ꜱᴏᴍᴇᴛɪᴍᴇꜱ | ᴊᴊ ᴍᴀʏʙᴀɴᴋ

Capítulo 2 ☀

Amy:

Al despertar me doy cuenta que aún traigo la polera de JJ, huele a perfume de hombre con cigarro.

Me levanto y me doy una ducha, una vez que estoy vestida decido bajar por el desayuno. Ha papá no lo he visto desde que llegue porque lo he estado evitando. Al llegar al jardín me replanteo la idea de comer algo. 

Sarah, Topper, Kelce y Rafe están sentados charlando animadamente. En cuanto mi hermano me ve se forma una sonrisa genuina en su rostro, me siendo junto a él luego de darle un abrazo.

—Buenos días, chicos —sonrío antes de tomar un poco de jugo—. ¿De que hablan?

—De que Agatha es una perra —enfatiza mi hermano antes de colocarse las gafas de sol.

—Sí que lo es —concuerda el moreno.

—Lo que paso en la fiesta sigue en mi cabeza —suspira Topper—. Era una maldita arma y me apunto en la cabeza.

—Es una locura —habla Kelce.

—El chico esta desquiciado —Sarah frunce el ceño—. Podría haber herido a alguien.

—Es un Pogue —el tono del moreno esta cargado de desprecio.

Y tu eres un Kook que se cree mejor que todos solo por tener una suma de dinero en tu cuenta bancaria que ni siquiera es tuya porque todo te lo dan mami y papi, quiero decirle eso pero prefiero morderme la lengua esta vez.

—Malditos Pogues —asiente mi hermano.

Hablando claro, fue Topper quien inicio la pelea. Si tan solo lo hubiera dejado estar nada de esto habría pasado. Pero JJ no debió sacar un arma y apuntarlo, esto me lleva a preguntarme de donde la saco, ¿tendrá que ver con lo que descubrimos ayer? Una sonrisa se forma en mi rostro sin que pueda retenerla al recordar lo que sucedido, fue un día divertido.

—Tal vez deberías conseguirte un arma —sugiere Rafe, lo miro mal—. Ya sabes lo que dicen, hermanita. Combatir fuego con fuego.

—Y ahora habrá una era de terror de en la isla —ironiza Sarah.

—Tengo todo bajo control, chicos —Topper bebe de su café—. Me vengaré de él, solo estoy tramando un plan.

—Sí, deberías —Rafe come una tostada—. Ya te lo había dicho, JJ terminará como su padre.

—¿Pueden dejar de hablar de las personas? —interfiero, siento la necesidad de defenderlo—. No es mal chico.

—Es violento, drogadicto y ladrón —dice Topper con desprecio—. No me sorprendería verlo tras rejas algún día.

—No hables así de él —le regaño—. Es... es mi amigo.

Técnicamente no somos amigos, pero creo que nos llevamos un poco mejor que cuando nos conocimos.

—Deberías buscar amigos de tu altura —comenta Kelce.

—No me digas lo que me conviene, Kelce.

En eso volteo y veo a una niña de unos seis años muy cerca del muelle. Le comienzo a llamar ya que se puede caer, al llegar me comenta que perdió su peluche allí. Decido ayudarla, prefiero lastimarme yo a que se lastime ella.

—¡Amelia, vuelve aquí! —escucho la voz de Sarah—. ¡Es peligroso!

Llegamos al muelle y veo el barco a un lado. Según lo que la niña me dijo su peluche está allí. Puedo sentir las miradas de reproche de los chicos, las ignoro.

—Puedes darme una descripción de él

—Tiene una trompa y orejitas azules —responde con voz infantil.