Supervivencia
Tony Stark es un tipo perspicaz, sabe y reconoce lo que tiene, sabe que es bueno y reconoce que es celoso. También sabe que tiene a Steve y no lo piensa perder. No otra vez.
Existen cosas que odia de ser la pareja del famoso Capitán América, entre ellas esta esas miradas que las chicas le dedican, lujuriosas, insaciables, perversas. Steve es una bolita de algodón en manos de su esposo, aún casados nota esa aura de celos insaciables. No le incomoda, lo disfruta. Justo como ahora que Tony le pide, no. Le exige que use una camisa blanca, la cual, y para su perspectiva es muy apretada en la zona del pecho. Su entrenamiento y el suero lo requiere de esa manera.
Steve es suave con Tony y duro con el mundo, puede permitir que Tony lo domine, lo controle, que sea posesivo y celoso. Pero jamás permitiría que un recluta de shield le levante la voz.
Rudo, fuerte, valiente, serio, son palabras que comúnmente lo describen. Si le preguntan a Tony la cosa cambia, suave, lindo, adorable son sus palabras, muchos ríen y piensan que Tony finge o que Steve lo hace. Ninguna es verdad, Steve no es falso, existe de esa manera pero solo con él. Se lo debe.
- ¿En que piensas?- Tony mira atento su pecho se muerde un poco el labio y mira su rostro, tienen años de relación y el rubio sigue sonrojándose cada que su esposo le dedica una mirada lasciva y llena de segundas intenciones.
- E-en nada- que atore sus palabras así como en la primera cita, solo enaltece su ego, lo tiene de la manera en la que nadie lo tendrá, disfruta de hacerlo temblar.
Acerca su rostro con sonrisa pícara y su esposo esta rojo solo por sentirlo así - cerca- tanto que siente su respiración y ve cada marca de expresión en su rostro- ¿seguro?-
Y así como milagro del cielo o salvado por la campana, tocan la puerta justo antes que rocen sus labios, sabe que no podría contenerse con un roce o con un beso, una caricia. No, lo llevarían hasta el final. La cita, las velas, las flores, todo se echaría a perder. Por eso, corre apresurado a abrir la puerta y Tony de lado opuesto hacía la cocina por los platillos.
Reconoce la cara de cierta rubia que no le agrada a su esposo y trata que se valla rápido. Botón traicionero, botón desgraciado, se rompió. La escena, vista desde tercera persona se ve muy mal y lo sabe, se pone peor cuando Sharon trata de ayudarlo y pone sus manos sobre la camisa, se aleja. Es tarde lo ha visto todo, actúa con normalidad como si nada sucediera hasta que ella se va y la realidad le da un golpe. Tony deja los platos y se va sin decir palabra alguna.
***
Ha buscado su calor por las noches, el solo se aleja diciéndole que es un sucio por dejarse tocar por ella y que no quiere que lo toque. Eso lo consume, tanto que no se da cuenta que esta en el trabajo y que ese hombrecillo quince centímetros más bajo que el lo ha tomado por la muñeca y ahora lo arrastra hasta su taller.
- Así que...¿Te gusta que te toquen el pecho?- rodea la mesa y comienza a abrir los cajones.
Steve se sonroja aunque no sabe lo que viene. Solo espera que el castigo no sea muy duro.
- Desde que te conocí... No hay mujeres, no hay hombres, no hay nada...- nota que lleva puesto su traje de Iron Man y eso le asusta un poco.
- No estoy molesto... Debido a tu nuevo "fetiche", tendrás que usar tu antiguo traje...- dice con sarcasmo evidente, consigue lo que ha estado buscando y lo arroga contra la mesa- vístete-
Es su traje azul con detalles amarillos, tiene un gran cuello en v que deja poco a la imaginación. Máscara azul que intentaba cubrir la vergüenza de ser unos de los criminales mas buscados, cubrir la vergüenza de Siberia, de lo que paso ahí y de la manera en la que lo lastimó.
Cuando finalmente sale, se mira al espejo y se siente un poco expuesto, no entiende como uso ese traje alguna vez, con él solo puede ser así, sumiso y devoto.
Lo acerca por un agarre que ha echo en su cintura y va subiendo hasta sus pechos. Steve siente el frío mental rozar su cuerpo. Tony se desprende del traje y lo mira con fuego. A Steve le quema.
