Dimensiones

Partida

Cuatro meses después.

—Muy bien escuadrón, ya es hora de partir. Estos últimos meses a pesar de las dificultades lograron completar todo su entrenamiento y por eso hoy es el día en el que ustedes saltaran a las dimensiones —hablo el científico Freeman mientras ajustaba sus lentes—, repasaremos otra ves el plan por si no ha quedado claro aún.

Todos estábamos en las nuevas instalaciones, el escuadrón estaba en fila—a mi lado tenía a Tina y al otro a Eric— con las manos atrás de la espalda viendo la máquina que nos permitirá saltar entre dimensiones.

—No es una misión fácil, aunque lo parezca pero lo resumiré en tres difíciles pasos —elevo su mano formando un uno con su dedo—, saltar las dimensiones a pesar de cualquier dificultad que encuentren, su meta: no morir tan pronto —elevo otro dedo—. Tendrán que informar todo lo visto en el camino a su destino —elevo otro dedo—. Y por último llegar a la última dimensión y acabar con el portal que encerrará a los Cryomantes una vez por todas. ¿Entendido?

Todos asentimos a la vez.

—Bueno, ya con esto resumido procederé a dejarle sus pulseras ETD01 para que puedan abrir portales. Recuerden como se hace: Si abren el portal a las 14:00 horas deben abrir todos los portales a esa hora sin tardar o si no se quedarán atrás. Los portales creados son muy exigentes con sus normas. —varios científicos nos entregan las pulseras, yo la miro, esta hecha con un metal y una fina pantalla no más ancha que el tamaño de mi dedo se enciende mostrando la hora programada para abrir el portal con su botón digital.

Todos se la colocan al mismo tiempo y miramos al frente, la hora en el reloj marca las 12:30pm y nosotros nos iremos a las 13:00pm.

Mire todo a mi alrededor. No hay garantía de que volvamos con vida de esta misión.

La Comandante Black hace acto de presencia con su elegante traje y su cabello rubio recogido en una colega alta. Se posiciona al lado del científico y nos mira a todos rápidamente.

—Nunca he sido buena con las despedidas, o bueno, en situaciones tristes en general y está puede ser la última vez que los vea vivos frente a mi. Diré todo con precisión, gracias por su servicio y gracias por poner sus vidas en riesgo ante que la humanidad entera, son los primeros en hacer está misión y por lo mismo muchas fallas pueden interponerse en el camino pero tenemos la certeza de que podrán lograr salir de esta y volver a casa —La Comandante aplaudió y todos lo hicimos a su par—. Sin más que decir los dejaré estos últimos minutos para que hagan una llamada a sus familiares, por si es la última vez que los escuchan.

Todos se dispersaron y Tina se quedó a mi lado.

—¿Estás nerviosa? —preguntó.

—No, si con esto podemos asegurar el futuro para las próximas generaciones es un sacrificio que no será en vano. Pero no pretendo morir, tengo una promesa que cumplir.