fue como el general terminó en un mundo sobrestimulado, tecnológico, moderno, donde el peor de los actos podía ser realizado y nadie se inmutaba por ello...
Un mundo pervertido, pecaminoso, donde los bajos instintos, eran moneda corriente, y sobre todo, Eros pasaba desapercibido, porque, aunque el mundo había cambiado, las personas seguían respondiendo a lo mismo.
El dinero.
Con dinero, uno podía decir cualquier cosa y ordenarlas y los demás se transformaban en adoradores, sin ser obligados.
Mejor imposible ...
Es así que tras varias décadas, logró hallarla, incansablemente, buscó la pista que lo llevara a ella y un dìa supo de una familia de origen griego, cuya hija encajaba con todos los datos astrales dados por Fedra.
Y así, acechó el hogar de esa niña, luego adolescente, se hacía cada vez màs hermosa, màs Hipólita.
Desde lejos, como un depredador, la vigilaba, seguía todos sus movimientos, y cuando llegó el momento, actuó.
Se liberó de los padres, los mandó a volar, las queridas arpías, fieles y leales a Fedra, ocacionaron un buen alud en la montaña y adiós a los papis ...
Para ese entonces, èl había hecho un trabajo fino, cuidadoso, fue ganando la confianza de la amazona y todo se dió a pedir de boca.
Se propuso enamorarla, doblegarla, y por supuesto, hacer uso de sus derechos como prometido.
Pero ...siempre hay un pero, ella no parecía estar enamorada de èl, era màs como si Eros fuera su tabla, su salvación, y hubiera un acuerdo, un negocio entre ellos.
La pasión de Hipólita, era la llama de una vela, nada la apasionaba como se esperase de una mujer enamorada.
Y esto lo enfureció hasta que sintió por Hipólita, lo que se siente con un trabajo bién pago, deber, solo deber hacia ella y por supuesto, algunos beneficios.
Luego la redujo, poco a poco la fue absorbiendo, haciendo que su vida girase en torno a èl. Ella se fue entregando como quien se resigna a su destino, la pérdida de sus padres fue un golpe muy duro, y Eros se encargó de reforzar la idea de soledad que ella ya poseía.
Poco a poco la fue arrastrando a fiestas, de las que èl ya era asiduo, la instó a beber y cuando ella abortó esa criatura, metió tanta droga en el cuerpo de Hipólita, que ella se transformó en una bomba de tiempo, muy irracional, impredecible.
Aquí, en este punto, Eros ya la engañaba, y solo la dejaba por días, con suficiente alcohol y drogas como para que muriese. Muy por el contrario, esto no ocurrió y cuando Fedra se enteró que la había embarazado, por poco lo mata.
"Eso no debió pasar nunca! Sabías, sabías, traidor, te lo dije mil veces!
Cómo pudiste?! Es este el momento donde me dirás cómo solucionarás este problema, o te daré un pasaje de ida a ver a Ades, y te aseguro que no te va a gustar. "
Fedra logró mucho poder, Ades la adoraba, ella era su mascota favorita, pues Fedra, conseguía esclavos para el señor del inframundo. Y èl gozaba con esas atenciones.
Eros fue sorprendido con aquella visita inesperada, pues guardaba en secreto la posibilidad de tener un hijo con la amazona, eso lo haría muy poderoso, el padre del heredero...un sueño muy adorado.
Pero no pudo ser y envió a Hipólita por un sendero en picada hacia la destrucción, ya no le importaba, ella no tenía nada para èl y si Fedra logró llegar a este mundo con ese poder, podría bién sacarle inmortalidad y listo, adiós Hipólita.
Es así que desidiò secuestrarla, llevarla ante Fedra y luego ...bién, Fedra sabría que hacer, sin hijo, por lo menos quería inmortalidad.
