Death Bound. Hanako waits for a slaughter

Planta B3 (parte 4)

Tiró de Hanako hasta la siguiente casa. Él estaba perdido, no respondía y parecía estar recordando algo horrible.

- ¿Por qué ahora, Hanako-kun?

Llegaron a una habitación de estilo japonés tradicional. No tuvo tiempo de analizarla, pero notó como en el suelo había un pequeño ramillete de una planta cuyo fruto era negro azabache.

~ Por fin llegáis a este punto.

- Yako... Déjanos pasar- Él hablaba con gran dificultad.

Ella rio fuertemente. ~ Parece que el veneno ha hecho efecto rápido.

Él trató de mantenerse en pie. Se liberó del agarre de Yashiro y dio dos pasos hacia delante. Cayó nuevamente al suelo.

- ¿Veneno? Entonces... ¿No era mentira?

~ Ehe... Rostro rojizo, debilidad, midriasis, dolor de cabeza, visión borrosa, hipertermia, dificultad para respirar, dolor en el pecho y alucinaciones. Parece que te traen recuerdos del pasado, ¿Cierto?

- Chks.

De su bolsillo sacó un frasco pequeño. ~ Esto es el antídoto. Si lo quieres, tráeme su cadáver o muere aquí. Sé que no te queda mucho tiempo.

- Nunca haría algo así.

~ ¿Por qué no? "Él" te pidió hacerlo.

- "Él" me pidió eliminar pecadores. Asesinar a una persona inocente es imperdonable.

~ ¿Inocente?~ Ella se rio nuevamente. ~ Realmente no sabes nada sobre ella. Cambiaré mi pregunta: ¿Cuánto saben sobre el otro?

Se mostraron reacios a responder al principio. Sin embargo, notaron que no llegarían a ninguna parte de esa forma.

- Yo solo sé lo que leí una vez... Que era descuidado por sus padres... tenía un hermano menor y... asesinó a su familia.

- Yo no sé nada sobre ella.

~ Pues déjame decirte que esa "inocente" niña que hay a tu lado tiene un pasado terrible.

- ¡Eso no es verdad!

- Si ella dice que no es verdad, yo la creo.

Hanako confiaba en ella. Eso debía hacerla feliz. Sin embargo, algo le oprimía el pecho. ¿Qué era?

Cierto, que le estaba mintiendo.

~ Otra pregunta, ¿Cuánto darían por el otro?

Armas de fuego apuntaron hacia Yashiro. Ella se paralizó asustada.

~ Si quieres salvarla, dime: ¿Cuál es tu pecado, Hanako?

- ... Yo... Asesiné... A mis padres...

~ ¿Y qué pasó con tu hermano?

- Él... yo...

~ ¿Qué le hiciste?

- Murió.

~ ¿Cómo?

- ...

~ ¿Sí?

- ¡Yo lo asesiné! Yo... lo maté...

~ Ehe... Pobre del pequeño Tsukasa. No lo merecía. Tan cruel, ¿Cómo pudiste hacerle eso?

- ¡Cállate! No menciones su nombre con tu sucia boca, Yako.

La tensión que hubo durante su conversación desapareció al Hanako romper en llanto. Se mantuvo en silencio, pero las lágrimas no se detuvieron. Toda su aura expresaba dolor.