Parte 2

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la tienda de rosas

¿Flores? No, es muy básico para ella ¿Qué tal los chocolates? No, esta a dieta.

Es el día del amor y de la amistad, no tengo ni la más mínima idea de que regalarle a mi novia, se llama Pepper una chica encantadora de rubios cabellos y ojos lindos.

Es una tienda de variedades para regalar a tu pareja, sé que es una chica distinta y especial, pero aún sabiendo todo esto no puedo encontrar algo lindo para regalarle, ¿Podría llevar toda la tienda? Hay globos, tarjetas, colonias, accesorios personalizadas, bisutería, pero no creo que sea indicado para ella.

No puedo conseguirle un regalo decente a la mujer que se supone que debo amar, pues ella siempre estuvo ahí, es amor ¿No?, huelo los perfumes, abrazo las almohadas pero no encuentro nada especial.


-¿Esta buscando algo en especial? 

-¿Ah?

Al voltearme encuentro al ser más precioso que jamás he visto, es rubio de ojos celestes y tiene una cintura tan delgada que...<<La quiero apretar>>, ¿Por qué pensé eso? ; Tienes unos labios rosados, pequeños pero carnosos...<Quiero morderlos> ¿Qué demonios


-¿Señor?

-Ah, si, quiero algo especial. Para una dama.

-Tenemos ositos, flores, chocolates, joyas...


Me iba poniendo cosa tras cosa en la canasta y yo simplemente me dejaba llevar no quería que dejara de hablar su voz era suave y dulce quería... <<Quería escucharlo gemir>> Ok, eso ya fue demasiado.


-Niño -frunce el ceño -,digo chico.-sonríe.

-Me llamo Steve.

-Steve, busco algo más... Especial.

-¡Oh!,  ¿Entonces no quiere lo de la canasta?


Sus ojitos se pusieron tristes no pude decirle que no.


-No, no por favor, lo de la canasta es excelente Steve, solo que busco algo único sabes una pulsera con un mensaje o algo así.

Pasamos toda la tarde buscando el regalo perfecto hasta que tome confianza con él, decía cosas tiernas y lindas, pensé que por eso trabajaba ahí o que tenía una novia que le decía esas cosas lindas a él, pero me conto que era soltero.


-¡Oye marica! 


uno de los molestos chicos que trabajaba ahí le lanzo un osito de peluche y este reboto en su cabeza, haciendo que una lagrima rodara por su mejilla, no por el golpe, sino por el dolor emocional que le causaba ese sobrenombre, yo sabía lo doloroso que era eso, lo había vivido.


-¿¡Que te pasa imbécil!?, ¿Es acaso que te gusta y por eso lo molestas?

-Tony, déjalo esta bien.

-No, nada de déjalo—habló una cuarta voz. —¡Maldito te he dicho que no te metas con él!


Sale un chico azabache, bastante musculoso a el cual llama "Bucky" mientras ruega que no golpeé al chico que lo insultó, pienso que talvez es su novio...<<No, novio, no es mío>> ya ni me altera mi pensar, solo el hecho de que ese chico en realidad fuera su novio, hasta que el molesto chico vuelve a hablar.

-Sin tu hermano no eres nada, Rogers.

Sale el encargado se hace un escandalo nos lleva a los tres a la trastienda, yo deslizo algunos billetes por debajo de la mesa y el chico rubio sale ileso, mientras que el odioso es despedido.


-Si , esta estará bien.


tenia infinidad de cosas como para regalar a todas y cada una de las mujeres que conocía y aun así elegí como regalo principal para ella una pulsera poco femenina.


-¿Que frase quiere grabar?

-No soy muy bueno con las palabras ¿Puedes elegirlas tú? 

-Esta bien, tiene que ser algo sensible y lindo... Ya sé.


Después de unos minutos viene con la pulsera ahora tiene la frase "tú me diste un hogar" la guardo e intento buscar excusas para estar más tiempo en la tienda, pero es inevitable ya casi son las seis y mi cita me espera.


-¿La tienda estará abierta mañana?

-Espero.


me dedica la última sonrisa y se pierde en el interior de la tienda mientras subo a mi carro.

La hora ha llegado me veo presentable, atractivo en realidad<<cuanto ego Stark>>rio ante ese pensamiento entonces recojo todo lo que he comprado y llevo la pulsera en mi saco seria la cereza del postre, después de los peluches, colonias, joyas y otras cosas le daría eso.

Tenemos una cena encantadora, una velada extraordinaria, bailamos como si fuéramos uno solo, pero no puedo sacármelo de la cabeza.

Llegamos al apartamento me empuja a la cama besa mi cuello, pero... No siento nada, me basta en pensar que la piel de ella es la piel de Steve y me corro, me basta imaginar en sus cabellos, los cuales estuve apunto de tocar y me vuelvo a correr, me basta pensar en él para correrme de nuevo, ella queda satisfecha y duerme abrazada a mi.

No le di la pulsera, quería dársela a él, por eso la guarde en mi saco.

No podía conciliar el sueño, por el irónico pensamiento de que había encontrado al amor mi vida y no era Pepper, lo había encontrado y no era una fémina, lo había encontrado y no quería entregarme a él lo había encontrado el día que se suponía que debía amarla más, lo había encontrado y sabia que ya no lo dejaría irse, lo había encontrado y ahora era mío y de nadie más.

Together.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora