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Luego de aquel terrible incidente, y por otro lado, Duff se había encontrado con Axl para almorzar juntos como de costumbre.

— ¿Me compartes de tus papas?

— Tú no quisiste comprar, ahora te jodes.

— Anda, pelirroja, no seas odioso. —Con una sonrisa traviesa, el rubio le robó rápidamente una papa frita al contrario y la mordió por la mitad.

— ¡Carajo, McKagan! —Gruñó el ojiazul y rodeó el plato con sus brazos, como si de un fuerte se tratase—. ¡Tu hamburguesa ya tiene papas, come eso!

— Sí pero, tú tienes más. —Se cruzó de brazos y se encogió de hombros.

El descarado de Michael pensaba en seguir molestando a su amigo, pero eso se canceló cuando vio llegar a Slash, los cuales se saludaron.

— Hey, llegas tarde. ¿Dónde estabas? —Preguntó el rubio con curiosidad mientras miraba como el moreno tomaba asiento al lado de Rose.

— Detención. —Respondió con tranquilidad.

— ¿Ahora qué hiciste, negro? —Le dijo ahora Axl.

— Pff, pregúntale al idiota del director. Aparentemente me confundieron con otro estudiante que ha estado vendiendo drogas fuera de la institución. Como si todos los negros fuéramos iguales. —Comentó bromeando, eso no solía afectarle.

— Espera, ¿Drogas? Huh... No me impresiona. Te apuesto un dólar a que es Tommy. —Dijo Duff para luego darle una mordida a su hamburguesa.

— Sí pero, ¿Por qué me confundirían con él? Además... Ese estúpido tiene a todos amenazados con dinero, incluyendo al idiota del director. Así que, no hay manera de deshacerse de él, incluso si es quien está haciendo estas supuestas ventas.

— Mhm... Escuela de mierda. —Dijo Axl un poco más apagado, jugueteando con su pizza.

— Yo apenas y tengo dinero para pagarla... Aún así, mientras los tenga a ustedes, creo que todo estará bien. —Duff sonrió, intentando ser positivo.

— Sí... Además, lo que queda es el resto del año para irnos. Podré cumplir mi sueño de ser guitarrista, y todo el mundo va a querer ser yo. —Dijo con ego fingido, cosa que hizo reír a los otros dos chicos.

— Formemos una banda, hagamos giras, álbumes y seamos famosos. Es muy fácil. —Duff le siguió la broma y volvieron a reír, ahora los tres.

Como la banca era bastante larga, el rubio se recostó ahí, dejando caer su cabeza sobre los regazos del moreno.

— Bueno... Ojalá sí fuese así de fácil.

— Tampoco es imposible, Duff. Solo... Hay que esforzarse —Apoyó uno de sus codos sobre la mesa, sin dejar de ver al de ojos verdes. Luego llevó una mano de manera inconsciente hasta sus mechones rubios para jugar con ellos—. Oye, tu cabello es muy suave como para ser teñido.

— ¡Hey, cállate! —Le dio un golpecito en la mano que hizo reír al moreno.

— Ahora que lo pienso... ¿Ustedes vieron a Izz y a Steven hoy? —Intervino Axl al cambiar de tema, empujando un poco su plato hacia adelante.

— Eh, no. Bueno... Vi a Steven en la mañana, pero se fue con otro chico, aunque no lo reconocí. —Slash se alzó de hombros y Duff se incorporó en el asiento.

— Viejo, no desperdicies eso.

— Ya no quiero más —Le respondió al rubio y Rose se cruzó de brazos—. Uh... No tengo mucha hambre ahora.

— Con gusto lo comeré yo. —Con una sonrisa, Hudson tomó el plato.

— Mi hamburguesa está un poco más fría —Duff puso un momento su mano sobre el pan, y efectivamente, estaba más tibia ahora—. Bueno, así no se puede disfrutar, en fin. Hey, ¿Me acompañas a buscar a Izzy? —Mientras se levantaba le dio otro golpe al chico de rizos, ahora en la espalda.

— Sí, pero si dejas de golpearme, rubio. —Se levantó junto a él, sosteniendo el plato del pelirrojo con una mano—. Axl, ¿Vas a venir?

— Vayan ustedes, me quedaré aquí un rato más. Solo necesito revisar unas cosas. —Le regaló una pequeña sonrisa a ambos chicos, los cuales se la devolvieron antes de irse.

— Le dices a Axl que no desperdicie su pizza y ahí vas tú, dejando a tu hamburguesa abandonada. —Comentó Slash ya lejos del comedor, caminando al lado de McKagan.

— ¡Estaba tibia! Y la fila hacia los microondas es más larga que mi pene, así que olvídalo. —Bufó cruzándose de brazos y Saul rio a carcajadas.

— Sí, claro, amigo. Te creo. —Rodó sonriente sus ojos y cuando terminó, dejó el plato desechable en uno de los basureros cercanos.

Minutos después, entre bromas y risas, el teléfono de Duff resonó dentro su pantalón. Lo sacó mientras caminaba, hasta que se detuvo en seco y Slash lo miró curioso.

— Eh, Izzy me envió un mensaje... Dice que es urgente y está en la enfermería con Steven. —Dijo leyendo el mensaje de texto antes mencionado, cosa que preocupó a ambos e intercambiaron miradas.

No Quiero Dejarte Solo {Sluff}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora