En el centro de Japón, donde la mafia Yakuza prevalecía. Un joven líder añoraba tener otro hijo, pero no sería posible, ya que su esposa no podía concederle otro hijo.
Con profunda tristeza, acordaron en adoptar un niño que les diera luz a sus vidas...
en mis pensamientos solo esta, el odio incomprensible hacia ti.
vagaba en mis recuerdos de la niñez, cuando una azafata me hablo, diciendo si quería algo de tomar, asentí con mi cabeza.
no quería volver a Japón, mis razones tendré; una de ellas seria mi padre, él siempre quiere que sea y me comporte como un líder, y mi madre es otro cuento.
durante mi estadía en Inglaterra aprendí muchas cosas, hice muchos amigos muy importantes para mi, elles tienen cualidades que los hacen únicos, realmente los voy a extrañar.
mi responsabilidad ya estaba escrita desde que nací y no puedo escapar de ella; podría haber una guerra por el simple echo de decir, "NO QUIERO SER JEFE YAKUZA".
-12 horas mas tarde-
estaba cansado del viaje, quería acostarme rápido en mi cama. salí del avión privado, entonces lo vi, aquel hombre de confianza, el favorito de mama, el señor BM.
a decir verdad, el nunca me inspiro confianza y no es por que sea de los dragones verdes; es solo intuición.
me saluda con su carismática cara de respeto, me lleva hasta el carro y hace preguntas triviales a lo que yo le contesto de manera cortante y formulada. veo a través de la ventana y noto que todo ha cambiado, el aire se siente diferente.
— llegamos joven Wang- me avisa con un tono fuerte.
bajo del carro y la servidumbre estaba presente en la entrada de mi casa, listos para atenderme en lo que yo deseara, les di un par de ordenes y seguí mi camino hacia mi cuarto.
estaba por dar mi primer escalón, pero siento una mirada sobre mi; levante mi cabeza buscando a esa persona. me quede pasmado ante él, bajaba con una sonrisa tan brillante que me segaba; mi dragón estaba enloqueciendo por ver a tal hermosura.
seguía quieto pero sin despegar el ojo de ese chico tan hermoso y brillante como el sol, sus pasos fueron mas rápidos y sin previo aviso me abrazo con mucha energía. su aroma era adictiva, cálida y refrescante como las suaves brisas en otoño.
— HERMANO TE EXTRAÑE MUCHOO- su voz energizante me hizo aterrizar de un solo golpe.
— ¿hermano?, ¿Ho-seok?-
— sii, soy yo, acaso ¿ya no reconoces a tu propio hermano?- lo mire, y sin duda alguna era Hoseok, aquel niño tan pequeño que una vez odie con toda mi alma.
— como esperas que te reconozca si eres todo un hombre ahora- mis nervios al hablarle se notaron.
— veo que estas cansado de tanto volar, creo que mejor deberías descansar en tu habitación, adiós Jackson.
antes que el se fuera, cogí su brazo; me miro sorprendido a lo cual yo también lo estaba.
—ah ah, esto, perdón, solo quería decirte que estas muy lindo.- su ceño se arrugo por 2 segundo y se relajo de inmediato, regalándome una sonrisa de corazón.
su cara me había regalo el sonrojo mas tierno, mi dragón revoloteaba de calidez.
[ ... ]
estaba en mi cama, con una sola imagen constante ¡¡¡HOSEOK CON UN SONROJO!!! ; me revolvía mi cabello con frustración, no podía sacármelo de la cabeza o tal vez no quería.
— ¡AHAHA! maldita sea, tal vez es que me sorprendió su belleza singular, nada mas.
— si, como no, admite que te atrae- me susurro mi dragón.
— CALLATE, ESTUPIDO LAGARTO, me iré a dormir.
— que te vaya bien con eso- me termino de decir.
cuando despierte necesito hablar con el, necesito sacarme este arrepentimiento que se me creo después de madurar, fui un patán y un muy mal hermano mayor para Hoseok; no quiero que me odie por todo el daño que le hice.
el solo fue una victima, de la porquería familia que tengo.
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