Marte cuidaba de su hija, aunque esta no supiera ni quien era ; porque imprevistamente, Hipólita tuvo un brote psicótico, y cuando èl quizo llevarla ante Fedra, huyó como si el mismo diablo la persiguiera, luego el acccidente, la pérdida de memoria y si... èl entraba nuevamente al juego, las barajas, se dieron y Eros estaba de suerte.
En fin, la diosa fortuna, estaba de su parte. Ahora mismo, tenía muchas ganas de mandar a pasear a Hipólita, salir de juerga y conseguir algunas chicas que le den un poco de amor...
Pero Fedra lo había amenazado y èl bién sabía que ella no tendría piedad si volviera a equivocarse.
Que maldita situación, y ni siquiera pudo volver a tener una buena noche de sexo. Eso, debería salir, beber, divertirse, al final, este era su momento.
Así que no esperó el regreso de Hipólita, luego de un baño, ropa de diseñador, negra, por supuesto, y su perfume màs caro, se dirigió al club.
Los centauros, eran fieles concurrentes, siempre alegres y dispuestos a los excesos. Pero también las arpías y Fedra ...
Pero no era momento de arrepentimientos, esa noche no dormiría solo.
Llegó al club en su Ferrari negra, le gustaba pensar que era un Alejandro Magno moderno, en su bucéfalo.
Con su habitual desenfado y arrasante personalidad, entró, lo primero que vió fue a los centauros, chocaron manos e hicieron bromas.
Luego fue a la barra y se dispuso a prestar atención a la fauna presente, èl, esa noche sería un depredador.
______Eros! Querido, tanto tiempo!
Celeno, con su aire lúgubre, se había acomodado a su lado, ni siquiera la había escuchado.
______Qué haces Celeno?
______Nada, ya sabes ... aquí y allí. Pero tu no debieras estar cuidando una linda amazona? A Fedra no le gustaría saber que has dejado a esa muñeca servida en bandeja a Rafael, verdad?
_______Siempre y cuando tu no quieras arrastrarte a los brazos de Atina, y quedar mal parada nuevamente ...todo saldrá bién.
_____De que rayos hablas mono?
______Sabes que fuiste tu quien dio el dato de donde estaba Hipólita cuando se accidentó. Querías conseguir el corazón de tu amazona, y fuiste con el chisme, pero creo que no salió muy bién eso, no? Ah! Y Fedra...nunca lo sospechó, verdad engendro?
La cara de Celeno estaba endurecida, ese mono se había enterado de todo. Lo miró con todo el odio del que fue capaz y se alejó.
Eros sacudió su vaso a modo de saludo y sonrió.
Hipólita esa noche llegó acompañada de Atina, Rafael no podía creer que esté allí, la extrañaba tanto, ella entró, pero supo que seguía siendo Felicia, asi que se controló para no abrazarla y besarla hasta dejarla si aire.
______Rafael, cómo estas? Disculpa el haber llegado de improvisto, es que debo aclarar algunas cosas contigo.
_____Claro, Siéntate.
______Bién, yo iré a comer algo a la cocina, portense bién niños. _____diciendo esto, Atina se retiró.
_____Dime, que quieres saber.____Rafael esperó a que Atina se fuera para hablar.
______Este medallón, que significa?
Rafael lo mirò y no pudo evitar la piel de gallina.
______Yo te lo regalé, es mi forma de demostrarte cuánto te quiero.
_____Qué? Pero soy una mujer casada, lo sabes,yo no debería hacer màs sesiones contigo.
Rafael la miraba y trataba de vislumbrar en el fondo de esta mujer desconocida ; a quien fue su compañera destinada, pero era como escarbar en el lodo.
_____Hipólita, hay màs de lo que puedes ver, màs de lo que imaginas, si recuperaras la memoria, sabrías porqué motivo te regalé ese medallón.  Por favor, no dejes de verme como tu terapeuta, yo te sacaré de esa niebla en la que vives, solo debes confiar.
Hipólita sentía a ese hombre despojado de toda mesquindad, hablándole de manera tan sincera ; que tuvo el impulso de correr a sus brazos y consolarse en ellos.
