Corazón encadenado | Tokyo Revengers | MikeyxOc

Prisionera

Han pasado cuatro años, su vida había sido un verdadero infierno todos los días. A pesar de mejorar económicamente, ella seguía trabajando. Actualmente Midori tenía diecisiete años de edad y Kyoko siete.

Ahora que estaba más grande su rutina había cambiando un poco, debido a que Kyoko le empezó a gustar del dibujo, su hermana la inscribió en clases por la tarde en lo que ella trabajaba. No quería dejarla mucho tiempo sola en casa con temor a que Haru le hiciera algo malo.

Este era su último año de escuela. No tenía muchas metas salvo trabajar tiempo completo para ganar más dinero y llevarse a su hermana pequeña de esa casa.

Tomo asiento al entrar en el salón y se recargo en la mesa cerrando sus ojos. Nuevamente estaba cansada.

– Buenos días Mimi – escuchó la voz de una chica quien se sentaba a su lado – ¿Otra vez te dormiste tarde? Si sigues así puedes enfermar.

– Buenos días Hina – se endereza para soltar un bostezo – tuve mucho trabajo y se me juntaron las tareas.

Ese año tuvo la oportunidad de conocer a una chica, su nombre era Hinata Tachibana, . Al principio la ignoraba, no deseaba tener otra amistad y que por los celos de Haru tuviera que repetir la misma historia.

Aún así la peli rosa no dejo de insistir hasta que se volvieron muy buenas amigas. Conoció a su hermanita y escucho que le decía Mimi de cariño, desde ese día también la llamo así.

Claro que Midori nunca le contó por completo de su pasado. Eso era algo que no deseaba contarle a alguien más.

– Eres admirable, desearía ser fuerte como tú. Pero si necesitas ayuda sabes que puedes decirme – siempre lo decía pero nunca aceptaba –

– Claro. Mejor cambiemos de tema  ¿Que tal las cosas con tu novio? – sabía que su amiga tenía novio desde hace un tiempo pero aún no se lo presentaba. Estuvieron juntos en secundaria pero al terminar quedaron en escuelas diferentes –

– Todo bien. Él y sus amigos me organizarán una fiesta por mi cumpleaños – toma las manos de la peli negra mirándola fijamente – será un fin de semana, por favor dime qué vendrás.

– Tendré que pensarlo. No puedo dejar a Kyoko sola en casa, pero si veo quien la puede cuidar entonces iré.

– ¡Muchas gracias! Eres de mis pocas amigas. No tienes que darme nada, solo quiero que lo pasemos bien juntas.

En realidad no sabía mucho de Hinata, solo que tenía su misma edad, al parecer un hermano menor y un novio llamado Takemichi Hanagaki.

Al entrar el profesor dejaron su plática para prestar atención a la clase y seguir con su día. Aunque para ser sinceros ella odiaba los lunes.

Los fines de semana trabajaba por la mañana haciendo que los lunes fuera su día de descanso. Y coincidía con el de Haru.

Al terminar se despidió de Hina rápidamente, tenía una cita con su novio. No sentía celos pero si estaba feliz por ella. A veces se preguntaba, sí las cosas fueran de diferentes manera ¿Ahora mismo sería novia de Mikey?. Lo extrañaba, no había día que no pensara en él.

Camino hasta la escuela de su hermana quien la esperaba en la entrada.

– ¡Mimi! La maestra me felicitó por mi trabajo, mira – decía la pequeña mostrándole la libreta –

– Pues claro, te quedó precioso. Tenemos que celebrarlo ¿Vamos por un helado? Aún tenemos tiempo – siempre que podía la llevaba. Le gustaba consentirla de esa manera –

– ¡Si! Quiero uno de fresa ¿Se puede, Mimi ? – toma la mano de su hermana para empezar a caminar –

– Del sabor que desees Kyoko – eran estos momentos que más apreciaba. Ver feliz a su hermanita –