Frío como el hielo.

Capitulo 3

Me encantaba el teléfono nuevo, tenia de todo, Pero lo que más me gustaba era el círculo en el centro. Puse la tarjeta SIM y le di al botón de inicio. Me hice una foto y la puse de fondo de pantalla. -¡Oh, la cámara es muy buena!- pensé y sonreí con orgullo, pero me acorde de Woohyun y de cuando toco mi mano, sentí una punzada de dolor en mi corazón. Aunque yo no sabia mucho sobre el. -¿cómo puede ser alguien tan frío?...nunca lo he visto con nadie, solo con las 2 chicas de aquella vez, ¿es que no tiene amigos?- Me pregunté, aunque dejé todo aquello y preferí dormir para estar mejor al día siguiente.

Ya era miércoles, pero no había vuelto a ver a Woohyun desde aquel día. Seguramente no quería verme, aunque ya no me importaba demasiado porque aquí me odiaban todos.

-Sacar los libros de Inglés- dijo nuestro profesor.

-Dongwoo ¿podría leer el texto en la página 126 en voz alta?- Me dijo el profesor mirándome algo serio pues se dio cuenta de que apenas estaba prestando atención.

Mi corazón dejó de latir y tragué saliva con fuerza, antes de empezar poco a poco. -u ju waent tu me Pikk ju?-

-Humillación Nº 2- pensé

Escuche cómo toda la clase estalló en risas pero la campana sonó de repente y la hora del almuerzo comenzó, todos se iban hacia la cafetería mientras que yo me quedaba atrás, derrotado por la risa ensordecedora aún en mis oídos. ¿Por qué no empezaban ya las vacaciones de invierno?

-¿No vas a comer?- Eso voz apareció de nuevo y me di la vuelta, me sorprendí al oírle decir algo y sobre todo porque yo no lo había visto desde que compré el teléfono. Él estaba de pie en la puerta mirándome con esos ojos sin vida que penetraban en los míos, eso hizo que un escalofrió recorriera mi cuerpo.

-N-no, yo no traje la comida- Le dije.

Era cierto, yo no había traído la comida porque me había levantado tarde y no me había dado tiempo a hacerla, y en la cafetería de la escuela no puedo comer ya que solamente un sándwich costaba 30 000 ₩ y yo no tenía tanto dinero.

Me di cuenta de que Woohyun había entrado a la clase y se había acercado a mi asiento, me miró y dejo una caja encima de mi mesa. -Come esto- se limitó a decir antes de desaparecer tan rápido como apareció.

Abrí el bento, y el olor fresco de Kimbap recién hecho salió. Me apresuré a gritar un "gracias" y confiar en que estaba lo suficientemente cerca como para oír mi agradecimiento. No lo había comido en un tiempo, y tenían un sabor tan delicioso que tenían que ser hechos a mano, pues estos estaban mejor que los de mi madre.

-Me pregunto si su madre los hizo- pensé.

Mire la caja de color negro con un árbol de cerezo pintado en el medio, seguramente era alguna caja de cuando su madre iba a la escuela, mire por último la caja antes de envolverla en un pañuelo.

Se lo tenía que devolver, pero no sabía dónde se encontraba en ese momento, podía estar en cualquier lugar de la escuela, tal vez incluso se fue de la escuela a otra parte. 

~ ~ ~

Estuve mas de 1 hora buscándole pero no le encontré, pregunte a los alumnos de la escuela pero nadie me hacía caso, aunque lo peor había sido cuando Eun Yeol y sus amigos, preguntaron por qué quería saber dónde estaba, así que les enseñe el bento, pero cuando las chicas lo miraron se enfadaron bastante, así que me fui de allí lo más rápido que pude antes de que me asesinaran.

Esperemos que se presente mañana, así se lo podre devolver.

Al día siguiente y después de mucho buscar, lo encontré durante el almuerzo en su salón de clases. Me acerque a él y al ver que deje el bento sobre la mesa se sorprendió.

-Gracias por la comida, sabía muy bien- le di las gracias y el cambio su mirada del bento hacia mí, la oscuridad de sus ojos había disminuido y comenzaron a mostrar un poco de color, me sonrió y me dijo: -Apuesto a que tu madre lo a hecho alguna vez para ti- Asentí sonriendo ya que tenía razón pues mi madre solía hacerme kimpab para el almuerzo. Pero la reacción de Woohyun me dejó un tanto sorprendido. Se levantó de la silla de golpe haciendo que esta cayera al suelo, me volvió a mirar con esos ojos tan negros y misteriosos, Woohyun cogió la caja y se marchó de la clase dejándome allí desconcertado.

-¿Qué ha pasado?- Pensé.