Kintsukuroi

Rusalka

Es una de los "Pilares de los Nombrados" junto con Hypocris y Slander, existe antes de que el tiempo se cuente como un "cuando". Los tres son enemigos entre si, pero se juntan para establecer las "reglas" de los saltadores y ayudar a sus favoritos.

Son seres muy mezquinos por naturaleza, profesar buscar la unidad pero jamás hacen nada por ella...Rusalka es solo... la menos cruel. Puso la mirada en Jorah desde el día de su primer salto y siempre se le aparece en sueños que él jamás quiere tener, ella lo nombro: Evander.

Es gigante, como de cinco metros de altura, tiene forma femenina y se cubre con una capa gruesa hecha de flores rojo escarlata, su piel es blanca y su cabello negro, sus rasgos son muy hermosos y esconde una cicatriz en su abdomen del cual sale una incesante columna de humo blanco y gris.

Avisa de su llegada con un suave sonido de música, a menos que no quiera avisar... llega y en cuanto un pobre saltador que no este entre sus escogidos la vea, sea transformado en una rosa roja escarlata.

Si, otra rosa mas que adorne su capa.

- Evander... ¿Qué es esa espada que traes contigo?

Jorah, que aunque se había quitado el vendaje de los ojos no se atrevía a abrirlos, se cubría los ojos con la parte interna de su codo derecho.

- es... es uno de mis tesoros, tu dijiste que podía tomar cuanto quisiese!! 

- mírame Evander, mírame.

Entonces Jorah quitó el brazo con el que cubría su rostro y continuaba mirando al piso, en ese momento se dio cuenta que las hojas arrancadas de los libros ya no estaban y el aun así no le había pasado nada. 

Se dice que si uno de los "Pilares de los Nombrados" se acerca a un saltador y este no ha formado un circulo de papel a su rededor, entonces muere retorciéndose, mientras se le quiebra cada uno de sus huesos.

Jorah abre los ojos lentamente, y mientras su vista empieza ver a Rusalka, solo sus vestiduras, pues no se atreve a mirarla a la cara.

- Evander, mírame, si quisiera, ya estarías muerto.

Al mirarla vio por primera vez sus hermosas facciones, sus penetrantes ojos negros, como el Averno. 

Entonces sintió un golpe de "verdad"... si, ese golpe curioso que aparece cuando alguien te dice que lo que debía pasar, no paso... despierta!

- ¿cumplirás con tu propósito?

- no frente a los humanos...

- no hace falta... pero verán la guerra al final de sus días.

- aun así, no quiero que mas gente muera... pero antes, dime: ¿Quién fui?

- eres Evander, y desde hoy tendrás el poder de los clérigos en tu mano derecha.

Mientras Rusalka lo decía, la mano derecha de Jorah empezó a humear, en la cara interna de su antebrazo, tres letras en un idioma desconocido aparecieron mientras Jorah miraba atónito lo que pasaba.

- recuerda, no eres un clérigo, ellos son una manada de carniceros ciegos, eres mi Evander, ve al cuando de Nigeria del 295, allí encontraras a Ode, un Nok, el te llevara al desierto, para ver a Rhadamanthus, antes que se pierda en el tiempo.

- por que no voy directamente a ver ese tal Rhadamanthus, solo dime donde esta.

- solo los Nok pueden encontrarlo... ahora ve!!