Mi Sexy Profesor de Academia.

Capitulo 25

Salgo de la academia y una vez estoy fuera busco a mi hermano con la mirada, esta mañana me había mandado un mensaje de que pasaría a recogerme por lo que supuse que no tardaría en llegar.

Y estaba en lo cierto.

No tardo en divisar su coche, a medida que me voy acercando me percato de que el que conduce no es Miranda, por lo que achino los ojos sin dejar de dirigirme hacia él y me doy cuenta de que es Mark.

-¡Laila espera!- La voz de Peter inunda mis oídos.

Me paralizo durante un segundo, sin embargo lo ignoro y continúo mi camino hacia el coche dando largas zancadas.

No te bajes, no te bajes..

Pero mis súplicas son en vano, veo a Mark bajarse del coche y cuando llego a su lado para rodear el coche su mano coge mi cintura y me acerca a él con brusquedad.

-¿No ibas a saludarme?- Pregunta con una sonrisa en la cara y miro de reojo a Peter que sigue acercándose a nosotros.

-Yo..- Intento hablar pero me interrumpe dándome un beso en la comisura de mis labios.

Sin pensarlo dos veces le suelto un bofetón en la cara alejándolo de mi.

-¿Que demonios haces Mark?- Le pregunto incrédula.

En todo el tiempo que llevamos conociéndonos nunca había echo algo así, ni había mostrado el mínimo interés en mi, ni en tener una relación mas cercana que no fuese una puñetera amistad.

 ¿Y de repente le da la jodida venada de besarme delante de Peter?

¡Mierda Peter!

 Cuando dirijo mi mirada en su dirección siento autentico pánico, su mirada rebosa ira y va directo hacia Mark.

Esto no va a acabar bien.

No me da tiempo a reaccionar cuando veo que Peter lo golpea en la cara haciendo que este se tambalee y su espalda choque contra el coche.

-¿De que vas gilipollas?- Le pregunta Peter cogiéndolo del cuello de la camisa.

-Oh perdona tío no te había visto.- Responde Mark con una sonrisa arrogante en sus labios.

-Pero si ha salido vacilón el subnormal.- Declara con una risa amarga y lo golpea de nuevo, esta vez en la boca del estómago.

Mark ahoga un grito y yo cojo a Peter del brazo para intentar alejarlo de él, Mark es un cretino y lo provocará hasta que lo mate.

-¡Para! No merece la pena.- Le aseguro llamando su atención y girando su rostro obligándolo a mirarme.- Vámonos..- Le pido tirando de él en la dirección de la que veníamos.

Consigo que de unos pasos cuando Mark vuelve a abrir su bocaza.

-¿A donde vas Laila? Tengo que llevarte a casa.- Dice intentando cogerme del brazo a lo que Peter interviene cogiendo su mano y retorciéndola.

-Ella no va a ningún lado contigo.- Le advierte aplicando mas fuerza hasta que un crujido y un grito le indicó que le había roto la muñeca.- Espero que esto te sirva de lección cabronazo.- Dijo soltando su mano y dejándolo caer de culo en el suelo.

Peter cogió mi mano y nos alejamos de él. Caminamos en completo silencio hasta que llegamos a su coche.

-Sube, te llevo a casa.- Dice y yo asiento.

Rodeo el coche para dirigirme al asiento del copiloto pero freno en seco, me doy la vuelta y vuelvo a su lado bajo su atenta mirada. 

-Lo siento.- Me disculpo.- Yo no sabía que él vendría.

-¿A que te refieres?- Pregunta.- ¿No le pediste que viniera a por ti?

-¿Que? ¡No! ¿Por qué lo dices?

-Por nada..- Responde apartando la mirada y abriendo la puerta del piloto.- Sube al coche.

Sin embargo no le hago caso, él me observa por unos segundos y al ver que no tengo intenciones de subirme al coche se acerca a mi, pero yo retrocedo cuando me doy cuenta de por donde van los tiros y no puedo evitar soltar una carcajada amarga.

-¿Pensabas que lo había llamado para darte celos?- Le pregunto incrédula y al ver que no dice nada obtengo la respuesta.- Por favor Peter, ¿Ahora que voy dando bofetones de saludo a la gente?

-No lo se Laila, no se porque pensé eso.- Dice con frustración revolviéndose el pelo.- Supongo que...

-Lo de la fiesta.- Le interrumpo y él asiente con la cabeza.- Aquello fue una venganza por tontear con tus otras alumnas delante mío.- Añado quedándome tan pancha.- No tiene nada que ver con esto.

-Entonces ¿Qué cojones hacia él aquí?

-No lo se, era mi hermano el que tenia que venir a por mi no él, mira.- Le digo enseñándole el mensaje.- Es más, Mark estaba usando el coche de Miranda.

Ambos nos miramos confundidos y yo doy un largo suspiro.

-Sea lo que sea ya da igual.- Concluyo.- Llévame a casa.

Él asintió en silencio y nos metimos en el coche, no tardamos en llegar, aparcó frente a mi casa y cuando iba a bajarme del coche su mano cogió mi cuello obligándome a acercarme a él hasta que nuestros labios quedaron a escasos centímetros.

-¿Pensabas irte sin despedirte?- Susurró contra mis labios y sentí como cada centímetro de mi piel se erizaba.

-Yo..

No me dejó articular palabra ya que eliminó esos centímetros de distancia y juntó sus labios con los mios. El beso fue corto, pero intenso.

-Que sea la ultima vez que intentas irte sin despedirte, Venet.- Concluyó remarcando mi apellido con una sonrisa de superioridad.

-Que te den Peter.- Le espeté y salí del coche.

Cuando lo escuché arrancar no pude evitar sonreír, es un capullo, pero me tiene jodidamente loca.