09. Candado

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La luz de la mañana se asomó por la ventana en donde dos jóvenes yacían dormidos uno al lado del otro. Forth tenía a Beam sostenido entre sus brazos, mientras que Beam descansaba su cabeza en el pecho de Forth. Era una escena muy linda.

El primero en abrir los ojos fue Beam, quien se quedó mirando el rostro dormido de Forth. Los recuerdos de la noche anterior lo golpearon y su rostro comenzó a sentirse caliente. 

"Eres mío"

Al recordar aquellas palabras Beam comenzó a sentirse tímido. No sabía qué hacer o cómo reaccionar en el momento en el que Forth despertará y lo mirara. Paso sus manos por su estómago aún plano y sonrio, decidió levantarse y preparar el desayuno para ambos. Pensó que después del desayuno podría darle la noticia de su embarazo a Forth.

-¿Por qué no te quedas y sigues mirándome? .- habló Forth con una sonrisa mientras sostenía el brazo de Beam para evitar que se levantará de la cama. Beam no dijo nada solo sonrio tímidamente.

-Quiero... quedarme...contigo... pero....- Los labios de Beam fueron cerrados por el beso mañarero que Forth le dio.

-Me gustaría mucho encerrarte y no dejar nadie te vea nunca más. Pero se que los deberes llaman. Aun así te estaré cuidando.- hablo Forth antes de depositar un beso en la nariz de Beam.

-Forth...yo...tengo algo que dec...- comenzó a hablar Beam pero fue interrumpido por los golpes constantes en la puerta.

Forth se levantó de cama, tomo la ropa que había en el piso, se la puso y abrió la puerta. Se sorprendió cuando miro a Arthit junto a Kongpob, tenían el cabello despeinado y por las bolsas en sus ojos, se notaba que no habían dormido anoche. Forth los miro, pero ninguno dijo nada. Se limito solamente a ver como Arthit se acercaba a Beam y le susurraba algo en el oído.

"Tenemos Problemas"

Logro escuchar Forth, ahora que se había desarrollado como un lobo completo, sus sentidos se habían agudizado aún más, podía escuchar sonidos desde lejos y tenía una gran vista, sin embargo aun no tiene los recuerdos de su familia.

-¡¿Problemas?!.- Forth y Kongpob preguntaron al mismo tiempo. Arthit asintió.

-Prepárate. Yo les contaré la situación.- Beam solo asintió ante las palabras de su hermano y se encaminó al baño a prepararse.

-P'Arthit. Hablé, ¿Cuál es el problema que hay.- Forth preguntó seriamente.

-No conozco todos los detalles, pero mi padre me dijo que era para tratar los sucesos sucedidos la noche anterior. Seguramente hablaran sobre las bebidas y los casos de violencia que hubo en el bar.- Arthit habló.

-Y ¿que hay de notros?.- preguntó Kongpob.

-No estoy seguro de que ellos sepan de ustedes todavía. Pero aunque trataran de hacer algo en contra de ustedes, Beam y yo los protegeremos.- dijo Arthit firmemente.

-Pero nosotros no hicimos nada.- protesto Forth.

-Lo sé, pero es cuestión de que la mente loca de los viejos del congreso comience a trabajar para tratar de que ustedes como lobos no vampiros carguen con el saboteo.- dijo Arthit.

-Por el momento ustedes sigan con su vida normal. Beam y yo nos encargaremos de defenderlos.- hablo Arthit cuando vio salir de Beam arreglado del baño y listo para partir.

Beam se acercó a Forth y depositó un suave beso en los labios a modo de despedida.

Kongpob se acercó a Arthit y lo abrazo , despidiéndome con un beso en la mejilla, a lo que Arthit lo miro de manera amenazante, sin embargo regreso el gesto a Kongpob lo que le valió un beso en los labios.

Forth y Kongpob solo vieron como sus parejas salian de la habitación, sabían que por más que quisieran ayudar no podrían hacer nada. Eran solo ellos dos encontra de miles de vampiros.

-Kong.

-Si, Forth.

-¿Sabes algo acerca de nuestra manada?.- Forth pregunto y Kongpob negó. Nadie sabia  porque no recordaban haber conocido a más lobos como ellos. Lo único que sabían era lo mismo que los demás. Un día encontraron a todos muertos y la aldea destruida. Ni siquiera los padres de Kongpob sabían algo además de lo que cuenta la historia.

"La historia, Claro"

Kongpob tomo la mano de Forth y lo arrastro a la biblioteca, si bien la historia contaba el punto de vista del autor, que tal buscar el de varios autores, no estaba seguro de si encontraría algo importante, pero aunque sea poco Kong quería intentar averiguar más. Mando a Forth a buscar en el área de hechizos, No sabia que buscaba exactamente pero si ninguno de los sobrevivientes a la masacre recordaba nada es porque seguramente a todos los tenían bajo un hechizo, ¿no? Era solo una loca teoría, pero puede que tenga razón. No perdía nada con íntertarlo, ¿Cierto?

Las horas fueron pasando y Kongpob no encontró nada relevante en los libros de historia, es más pareciera que su cerebro se había revuelto de tanta historia.

Forth tampoco tuvo tanta suerte, sin embargo, solo obtuvo una cosa.

-Kong, Vamos a buscar a Beam y Arthit.-  dijo Forth arrastrando a su primo fuera de la biblioteca. Kongpob no protesto solo siguió a su primo.

Cuando llegaron al dormitorio de Beam se encontraron con ambos chicos sentados uno al lado del otro, sus rostros estaban tranquilos, lo que significaba que todo había salido bien.

Forth camino hasta Beam y se arrodilló frete a él.- Beam, por favor rompe el candado que bloquea mis recuerdos.

Beam se sorprendió el rostro de Forth reflejaba desesperación. Y no sabia si podría ayudarlo. Ellos no eran magos, y no podían usar magia para colocar o romper candados en el cerebro de las criaturas. Solamente tenían fuerza y un poder único de cada vampiro.

-Forth...Yo...- Beam trato de negar la petición de Forth, pero al ver el rostro lleno de lágrimas, Beam sintió que su corazón se rompía.- Forth, yo te ayudaré a recuperar tus recuerdos..- dijo Beam y Forth se lanzó a sus brazos. Beam sonrio. Tener a Forth asi lo hacia sentir que tenía dos bebés en lugar de uno.

Cuando Forth se había calmando Beam miro a su hermano, le pidió de favor que cuidará a Forth pues sea había quedado dormido. Arthit asintió y le dijo que regresara pronto.

Pasaron algunos minutos y Forth despertó, buscó a Beam por todas partes pero no lo encontró, entro en pánico, tal vez actuar débil ante él, lo asunto e hizo que Beam lo odiara.  Arthit quien se encontraba al lado de él, le dio unas palmaditas en la espalda lo que logro calamar a Forth. Minutos después la puerta de abrió, haciendo que Beam aparecerá por ella, Forth sonrió, pero se tenso cuando vio a una mujer muy hermosa y con rasgos parecidos a los Beam al lado de él.

-Forth, ella es mi mamá. Ella sabe como romper el candado que mantiene tus recuerdos bloqueados.- hablo Beam y la mujer asintió. Ahora al fin sabria cual era su pasado, sabria de su familia, pero, él estaba listo para saberlo.
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¿Lo estás Forth?

Mi TesoroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora