*El dibujo de la portada NO me pertenece, es de ellohsequel en Instagram.
*Editado por mi
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Se vuelven a ver luego de otro año escolar, el último. Pasarán otro verano juntos, que puede ser diferente esta vez?
La universidad está cerca y una curiosa...
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Las fogatas en el cielo seguían brillando.
Sus ojos no se despegaban de ellas. Luca en su mente recordaba cada una de las constelaciones.
Miró al de pecas, que entrecerraba los ojos, en busca de entender aquellas formas que Luca siempre decía amar.
Sonrió, oh como lo amaba.
Se acercó a él un poco más, queriendo crear un vínculo y un contacto.
Una pequeña parte de el quería acercarse más a él, apoyarse en su hombro, agarrarle la mano, mirarlo directo en los ojos, decirle "te amo".
Pero su poca iniciativa le dificultaba las cosas. Tenía miedo. Mucho miedo.
En realidad en el fondo, pensaba que Alberto tal vez también sentía algo por el, sus acciones eran diferentes. Pero, llegó a pensar que el era así con todos.
Y si le confesaba y el no lo quería?
Y si le hacía quedar mal?
Alberto no sería capaz de abandonarlo por un sentimiento natural, seguro que no arruinaría su amistad pero, no quería atreverse a nada hasta que esté 100% seguro.
Esos pensamientos lo hacían temblar. Sus ojos comenzaron a doler y se cristalizaron.
-A-ah!- de repente el moreno habló.
-Que pasó Beto? Estas bien?- dijo preocupado Luca, dándose la vuelta hacia el.
-Estoy bien, solo que sigue quemando. Creo que es hora de ir a casa. Lo siento por arruinar todo otra vez.- se disculpó.
Luca le sonrió con pena. -No te disculpes Beto, mañana será otro día y veremos que hacer si?-
El de pecas se rascó la cabeza y enrojeció por lo cerca que se encontraba el otro.
El menor lo ayudó a levantarse y se dirigieron juntos hasta la Vespa.
Afortunadamente se encontraba intacta. Un poco sucia claro. Habían movido el manubrio para la izquierda antes de frenar, por eso no había chocado.
Luca claramente tendría que conducirla.
-Mira lo único que tienes que hacer es mover el acelerador con tu mano. Te aseguro que es igual que manejar una bicicleta.- Le explicó el más alto.
-De acuerdo.- Después de callar a Bruno en su mente, Luca se subió sobre el vehículo y dejó que también Alberto se subiera, con paciencia ya que se veía que le dolía.
Este se agarró del torso de Luca, apoyó su cabeza de un lado y cerró los ojos, se veía cansado.
Luca se preparó y soltó un suspiro entrecortado. Hizo que el motor sonara y finalmente avanzaron de manera moderada.
Con miedo al principio, los dos chicos se dirigían a casa. Lentamente Luca comenzó a agarrarle el gusto de controlar la Vespa así que aceleró, con cuidado para que Alberto no se preocupe.
