Traicionera

No debíste

Marinette

Hoy en la escuela sucedió algo muy prculiar.

— ¡Hola, Mari!

Cloe se me acercó muy felíz con su mano muy en alto agitandola de un lado al otro, es como si me estuviese saludando. Espera... Me está saludando.

—¿Cómo está mi Mari favorita en el mundo?

— Hola Cloe, está diferente.

— ¡Lo notáste! Y bien.

— El cabello suelto te queda bien.

— Lo sé ¡Ja!

¿Habrá sido víctima de una akumatización? De la nada me habla como si fuesemos amigas de siempre.

— ¿Qué necesitas?

— ¿No puedo venír y saludar a mis amigos de vez en cuando? Que desconfiada eres.

Alya solo estaba ahí voqueabierta, creo que la Cloe buena la dejó más atónita que yo.

— Hola, Alya – Apenas se percató de su precencia.

Cloe se fue conrriendo a saludar a otros de nuestros compañeros, hasta la vi dar enérgicos apretones de mano.

— ¿Acabas de ver eso? – Dijo Alya saliendo del tranced – Sin duda está bajo los efectos de un akumatizado.

— No saquemos concluciones apresuradas, tal vez Cloe en serio quiere ser una mejor persona.

— ¿Segura?

— ¿Vieron lo que le pasó a Cloe? – Dijo Adrien.

— ¿Qué mosco le picó? – Dijo Nino.

Todos miraban a Cloe extrañados, no solo hablo de Alya, los chicos y yo, hasta lo maestros estaban estupefactos.

(•••)

Estaba en los casilleros cuando se me acerca Cloe.

— ¡Hola Mari!

— Ho-hola, Cloe.

— ¿Quieres que no vayamos a casa juntas hoy?

— ¿Juntas?

— Sí, puedo dejarte en tu casa.

— Es que tengo la motoneta estacionada.

No hay entregas hoy, así que mis padres me permitieron usarla por ésta vez.

— Oh, entiendo – Se veía desilucionada – Será la próxma entonces.

Volvió a sonreír como si nada, espero no haberle dado la idea de que no quiero irme con ella, creí que ya se había ido, pero...

— De casualidad, Marinette... No sabes dónde está Zoe

Sabía que a Cloe no le gustaba que Zoe se juntase con Luka, pero también que ellos dos estaban juntos en los helados.

— Ha de estar por ahí, quizá se fue más temprano–.

— Olvídalo, Marinette, ya sé dónde está.