Me invitó a mirar el cielo🌠

1 Nuevos Vecinos

LARA

*1ro de Agosto*

-¡No puede ser!- Dije con cara de angustia.

- Cariño, sé que querías ir con nosotros, pero esta vez no se va a poder.

- ¡Pero mamá, sabes que es mi último mes antes de la universidad y no he salido a ningún sitio esperando por esto!

- Lara...

-¡Mamá! Llevo meses esperando ir con ustedes a ese crucero. ¿Por qué no puedo ir?

Ella ni siquiera pareció haberme escuchado. Estaba centrada en mirar por la ventana.

-¡¡¡Mamaaaa!!!- Dige alzando la voz.

-Por cierto, tenemos vecinos nuevos- Dijo con toda la calma del mundo.

Puse los ojos en blanco.

<<< Como si me importara quién se muda a mi vecindario>>>

- Mamá, ¡no me has respondido!

- Lara, el jefe del crucero nos ha dicho que en este viaje iran personas de altos rangos, jefes, ejecutivos y esa clase de personas. Solo las personas autorizadas podrán estar ahí y solo nos han dado autorización a tu padre y a mí.

Mamá y papá trabajan con turistas; son parte de el equipo que traza las rutas, o sea Guias turísticos y traductores.

Fueron contratados para viajar en un crucero que terminará su viaje nada más y nada menos que en Hawái.

¿Les gustaría ir?

Pues a mí sí, y me acabo de enterar de que eso no va a suceder.

-¿Entonces que voy a hacer mamá? Tenia todo planeado para este viaje.- me lancé a la cama derrotada-¿Ahora debo quedarme sola con Laurie? ¡¡¡Es un nerd!!!

- ¡¡¡Lara!!!- Dijo seria.-Tu hermano no es un nerd. La medicina no es un juego, se necesita estudiar y prepararse y el se lo toma muy en serio.

-Pfffff ¡ay mamá! ¿Te das cuenta de que se pasa todo el tiempo en el cuarto metido con libros y ni siquiera estamos en etapa escolar aún?

-Eso es bueno, será un gran médico. -Dijo zanjando la conversación y cerrando la puerta del cuarto al salir.

<<<¡No me lo puedo creer! El crucero...¡¡¡CRUCERO!!! Es que me acaban de arruinar la vida. Voy a morir aquí, sola, sin nada ni nadie para impedirlo.>>>

- AHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!- Solté un grito al aire.

Siempre hago lo mismo cuando estoy estresada. Gritar libera estrés y tensión, pero también libera la ira de mi madre, que me ha regañado varias veces por eso.

Esta vez, lo hice sin que me importara nada, a fin de cuentas estoy molesta con ella hasta cierto punto.

- Ey tú...

Di un respiro saliendo de mis pensamientos. En medio de la calle, con una sudadera negra y pinta de skater, había un chico mirándome directamente.

Me quedé quieta, como si eso me hiciera invisible.

- Es contigo, la que grita como loca.

- ¿Disculpa?

- Estás disculpada, niña.- Dijo con una media sonrisa.

- ¡Niño tú!- No soporto que me llamen así. - Y no te pedí disculpas, imbecil.

Comenzó a reír, con una sonrisa asquerosamente bonita.