- No te voy a lastimar, pero tampoco te hare el amor- lo empuja con la fuerza suficiente como para que caiga sobre la mesa. - habla Steve, no has dicho nada- se sube encima de sus caderas y besa sus pechos hasta donde el escote en V lo permite. Steve tirita, esa zona siempre fue sensible, la mordidas, lamidas y besos de Tony solo lo reafirman.
- Habla...por favor...- tira un poco de los costados hasta que su pecho queda libre, hunde su rostro en el hasta que lo escucha gemir de manera desesperada.
- Castígame.
Saca su pene ya erecto de sus pantalones y da pequeño golpecitos en sus pezones. Steve gime y contempla su erección mojada y necesitada, solo quiere darle placer, para que nunca lo deje-como el alguna vez lo hizo- para solo lo necesite a él.
Los junta y se posa en el medio de ellos, hace un vaivén lento al principio y luego duro, la fricción de la piel suave de Steve lo vuelve loco, por eso va cada vez más duro.
- No tienes porque sonreírle a nadie de esa manera...- lento, rápido, duro, suave.
- lo-lo siento-
- Nadie tiene que mirarte de es manera- la fricción deja rojizos los pechos de Steve y los dedos del castaño dejan marcas violáceas a los costados.
-Eres mío Steve- su cara esta roja por el esfuerzo, mira su pene, esta mojado y venoso. Recorre con sus manos las caderas del contrario, siluetea su figura ¿Cuántas veces lo ha echo? - solo mío Steve, solo mío- ¿ cuantas veces ha cedido desde Siberia? ¿Cuántas veces más lo hará?. Siempre- ¡vamos! Dilo Steve, si que eres mío, solo mío-
- Soy tuyo Tony-
- Dile eso a Carter, a Natasha, a James a todos...- el vaivén es rudo solo Tony encuentra placer en lo que hace mientras Steve tiene una erección sin atender en sus pantalones.
- So...solo tuyo.
Hace una cara morbosa y estalla dejando su semilla en toda la cara de Steve.
- Todo esta perdonado- tiene la voz ronca de la excitación, siente que el aire es escaso por la posición en la que esta, el peso de Tony aplasta sus costillas. La respiración entrecortada no ayuda mucho que digamos tampoco el echo de tener la semilla de Tony esparcida por su rostro, formando así una la más morbosa escena que haya visto.
-Por favor.
El blanco manchando el azul del traje y la carne, sus labios entreabiertos un poco manchados de blanco también, su pecho húmedo y errático.
Acomoda sus pantalones, su ropa en general y se acerca al rubio, le extiende la mano en su dirección.
- Esto me trae recuerdos- dice y el rubio toma su mano, su espalda cruje un poco- ¿te lastime?-
- Solo un poco- mentiroso. Le dolió y mucho. No el físico, la mente, su rostro lleno de rencor que sabe que no puede olvidar.
La mayoría de criaturas vivas contamos con eso: El instinto de supervivencia. Nadie quiere morir de desamor pero tampoco vivir para amar de esa manera. El más bajo lo abraza y entre su cuello llora de manera desesperada. Lo que ahora vive le parece un deja vú incluso el tiene el mismo traje de ese día, cuando lo rescató de esa vieja cárcel de Hydra. Se odio por necesitar casi como al oxígeno a ese hombre que lo lastimó, lo abandonó dejándolo a la deriva, sin valor alguno.
Aún así cuando lo encontró lo abrazo por tres horas, no podía vivir sin su aroma, sin su calor. Sin él. Como buen masoquista buscó al que era el origen de su dolor, solo para volverlo a repetir.
El otro llora sin hacer ruido- lo siento si te lastime, perdóname por favor, no...no puedo vivir sin ti, no me dejes- los ojos cristalinos de Steve asienten y Tony lo abraza más fuerte. Pretenden que todo esta bien ¿Tony le quiere hacer daño? Si, pero no puede - todo está perdonado- .
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Together.
Fanfiction¿Acaso no es obvio? Mucho Stony. Cortos, con o sin continuación, que he ido escribiendo. los personajes no me pertenecen y no escribo con fin de lucro, solo para entretener. Historia que puede tener diversos cambios en portadas y nombre porque soy...