嚣张
Xiao zhang
Unbridled
Sinopsis:
Lin Wuyu es el dios académico de su escuela secundaria: tranquilo, confiado y siempre capaz de obtener el primer lugar sin esfuerzo. Ding Ji hace alarde de su excelente memoria y se especializa en el arte de engañar...
Ding Ji todavía se sentía un poco conmovido por su lógica, como si se estuviera aprovechando de él.
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Aunque la suposición de Ding Ji fue lo suficientemente precisa como para lograr que su corazón saltara, Lin Wuyu aún así insistió: —¿No puedes calcularlo?
—¿No me preguntarás cómo pude adivinarlo? —Ding Ji lo miró. Después de esperar un rato, Lin Wuyu no dijo ninguna palabra y él se rió nuevamente: —Está bien, haré los cálculos.
Luego fue a la caja registradora a pedir un lápiz y un papel.
—...La forma en cómo calculas —Lin Wuyu lo miró— ¿Es alguna clase de fórmula? ¿necesitas un lápiz y un papel?
—No me molestes —dijo Ding Ji.
—Oh —respondió Lin Wuyu, tomando una pequeña galleta y comiéndola lentamente.
Ding Ji comenzó a dibujar en el papel. Después de que Lin Wuyu lo miró dos veces, pudo ver que el dibujo se trataba del diagrama de buguo. No sabía que tipo de hexagrama estaba dibujando específicamente, por lo que sintió que podía ser engañado en cualquier momento por Ding Ji.
—Mi abuela solo cierra sus ojos y cuenta con sus dedos. Pero yo no tengo mucha experiencia, así que tengo que escribirlo en un borrador —Ding Ji dejó de dibujar por un momento. Miró el papel por otro momento más y luego levantó la cabeza.
Lin Wuyu se llevó a la boca las galletas, algo expectante: —¿Ya lo calculaste?
—Mm —Ding Ji asintió. Arrugó el papel en una bola y lo tiró al basurero que estaba cerca de él.
—¿A qué vine aquí? —preguntó Lin Wuyu.
—A buscar a alguien —dijo Ding Ji
Lin Wuyu no dijo ninguna palabra. Solo tomó la taza de té con leche y bebió un par de sorbos, antes de comenzar a reír.
No pudo dejar de reír.
—Me pediste que hiciera los cálculos —Ding Ji se reclinó en la silla y se cruzó de brazos— no que te contara algo gracioso.
—Bien, bien —Lin Wuyu sonrió y se aclaró la garganta— ¿Qué más pudiste adivinar?
—Esta persona tiene 95 años, ¿no? —dijo Ding Ji —no estoy seguro de todo lo demás. Solo estoy seguro de eso después de que dijiste ese número.
—¿De verdad? —Lin Wuyu lo pensó por un momento— Originalmente quería decir 1995, pero era tan obvio que lo cambie a 95.
—Es por esa razón, que dudaste por un segundo que el resultado fue cero, cero, cero, cero, cero, cero... —Ding Ji giró el bolígrafo en su mano— Es lo más obvio.
