Traicionera

No te creo nada

— Cloe, puedo explicarlo.

— ¿Explicar? Oh no, aquí no hay nada que explicar.

Cloe me sujetó de la mano con fuerza y me sacó de allí a rastras hacia la limo.

— No puedo creer ésto, es rídiculo, completamente ridículo.

— Es que no lo entiendo.

— ¡Pues claro que no lo entiendes, Zoe! Llegas creyéndote la dueña de todo, te llevas a mis amigos, el amor de mamá – La voz se le quebraba.

— Cloe ¿Estás llorando?

— No... Solo se me metió algo al ojo.

¿Por qué Cloe no quiere que esté con Luka? Mamá dice que es por su clase social, pero... Cloe quizá reacciona así poque está celosa ¿Por qué siente que estoy quitandole algo?

— No tienes idea de lo que es ser reemplazada.

— Lo dices por Vaspe-

— ¡No digas su nombre!... Mi estatus de super heroína era lo único que me quedaba.

— No tenía idea.

— Pues claro que no, no sabes nada.

El sielencio nos invadió, como un muros espeso. Me puse a pensar en cómo se sentía Cloe realmente.

— Ser una héroe te gustaba ¿Verdad?

Cloe ni me miró, sólo consentró la mirada en el camino, sentada junto a la ventana.

Mamá volvió a regañarnos por pelear, a mí peor por hablarle a Luka, hasta que...

— ¿Dices que ese chico es hijo de un músico famoso? – Preguntó mamá – ¡Que maravilla! Cloe, no quiero que vuelvas a molestar a tu hermana.

— ¡Pero mamá!

— Sin peros, jovencita. Lamento que Cloe te halla hecho pasar por todo ésto, ella no es nada ecepcional.

El teléfono de mamá vibró y se fue para atender el llamado del trabajo.

Cloe empezó a sollosar.

— Incluso ocacioné algunas akumatizaciones para que me llamace.