14 Tormenta

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LARA.

<<< Estoy nerviosa. ¿Te puedes calmar Lara? La idiota de Leah se va a dar cuenta de que te pasa algo. ¡Relajate! Eso es, a respirar profundo.>>>

- ¡¡¡Esooooo chicos!!! ¡¡¡Lara están a punto de ganar!!! ¡¡¡Vamos Leonessss!!!

Leah no paraba de gritar. O más bien la gente no paraba de gritar. El equipo de Laurie, Los Leones, estaban ganando y todos estaban emocionados.

Por mi parte, me importaba un bledo todo aquello, solo pensaba en Daniel, y la molestia tan fuerte que estaba reprimiendo desde que mi vecino estupido, decidió hacerce el super héroe cristiano que salvará al mundo de los abortos.

¿Molestia? Nah, molestia es poco. Estaba furiosa, llena de ira, odio, rencor, impotencia. ¿Saben como se siente eso? Como si fueras una bomba de tiempo que se va calentando hasta explotarle la cabeza a todos lo que estén alrededor.

- Voy al baño.- Me puse en pie.

- ¡¿Qué?!

Dejé a Leah sin repetir una palabra. Estaba aturdida, y justo cuando ya estaba saliendo de las gradas resbalé y caí al suelo con un feo sonido.

- Mierd...

- ¿Estás bien?

- Si, si...todo en orden.- Me apoyé en los codos y alcé la mirada.

- No lo creo.

Me extendió la mano y me puso en pie.

- ¿Qué dijiste?

- Que a veces somos cortos de vista, no vemos más allá de nosotros mismos, o de nuestro nivel, pero, si subimos a una montaña, entonces veremos con otros ojos y entenderemos lo limitada que estaba nuestra vision.

- ¿Eh?

- Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Dice el Señor.

- ¿Qué Señor?

Las voces llenaron el aire de gritos. Me giré asustada y vi a todos de pie gritando.

- ¡¡¡ LE-O-NES!!! ¡¡¡LE-O-NES!!!

Ganaron.

Me volví hacia el muchacho de antes, pero se había ido.

Miré en todas las direcciones extrañada. No lo vi.

Me apresuré al baño y me lavé la cara frente al espejo. Estaba estresada y se notaba en cada centímetro de mi cuerpo.

Al salir del baño, los hechos sucedieron así:

Fui empujada, magullada y pisoteada por todas las personas que salían.

Odié a Daniel.

Fui encontrada por Matt, quien me llevó junto a los demás y vi a Laurie a la cara.

Odié profundamente a Daniel.

Sonreí como una estupida, sin saber que decir o hacer.

Odié hasta mi existencia, y a Daniel.

- Hola hermanita, ¿dónde está Susana?

- Hooola nerd, digo...campeón. Felicidades por el triunfo. También me alegra verte.

Frunció el ceño, y eso no era bueno.

<<< Okayyyyy>>>

- No se siente bien.- Terminé por decir.

- ¿Todavía?

Me invitó a mirar el cielo🌠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora