𝐿𝑜𝑣𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛 𖡡 [Kookmin]

ﾟ･:*✿ 𝟘𝟙.𝟘𝟘 - 𝔻𝕦𝕖𝕝𝕖𝕤 𝕋𝕒𝕟 𝔹𝕚𝕖𝕟.

En ese momento, mientras el alcohol pasaba de su boca, garganta y sentir como finalmente llegaba, se tenía la sensación de que llegaba a su piel, se sentía tan jodidamente bien. Ésta era tal vez la tercera botella que tomaba, y le resultaba impresionante como aún seguía consciente de todo lo que hacía y decía, aunque claro, mañana la resaca sería nefasta.

Se había vuelto costumbre que todos los viernes por la noche iba a ese bar donde pudo probarlo por primera vez, a ese bar donde comenzó el buen principio de catastrófica historia de amor. Donde compartieron pena y whisky. Donde sus labios se encontraron por primera vez, volviéndose imanes desenfrenados en busca de contacto carnal.

En ese mismo bar, de nombre "Wish" es donde Jeon JungKook se encontraba, ahogando su asquerosa vida amorosa en un montón de cervezas, vodka y whisky. Mientras "Dueles tan bien" sonaba de fondo.

Recostó su cabeza en la barra mientras una linda pelirroja se le acercaba, pero él estaba más ocupado mirando como las burbujas comenzaban a flotar en su bebida, que solo era una coca cola.

"Quieren... Que crea en el para siempre y finales felices".

—No comprendo que hace un chico tan lindo como tú tan solo... —murmura insinuaos, con un tono muy sensual y suave.

Pero el castaño estaba muy ocupado escuchando atentamente la letra de la canción y tarareando de manera torpe.

"Siempre acabo mal. Y me quiero matar".

—No es muy cortes de tu parte ignorar a una señorita — dijo de manera molesta. Lo había decidido desde que lo miro entrar como a eso de las diez, esa noche iba a tener un buen polvo con ese adonis y nadie lo iba a impedir.

Pero para Kook solo era otra adolescente más de la noche. No le interesaba tener nada con nadie, y menos con una mujer puberta. Porque desgraciadamente para él, su corazón había sido cruelmente robado por aquel de cabello azul y ojos grises, de pequeña estatura y un cuerpo de escultura, de aquel bajito y adorable chico, si, de Lee Jimin, esposo de su mejor amigo. Se sentía un imbécil, porque después de casi un año de su ausencia, no podía sacarlo de su cabeza, de como sus labios amoldaban tan bien, de como sus manos cabían perfectamente en las suyas, de como su cuerpo podía ser cubierto con el suyo de manera tierna, de como su voz eran tan suave y pulcra que siempre que hablaban parecía hablar tan tranquilo muy a pesar de tener miedo a ser descubiertos.

"Porque... Dueles, dueles, dueles. Más de debes... Dueles, dueles, y dueles tan bien".

Y mierda que si dolía...

—Oye-

Pero antes de que esa zorra barata siguiera hablando una linda pelinegra se acercó y abrazo el cuello a Kook, lo que hizo que ambos se sorprendieran mucho, pero Kook no tenía fuerzas de apartarla, algo le decía que no era un peligro.

—¡Amor! Gracias por esperarme, ya sabes como son en mi trabajo... —Y la chica miro a la pelirroja con recelo mientras molestia teñía su voz, bueno, ahora si que estaba confundido. — ¿Quién es ella?

Pero Kook solo se alzó de hombros. E inmediatamente, la chica pelirroja descubrió que era innecesaria ahí, y que esa hermosa tailandesa estaba dispuesta a tomarla del cabello y mandarla a tomar por culo si se enteraba que andaba de insinuosa con su pareja.

—Gracias... —murmuro a duras penas JungKook.

—Nada de gracias —la chica lo soltó y se sentó a su lado —, me debes dos cervezas.

"Sabes... Me sabes mejor que el alcohol".

Y por primera vez en meses, Jeon soltó una gran carcajada.

—Soy Jeon-

—Jeon JungKook —lo interrumpió la chica. —Soy Lalisa Manoban. Cursamos juntos bachillerato y la universidad. — Y estaba muy segura de haberlo conocido, él era el amigo de chico que se estaba en algo con el hermano mayor de su novia. Y como olvidar a ese tierno chico que miraba un poco demasiado a Park Jimin.

—Me sorprende que..., recuerdes q-quien soy — dijo divertido.

—Eres el chico que se comía con la mirada a Park Jimin ¿recuerdas?, el hermano de Chae, mi esposa.

"Lo sabes y tienes control, de toda mi estabilidad, mi estado de salud mental".

—Ya te recuerdo...

Y claro que recordaba a esa aniñada chica que le miraba mal cuando lo pillaba mirando a su cuñado.

—Estas aquí por él, ¿no?

"Cuidado me puedo quebrar".

—¿Qué comes que adivinas? —respondió lleno de sarcasmo.

—¿Deseas contarme? La noche es larga — le dijo, mientras sacaba un cigarro y encendedor de su bolso de chanel.

—Espero que sea lo suficientemente larga...

Iniciamos una nueva historia ^^
Un Mini-fic, espero les guste amores bellos. Actualizaré cada 3 días.

-Aleja_13park.