Rafael notó la duda en ella y se fue acercando hasta tomarla del rostro y besarla dulcemente.
El corazón de la amazona cabalgaba descontrolado, y la sensación de calma volvía a su cuerpo, como un aliciente, un bálsamo.
Rafael bajó sus manos para abrazarla y el beso se volvió profundo, carnal, hambriento. La acariciaba por encima de su ropa y ella vibraba incontrolablemente.
Pasaron unos segundos que apareció un siglo y ella se alejó.
_____Rafael, por favor, esto ... esto no está bién, es raro ...siento que ...
______Que me conoces y somos uno.
Ella abrió los ojos y no pudo contener las lágrimas.  Se dió la vuelta y salió de la habitación secándose los ojos.
Sorprendido, Rafael corrió hacia ella, la alcanzó y la giró por los hombros.
_____Espera, es confuso, lo se, pero estabas a un paso de recordar tu vida y una noticia mal manejada te volvió para atrás. 
_____Sabes, lo peor no es descubrir lo que siento, si no, saber que mi vida está equivocada y no se como arreglarla.
Diciendo esto tomó la puerta y salió, en ese momento llegaba Atina y frenó a Rafael antes de que la volviera a seguir.
_____Necesita tiempo amigo, yo harè lo posible, hablaré con ella, harè que entre en razón de una u otra forma. Sabes, esto me está cansando, no puedo posponer màs tiempo esto.
Y diciendo esto se marchó, dejando a un muy frustrado Rafael.
Al salir Hipólita estaba fumando en el auto.
_____Oye! ____la retó quitándole el cigarrillo.
____Porqué haces esto? Porqué me ayudas?
______La verdad hará que sepas que soy tu amiga y que no te dejaría sola nunca, y que te dañes tampoco.
Hipólita la mirò agradecida y la abrazó tan fuerte que Atina respiraba con dificultad.
_____Llévame, es muy tarde y a Eros no le agrada la idea de que salga tarde.
______Usted manda.
Hicieron el camino en silencio. Al llegar, Atina vió a su amiga muy abatida.
______Ve, toma un baño y descansa. Nada de alcohol y cigarrillos, quedamos?
______Claro, se que fui una adicta, es por eso, verdad?
_____Ya no te preocupes, como bién dijiste, lo fuiste, y lo superaste muy bién.
Hipólita bajó, y entró esperando ver un furioso Eros. Al no hallarlo lo llamó al móvil, pero no hubo respuesta.
Le extrañó, pero decidió hacer caso al consejo de Atina.
Un ruido despertó a Hipólita, abajo había alguien, lentamente se acercó a la escalera para ver un Eros entrar muy animado acompañado de una mujer joven.
______Eros? Qué es esto?
Èl la mirò sin preocuparse. Se acercó a ella y la llevó del codo a su habitación.
______Nena, no pretenderás que haga votos de castidad verdad?
Hipólita no podía creer lo que ese canalla decía.
_____Eres un canalla! Còmo te atreves?! En mi casa, con una mujer ...
______Pero si tu has corrido a los brazos de ese hombre, con la ayuda de tu amiga, por favor! No te hagas la inocente conmigo. Ramera!
Eso era el fin, llamarle ramera. Levantó la mano y le asestó un golpe duro en la mejilla, tanto que Eros tambaleó, pero lo que siguió no se lo esperaba.
Èl le devolvió la bofetada, la tumbó en la cama y se sentó encima de ella dándole dos golpes màs haciendo sangrar su nariz y la comisura de los labios.
______Nunca màs vuelvas a tocarme mujerzuela y te quedas aquí, saldrás cuando te diga y harás lo que te diga. Agradece que no te forcé a satisfacerme como la puta que eres. 
Salió de encima de ella, tomando el móvil que le había dado y cerrando con llave tras de si, la puerta del dormitorio.
Hipólita temblaba como una hoja, asustada, dolorida, humillada, perdida, ultrajada hasta el alma.
Solo pensó en morir.