Capítulo 19

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Después de todo, a Lin Wuyu le gustaba los hombres y él era un hombre heterosexual. 

Cuando Lin Wuyu regresó al dormitorio, no había nadie ahí

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Cuando Lin Wuyu regresó al dormitorio, no había nadie ahí. Estimando el tiempo, en este momento todos deberían estar en la cafetería o en el salón de clases.

Se quitó la pequeña gasa del rostro y se miró en el espejo. Sobre la herida ya se habían formado las costras y se veía bien, no daba miedo. 

Su teléfono vibró.

Ding Ji le envió un mensaje. 

- Ve al hospital o a la enfermería por tu herida y evita el agua cuando te laves la cara.

- ¿Cómo quieres que me lave? ¿Con una toalla seca? 

- ¿Tu coeficiente intelectual también puede ser digno de llamarse dios del estudio? 

Lin Wuyu se rió y fue al baño, necesitaba ducharse.

Sin embargo, para ser digno del titulo de "Dios del estudio", primero abrió el grifo y se enjuagó la boca. Sumergió una toalla en agua y limpió alrededor de la herida, para luego lavarse el rostro a medias.

Después de bañarse, le envió un mensaje a Chen Mang pidiéndole que le llevara algo de comer al salón de clases. 

Hambriento.

Muy hambriento.

Pero primero tiene que ir a la enfermería.  

Por lo general, Lin Wuyu no sería tan cuidadoso. Pero ahora, va a tomar el examen de ingreso a la universidad, sería problemático tener una infección o algún otro dilema. 

Dentro de estos tres años en Fuzhong, Lin Wuyu ha ido a la enfermería dos veces en total. Una vez fue cuando Xu Tianbo se torció el tobillo mientras jugaban juntos, y la otra cuando Chen Mang se dio un golpe en el ojo debido a sus dudosas habilidades con la escoba. 

Hoy era la primera vez que entraba a la enfermería por cuenta propia.

Desde que conoció a Ding Ji, su vida comenzó correr en una dirección en verdad muy asombrosa.

Adivinación, recoger a un niño, ser abrazado mientras lo llaman "papá", ser insultado durante cien metros, colocarse en cuclillas a un lado del macizo de flores mientras comía barbacoa, perseguido por un grupo de alborotadores, ser golpeado y dormir en la sala de registro de un hospital...

La doctora de la escuela que estaba de turno, se llamaba Tao Rui. Aunque no venía muy a menudo, sabía su nombre.

—¿Cómo te lastimaste? —Tao Rui lo conocía y se sorprendió al verlo. 

—Fue un roce, por la parte delantera de un palo —dijo Lin Wuyu— sucedió anoche. 

—¿Actuando por la justicia? —Tao Rui revisó su herida. 

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