Cortos Lemon Heteros.

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Estada un poco aburrido y seco perdiendo el tiempo entre no poder avanzar los otros capítulos... Y pues... Preparados... 

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Los ojos del toro miraban llenos de deseo a la mujer a su lado. Sus caberas se restregaban con los del otro, Shaina gemía con la cara pegada al pecho de Alde, mientras este la sostenía de la cintura, era tan grande que sentía como sus piernas se empezaban a entumecer a cada envestida que el toro le daba.

Hay escondidos en el templo del toro, tras uno de los pilares mas al fondo del templo, las armaduras estaban totalmente en el suelo, la ropa desgarrada, y sus cuerpos pegados en deseo, apoyado el toro de esa pared con la Saint en su pecho rasguñado.

Ninguno decía nada, en uno momento sus pechos cansados buscaban respirar, acariciándose de forma discreta, abrazados de forma tranquila, sintiendo muchas sensaciones que rayan en lo mas placentero. Hasta el momento que el toro se levanto dejando a la Saint Femenina contra la pared, no sin antes besar por un momento su frente, sujetándola de las piernas mientras se inclinada a besar sus labios, siendo mordidos por ella sujetándolo del rostro atrapada entre la pared y su musculoso cuerpo, una experiencia que de verdad disfrutada, algo que le encantada, sintiendo su respiración cada momento más fuerte, mientras esto se prolongada, dejando los cuerpos de los sudorosos y cálidos contra el otro.

Separándose al momento de respirar antes de que un grandioso orgasmo llenara sus piernas.

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Hasgard suspirada en voz ronco, sintiendo la lengua y el cuerpo de Violatte restregándose en su miembro, pasando a su pecho mientras le acariciada y su otro compañero en esa noche se acombada mejor, acariciando el cuerpo de la mujer por la espalda hasta más abajo debido a ser esta vez un acto de 3.

Contoneándose contra el cuerpo del toro, la mujer se enredado entre sus abrazos, besando sus labios con fuerza, sintiendo su pierna izquierda levantada para el toro penetrarlo, y seguido Ilias hizo lo mismo, pegando su espalda a su pecho para entrar.

Las manos de el toro acariciaban su trasero y su piernas mientras esta era alzada, mientras el león le acariciada uno de los pechos y por debajo de la cintura, acariciando ese punto que lo hizo suspirar, sin separarse de los labios Hasgard. Ilias se conformada por apartar su cabello y besarle el cuello a la mujer, sintiendo como las paredes de sus entrañas lo abrazaban, sobresaltándose pero aceptando cuando Violatte le rodo un fuerte beso en los labios, sonriendo con coquetería para volver con el toro.

Los miembros viriles de ambos hombres se restregaban con total descaro gozando su sexo a ritmos diferentes, pero la que mas disfrutada era ella. Si bien duro lo que ella esperara, su orgasmo no tardo, apretando de tan forma los miembros de ambos santo de oro que no tardaron en liberar sus descargas de Semen a la par manchando las piernas de los 3, quedando en esa posición unos momentos antes de separarse.

Dentro de unos momento de descanso prologando fue lo mismo, retomando su acto pero esta vez con Ilias y Hasgard cambiando de lugar.

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Para Harbinger verse en esa situación fue la descargada a adrenalina mas grande en su cuerpo. Puede que no puede romperle los huesos a alguien pero esto lo disfrutaría. Las uñas de la general PallaSaint se entierran en su brazo a la vez que sus dedos se movían con descaro dentro de ella, retándolo.

El toro no esperada que fuera tan descarada y pervertida, aunque sabía que si estada medio loca. Pero sin problemas acepto, sus armaduras estaban quebradas, por la pelea, según las palabras de esta psicópata esto era reconocer toda su fuerza... Estada loca, pero no le importada, no estaba seguro de querer rechazar eso, sea por morbo y el creciente ego que tenía cuando le dijo eso.

De un momento a otro, quedaron en otra posición, Harbinger sostenía con fuerza a Galia, restregando su miembro en ella hasta entrar, penetrando de forma rápida y estrepitosa en una sección de lo que parecía puro sexo duro, alzando su cabera y por coincidente terminara apoyada a duras penas de los brazos con su cabeza en el suelo.

Aun con eso Galia lo logro tomar desprevenido y dejarlo a él en el suelo mientras tomada en bando, no fue mucho, ya que el toro la levanto para ponerla contra la pared, y queriendo que su grueso miembro entrara de forma más profunda. Este acto casi parecía una pelea entre los 2, pues con solo verse se desafiaban, queriendo llevarse al límite, olivando toda la pelea entre dioses, y la existencia de sus campaneros, Athena, Pallas y Saturno.

El miembro erecto del toro empezó a salir completamente y de un fuerte golpe entrar, siguiendo ese patrón por el resto del acto, sacándole verdaderos gritos a la general PallaSaint.

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