Aquella mañana había sido mucho mejor que las anteriores aunque en clase, me había aburrido demasiado, pero no podía hacer nada, era la aburrida rutina que tenía que tener todos los días. Las horas pasaron demasiado lentas pero cuando fue la hora del almuerzo me levanté deprisa de mi asiento y salí corriendo de la clase. Aquello me ponía feliz pues podía pasar aunque solo fuera un rato con Woohyun, por lo que corrí hasta su clase, pero para mí desgracia él no estaba allí.
Algo decaído fui a almorzar solo y regresé a mi aula para seguir con aquellas clases aburridas esperando a que terminasen de una vez. Y la hora de literatura llegó, escuchando como la profesora me preguntaba a mi directamente si había estudiado, a lo que respondí con un ‘’Si’’ aunque había mentido.
La profesora mandó a una compañera a leer el texto que tocaba. Aquel, trataba sobre dos amantes que no podían estar juntos debido a sus diferentes clases sociales. Pero aunque sus padres estaban en contra aquellos no se separaron. El final fue muy triste, pero me puse a hacer las actividades que la profesora mandó relacionadas con el texto aquel.
En otro de los descansos que hubo, unos chicos me llamaron para que saliera con ellos de la clase, y aunque me parecía muy raro, lo hice. -¿Y bien? ¿Qué quieren?.- Pregunté mirándolos a todos. –Cállate.- Espetó uno de golpe, aquel, agarró mi brazo con fuerza y me arrastró junto a los demás hacia una habitación pequeña y algo oscura en donde me metieron y ellos conmigo. –Deja de perseguir a Woohyun.- gruño uno de los chicos y me dio un puñetazo en la cara, dolió, pero lo aguanté, reprimiendo un quejido que quiso salir de entre mis labios. Aquellos comenzaron a registrarme y me quitaron las cosas que en aquel momento llevaba encima, cogiendo mi teléfono. -“Oh, así que tu puedes permitirte el lujo de tener este tipo de teléfono móvil- sonrió, pero su sonrisa se desvaneció muy pronto ya que vio una imagen mía y de Woohyun que nos habíamos hecho tiempo atrás. –Tú…Me pregunto si podrás permitirte el lujo de comprar uno nuevo- dijo sonriendo y luego rompió el teléfono, tiró aquel al suelo con bastante fuerza, dejando así la pantalla completamente estallada. El estruendo que se escuchó al chocar el teléfono con el suelo resonó en mis oídos, junto con las risas de aquel chico y sus amigos. -Buena suerte con la compra de un teléfono nuevo- Dijo antes de salir de aquel cuarto y desaparecer junto a los demás.
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Después de clases, terminé en la tienda en donde lo había comprado, donde Woohyun trabajaba. Esperaba a que el no estuviera allí y que no empezase a hacerme preguntas. Miré a todos lados sin verlo y suspiré aliviado, por lo que me acerqué a la caja y pregunté si aquel teléfono tenia algún tipo de seguro pues hacia muy poco que lo había comprado.
-Vamos a ver si hay alguna garantía- dijo y luego me pidió mi nombre completo, el que escribió después en el ordenador. -Lo siento chico, pero no tiene una garantía para ese teléfono. ¿Cómo es que se le rompió?- -Uno de mi instituto lo hizo.- Suspiré y me sentí mal y con una rabia por dentro que me consumía, aunque no podía hacer mucho pues tampoco quería terminar metiéndome en líos si buscaba a aquellos que me habían hecho eso para que no me expulsaran. -“Oh, vaya, lo siento, pero no le puedo dar ninguno nuevo.- se disculpó y bajé mi cabeza para coger el teléfono y dejar aquella tienda. Regresando a casa para poder ponerme algo de hielo en la zona donde me habían dado aquel puñetazo.
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Frío como el hielo.
FanfictionMi llegada a aquella escuela de ricos no había sido lo mejor, pero debía hacerlo si quería matricularme y tener un acceso a la universidad y ahora que había conseguido la beca para poder estudiar allí la aprovecharía. Pero todo lo que he vivido des...